En Busca de la Verdad: El Método Cartesiano

La Búsqueda de la Verdad y el Desarrollo del Método

El objetivo de Descartes es encontrar la verdad para, de ese modo, ser feliz. Elabora el método por dos motivos: para dirigir correctamente la razón y para adquirir conocimientos progresivamente. Afirma que todos tenemos la capacidad de razonar, pero que la encaminamos de manera distinta. Expone un método sin intención doctrinal ni meramente autobiográfica, fundamentado en sus viajes y experiencias.

El Recorrido Intelectual de Descartes

Desde niño, Descartes sintió inquietud por aprender, pero al finalizar sus estudios comprendió que no había alcanzado la verdad (“Sólo sé que no sé nada”, Sócrates), aunque le ha valido la pena para evitar ser engañado. A continuación, hace un repaso por las disciplinas en las que ha sido educado. Destaca de ellas puntos positivos, pero al mismo tiempo critica el conocimiento infructuoso del cual ha sido partícipe.

  • Retórica y poesía: Son dones naturales, no productos del estudio.
  • Historia: Reprueba la omisión de determinados hechos y su desconocimiento del presente.
  • Matemáticas: Reconoce su certeza y evidencia, pero critica su falta de utilidad.
  • Escritos de costumbres: No dan un conocimiento suficiente de la virtud.
  • Teología: No expone sus razonamientos por exceder su comprensión.
  • Filosofía: La diversidad de opiniones genera una disputa donde todo es incierto, al igual que las ciencias basadas en ella (física, medicina).
  • Pseudociencias (alquimia, astrología, magia): Muestra abiertamente su desprecio.

Tras abandonar los estudios, se dedica al “gran libro del mundo”, es decir, a viajar. Aconseja no excederse en los viajes para no convertirse en extranjero en el propio país. Estos viajes le llevan a conocer otras gentes, costumbres, cortes, ejércitos, etc. Ve tanta diversidad que concluye que lo diferente no debe verse como ridículo o extraño, ya que ha sido influenciado por la costumbre y el ejemplo, distintos en cada región del mundo. Coleccionando experiencias y reflexionando sobre ellas, comprende que las decisiones individuales son más provechosas, ya que se pagan las consecuencias de haber juzgado mal. Por todo ello, decide finalmente analizar todo según su razón, viendo claro en sus acciones y andando con seguridad por la vida.

La Perfección y la Imperfección en las Obras Humanas

Descartes sostiene que las actividades realizadas por una persona son más perfectas que si son obra de muchos (las construcciones son imperfectas), excepto en el gobierno de un pueblo, que puede tornarse peligroso (Esparta). La religión es perfecta porque ha sido creada por Dios. Critica las materias de las escuelas porque son impartidas por muchos. El estado es imperfecto porque lo han influenciado distintas personas, pero afirma que el tiempo lo corregirá. No quiere pasar a la historia como un reformador, solo aspira a mejorar como persona. El ser capaz de dejarlo todo y partir de cero es algo que no todo el mundo está capacitado para hacer (precavidos y precipitados), ya que la virtud está en el medio (Aristóteles). Si no hubiese viajado y estudiado, se habría situado entre los precavidos.

Los Preceptos del Método Cartesiano

Para elaborar su método, Descartes se basa en la lógica, el álgebra y la geometría, aunque no le resultan del todo útiles. Pretende formular unos preceptos tan simples y universales que su aplicación sea posible a cualquier ciencia.

  1. Evidencia: Sólo será verdadero aquello que se muestre de forma clara y distinta, de lo que se esté totalmente seguro. Hay que intentar no ser ni precavido ni precipitado.
  2. Análisis: División de las cuestiones en las partes necesarias.
  3. Síntesis: Poco a poco se asciende a un grado mayor de dificultad.
  4. Enumeración: Asegura no haber dado pasos en falso.

Si se aplica el método, todo lo que se descubra será verdadero, y su uso facilitará el trabajo. La verdad ha de ser algo objetivo, universal y necesario, y nunca se olvida. A través de su método, Descartes puede resolver grandes problemas. Estudia matemáticas, ya que los matemáticos han sido los únicos que han conseguido llegar a la verdad, pero como abarca muchos campos, se centra en el álgebra y la geometría. Lo ideal sería actuar de esta forma en el resto de disciplinas, pero sería costoso y difícil, por lo que decide aplicarlo únicamente a la filosofía (base de todas las ciencias). No obstante, como la filosofía carece de cimientos sólidos, decide continuar estudiando matemáticas para llegar a la verdad.

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