Filosofía de René Descartes: Duda Metódica y Racionalismo

René Descartes: La Búsqueda de la Verdad a través de la Razón

Contexto Histórico

René Descartes nació en La Haye en 1596 en el seno de una familia católica romana perteneciente a la baja nobleza. Estudió a Aristóteles en los textos escolásticos y se graduó en leyes. Más tarde, se trasladó a Holanda para estudiar matemáticas y seguir la carrera militar. Durante un viaje por Europa, donde estudió “el libro del mundo”, decidió dedicar su carrera científica y filosófica a la búsqueda del conocimiento para ayudar a la humanidad. En este viaje, concibió el método universal de razonamiento deductivo y estudió esoterismo, aunque resultó decepcionado. Descartes no se sentía atraído por la vida militar; se había enrolado en el ejército para poder viajar, ya que pensaba que conocer otras culturas era una buena forma de aprender. Posteriormente, regresó a Holanda, donde escribió las “Reglas para la dirección del espíritu”. A partir de 1629, se dedicó más a escribir y publicó, entre otros, el “Discurso del método”, “Meditaciones metafísicas” y “Principios de la filosofía”.

Descartes vivió durante el Renacimiento, un movimiento que buscaba recuperar las teorías originarias que se habían desvirtuado durante la Edad Media. El Renacimiento intentaba, a través de la educación, conseguir que se respetara la dignidad humana y que las distintas ideologías y creencias pudieran convivir.

La Filosofía Cartesiana: Duda Metódica y Racionalismo

Posición 1: La Duda Metódica y la Razón

Según Descartes, la filosofía debe basarse únicamente en evidencias absolutas, en ideas claras y distintas (criterio de verdad cartesiano). Para ello, escoge el camino de la duda metódica: dudar de todo, pero utilizándola solo para buscar la verdad indubitable. No se trata de una duda escéptica, sino de una herramienta para encontrar la certeza.

Descartes parte de la confianza plena en la razón humana. Considera que la razón es la única facultad que puede conducir al hombre al conocimiento de la verdad, oponiéndose a los sentidos, la imaginación y la pasión, que son considerados engañosos. El poder de la razón radica en la capacidad de sacar de sí misma (intuición) las verdades primeras y fundamentales, llamadas ideas innatas, a partir de las cuales, y por deducción, es posible obtener todas las demás.

En teoría, se podría acceder al conocimiento por dos vías: la experiencia, que posee un componente objetivo (mundo exterior) y otro subjetivo; y la razón, que efectúa actos del entendimiento al margen de los sentidos. Descartes acepta la visión científica del mundo vigente en el siglo XVII: el mecanicismo. El universo queda fraccionado en dos mundos: la máquina y el pensamiento. Además, en el siglo XVII triunfa el subjetivismo, que afirma que las cosas son solo conocidas en las ideas, por lo que es posible dudar de su existencia. Las ideas para Descartes son el objeto del pensamiento y actos mentales que poseen un contenido objetivo.

Posición 2: Tipos de Ideas y el Proyecto Cartesiano

Descartes distingue tres tipos de ideas:

  • Adventicias: Aquellas que parecen provenir de nuestra experiencia externa.
  • Facticias: Aquellas que la mente construye a partir de otras ideas.
  • Innatas: Aquellas que el pensamiento posee en sí mismo.

El proyecto cartesiano supone la unificación de todas las ciencias en una sola. Esto es posible, según Descartes, porque:

  1. Todas las ciencias son producto de la sabiduría humana. La razón es una y la misma para todos los seres humanos.
  2. Existe un método universal, único para todas las ciencias. Se trata de asumir la autoridad de la razón y obtener un método que le sirva para distinguir lo verdadero de lo falso, así como para dirigir su vida y evitar la disparidad de opiniones que han desacreditado a la filosofía. Es un conjunto de reglas fáciles de seguir: evidencia, análisis, síntesis y comprobación.
  3. La formulación de unas normas de moral provisional. Expuesta en el Discurso del método, se concreta en tres reglas:
    • Obedecer las normas y costumbres de mi país… ajustándome en todo lo demás a las opiniones más modernas… que resulten más aceptadas por las personas más sensatas.
    • Ser en mis acciones lo más firme y resolutivo, superando las dudas.
    • No hay nada que esté enteramente en nuestro poder salvo nuestros pensamientos.
  4. Hay una sola ciencia con diversas ramificaciones, es decir, aunque existan ciencias distintas, todas ellas forman una unidad.

Posición 3: El Método Cartesiano y la Demostración de la Existencia de Dios

El método cartesiano es más práctico que teórico; es un conjunto de recetas para alcanzar la verdad. La primera regla es la de la evidencia y consiste en partir de unos axiomas primitivos totalmente seguros. Esta necesidad de no introducir elementos dudosos se apoya en la seguridad de que la razón funciona bien y basta con no dejarse influir negativamente desde el exterior (filosofía de la cautela). La segunda regla es la del análisis, hasta llegar a las naturalezas simples para intuirlas; la tercera es la de la síntesis y la cuarta es la regla de la comprobación, por medio de las enumeraciones y revisiones.

Descartes demuestra la existencia de Dios a partir de la idea de Dios. Usa demostraciones distintas:

  • Prueba gnoseológica: Puesto que la idea de perfección infinita no es ni adventicia ni facticia, sino que es innata, es decir, forma parte de mi propia naturaleza, ha sido puesta en mí por alguien que posee tanta realidad objetiva como esa idea, es decir, por Dios.
  • Prueba de la causalidad: Yo soy un ser que, teniendo la idea de perfección, no soy perfecto, luego no me he creado a mí mismo, porque me habría dado las perfecciones que conozco que existen. Por tanto, ha de existir un ser perfecto que me ha dado la existencia.
  • Argumento ontológico, tomado de San Anselmo de Canterbury: Tengo la idea de un ser sumamente perfecto. Ahora bien, en la idea de absoluta perfección está contenida la existencia, porque, si no existiera, le faltaría una perfección, a saber, la existencia. Luego, la absoluta perfección, es decir, Dios, existe.

La sustancia es un concepto fundamental que Descartes define como “una cosa que existe de tal modo que no necesita de ninguna otra para existir”. Así definida, solo Dios sería sustancia, puesto que los demás seres son creados y conservados por Dios. Llama atributos a aquello por lo cual una sustancia se distingue de otras. Junto a los atributos esenciales existen modificaciones de los mismos que, al afectarlos, delimitan también a la sustancia. Son los modos.

Posición 4: Alma, Certeza, Evidencia, Idea, Dios, Claridad

Alma: Res cogitans o sustancia que piensa, es lo más característico de la realidad de cada individuo.

Certeza: Es la seguridad con que Descartes admite que una idea es verdadera. La certeza es la característica de la evidencia.

Evidencia: Patentización de la verdad de una idea. Tiene dos notas características: claridad y distinción. Es un criterio de conocimiento de carácter subjetivo.

Idea: Resultado de la actividad del pensamiento. El pensamiento piensa ideas, no el mundo a través de las ideas.

Dios: Una de las tres sustancias, es la única que es causa de sí misma y tiene como atributo fundamental la perfección.

Claridad: Presencia ante la mente de todos los elementos que componen una idea, gracias a dicha presencia el pensamiento distingue bien entre esos elementos.

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