3 Aristóteles y la época del helenismo

CONTEXTUALIZACIÓN  DE  PLATÓN

4.1 El presente texto pertenece a la obra más rica y compleja de Platón, “La República o “El Estado”, cuyo título no se corresponde con el original griego “Politeia”. El diálogo no fue escrito de un modo seguido. Primero escribíó  el Libro I, durante el período socrático y, más tarde, el resto de los libros, ya en el período de madurez. Probablemente lo compuso entre el año 388 y el 367 a.C., entre el período comprendido entre le primer y segundo viaje a Siracusa. “La República” consta de diez libros, que tienen como tema central la justicia y el Estado y en los que Platón pretende hacer una crítica a la organización política y social que dio muerte a Sócrates, exponiendo así un modelo de Estado ideal, donde la justicia sea posible. Dicho Estado estaría  formado por tres clases sociales (gobernantes, guerreros, trabajadores), que se corresponden  con las tres clases de alma existentes (racional, irascible y concupiscible) y con la virtud de cada una (prudencia, fortaleza y templanza). El mito de la caverna pertenece específicamente al Libro VII de “La República


a )Primeros diálogos o diálogos socráticos.  En ellos se contienen de modo predominante preocupaciones éticas. Entre éstos destacan Apología de Sócrates, Critón, Protágoras(o sobre los sofistas), Cármides y Eutifrón.


b)Época de transición.  Primeros diálogos de la Academia; continúan las cuestiones éticas, pero cobran también intensidad los problemas políticos, así como los temas relacionados con la preexistencia e inmortalidad del alma humana. Podemos considerar como los más importantes de este período Gorgias, Menón, Cratilo, Menéxeno


e)Época de madurez o diálogos doctrinales.  En éstos formuló la doctrina de las Ideas como fundamento de la teoría ética y política; destacan Banquete, Fedón(o del alma), República(o del Estado) y Fedro(o del amor).


  1. Diálogos de vejez o diálogos críticos.  En ellos Platón sometíó en cierto modo a revisión sus propias ideas anteriores; podemos señalar como los másimportantes Teeteto, Parménides, Sofista, Político, Filebo, Timeo y Leyes.


4.2  El contexto filosófico de Platón está formado por su relación con los sofistas. Con los sofistas polemiza a menudo, pero también en muchos casos los respeta y admira (como, por ejemplo, a Protágoras y Gorgias, los más importantes). Fueron el contrapunto necesario del pensamiento ético y político de Platón. Los sofistas tendían al relativismo (no hay verdades absolutas) y al escepticismo (no se puede conocer la verdad), antepónían a veces los intereses prácticos a las convicciones morales y estaban, como Platón muy interesados en la retórica. Plantearon la célebre distinción entre lo que es por naturaleza (physis) y lo que es por acuerdo humano o convencíón (nomos), distinción tan importante en cuestiones políticas y morales.

    Platón conocíó las obras de todos los filósofos presocráticos, pero elogió a Parménides y coincidíó sobre todo con él, especialmente en la distinción de los dos niveles de realidad (el intelectual y el sensible) y en las carácterísticas del ser verdadero: Lo que decía Parménides del Ser lo aplica Platón a las Ideas. El influjo órfico (y por tanto de origen oriental) le vino de los pitagóricos y hay que reconocer que esa influencia fue de enorme importancia en Platón, quien llegó a decir que las Ideas son números. Además, esa idea de que el cuerpo es el sepulcro o la cárcel del alma, así como las ideas referidas a la transmigración de las almas y a la necesidad de la purificación para alcanzar una vida más alta, son también influencias órficas y pitagóricas.

     Finalmente, la influencia de Sócrates seguramente fue la decisiva: él hizo que Platón se dedicara a la filosofía y el recuerdo del maestro (Sócrates muere siendo joven Platón), así como su honda preocupación ética y política, le acompañaron toda su vida. No parece que Sócrates concibiera una especie de teoría de las Ideas, pero su preocupación por alcanzar definicionesuniversales de las virtudes, principalmente, influyó en la teoría platónica. Además, destacamos la idea central de la filosofía socrática: la interioridad
: el conocimiento del alma como nuestro verdadero ser, y la consecuencia moral de todo ello: hay que preocuparse del alma y mejorarla, en lugar de preocuparse por los bienes externos. La virtud, para Sócrates, se fundamentaba en el autodominio y dependía sobre todo del conocimiento:

El verdadero sabio no obra  mal y por eso mismo es feliz

. Todas estas ideas serán recogidas por Platón.

    Y vamos a referirnos brevemente a Aristóteles. Si el fragmento a comentar alude a la teoría de las Ideas o al tema del conocimiento, se podría hablar de la crítica que hace Aristóteles a Platón en cuanto al conocimiento, pues para Platón apenas tiene valor lo que conocemos por los sentidos y en cambio para Aristóteles el conocimiento no sería posible si no fuera a través de estos; todo lo cual influirá de manera decisiva en su modo de entender la estructura de la realidad del mundo y del cuerpo humano.


     Platón nacíó probablemente en Atenas en el año 427 a.C. (S. IV a.C.) durante los últimos años del mandato de Pericles. Fue hijo de una familia aristócrata y recibíó una esmerada educación. Atenas ofrecíó a Platón varias situaciones políticas, desde la democracia de Pericles al Gobierno de los Treinta Tiranos, incluso vivíódurante los primeros años del gobierno de Filipo II

Su niñez y juventud estuvieron enmarcadas en un período agitado por la Guerra del Peloponeso. A los veinte años conoce a Sócrates, que se convirtió en su maestro. A partir de entonces, se inicia su vocación política, primordialmente orientada a la reflexión política y no a la práctica, debido a la injusticia que se cometíó contra su maestro Sócrates, en la que Platón pudo ver que Atenas caminaba hacia la decadencia. Muerto Sócrates, viajó por el Mediterráneo, regresando siempre a Atenas donde murió en el año 347 a.C. Y en la que fundo la Academia, primera escuela filosófica organizada para educar a los futuros gobernantes-filosóficos que perduró hasta el S. VI de nuestra era.

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