Estoicismo: Zenón de Citio y las Tres Partes de la Filosofía
El Estoicismo fue fundado por Zenón de Citio. Esta escuela filosófica divide la filosofía en tres partes:
- Física: Se ocupa del estudio de los cuerpos. En ella se realiza una síntesis original de la filosofía de pensadores anteriores como Heráclito, Aristóteles y Platón, reinterpretándolos según sus propios intereses.
- Lógica: Trata de todo lo relativo al pensamiento y al lenguaje, incluyendo el conocimiento, la gramática, la retórica y la semántica.
- Moral: Se centra en guiar la conducta para alcanzar la felicidad. Esta se encuentra en la aceptación del destino como un estado de ánimo sereno e imperturbable, conocido como apatheia.
San Agustín de Hipona: Vida, Obras y Doctrinas
Vida y Obras
Aurelio Agustín nació en Tagaste en el año 354. Hijo de padre pagano y madre cristiana, inicialmente se adhirió a las doctrinas de los maniqueos. Vivió en Milán, donde conoció al obispo Ambrosio y asistió a sus predicaciones, centradas en una interpretación alegórica de la Biblia. En el año 386 se convirtió al cristianismo. Fue ordenado sacerdote y, más tarde, obispo de Hipona, ciudad en la que murió en el año 430. Escribió muchas obras orientadas a combatir las herejías, entre las que destacan: Sobre la felicidad, Sobre la inmortalidad del alma, Sobre la doctrina cristiana, Las confesiones y, la más importante, La Ciudad de Dios.
El Problema del Mal
Un problema que preocupó enormemente a Agustín fue el del origen del mal. Esto lo llevó a adherirse en su juventud a las tesis maniqueas, según las cuales hay dos principios que rigen el cosmos: un principio del bien y un principio del mal. La lectura de Plotino le ofreció una nueva perspectiva: el mal es puro no ser, no tiene carácter positivo, sino que es ausencia de bien.
El Problema de la Libertad
El hombre está en el mal porque ha pecado. Para que el hombre haya pecado y pueda ser culpable, tiene que haber sido libre. Una vez caído en el pecado, el hombre no puede salvarse por sí mismo; necesita de la fe, que es concedida por Dios. Es una gracia que Dios concede a quien quiere en virtud de designios que solo Él conoce.
La Verdad y el Conocimiento Interior
Ciencia y Sabiduría
Agustín parte de una concepción de la verdad (y del ser) vagamente platónica: la verdad (y el ser) se da en lo inmutable, en lo eterno. Lleva a cabo una fundamentación del conocimiento a partir de la autoconciencia. Lo sensible concibe la verdad y el ser como lo inmutable, por lo que habremos de buscarlo en el interior, en el alma. Allí descubrimos que, además de las sensaciones, hay reglas en base a las cuales juzgamos acerca de las sensaciones y de las cosas. El alma compara algo actual con algo que ya no es, agrupa la diversidad de datos sensibles y ordena los datos sensibles en base a razones, a reglas.
Doctrina Agustiniana de la Iluminación Divina
Agustín afirma que el alma conoce las ideas por la iluminación divina. La iluminación es un proceso paralelo al de la creación. Dios crea el mundo, da ser a todas las cosas y, en tanto ilumina a los hombres, hace que estos puedan ver las verdades.
Aristóteles: Vida, Obras y Principales Doctrinas
Vida
Aristóteles nació en Estagira, hijo del médico de la corte macedónica. Fue enviado a Atenas e ingresó en la Academia de Platón. Filipo II de Macedonia lo eligió como preceptor de su hijo Alejandro. Más tarde, Aristóteles fundó su propia escuela en el Liceo, donde había un paseo cubierto en el que solían dialogar él y sus discípulos. Por esta razón, a los aristotélicos se les llamó en el futuro «peripatéticos».
Obras
Las obras de Aristóteles se pueden clasificar en dos grupos: exposiciones exotéricas y exposiciones pedagógicas. Estas últimas se denominaron posteriormente «esotéricas». Entre sus escritos más importantes se encuentran: Órganon, Física, Ética a Nicómaco, Política, Poética y Retórica.
Hilemorfismo
Aristóteles rechaza la teoría de las ideas de Platón, pero no del todo lo que Platón entendía por ideas. Aristóteles no concibe al universal como algo trascendente, separado del mundo físico, sino como algo inmanente a este. A esto, Aristóteles lo denomina «forma», que junto con la «materia» constituye las cosas del mundo físico. Esta teoría, según la cual todo se compone de materia y forma, se denomina «hilemorfismo».
Clases de Movimiento
- Sustancial: Es el paso de una cosa a ser otra de distinta especie.
- Accidentales: Son aquellos en los que no se corrompe ni se genera la forma sustancial.
- Cualitativos: Pérdida o modificación de alguna cualidad.
- Cuantitativos: Aumento o disminución de la sustancia que cambia.
- Locales: Desplazamiento por movimiento de rotación o traslación de la sustancia que cambia.
Causas del Movimiento
- Causas Intrínsecas: Afectan al cambio desde dentro de la sustancia que cambia. Son:
- Material: Es potencia, recibe la nueva forma y, en ese sentido, es causa del movimiento.
- Formal: La nueva forma producida, que puede ser una forma sustancial.
- Causas Extrínsecas: Afectan al cambio desde fuera de la sustancia que cambia. Son:
- Agente: Es el agente o motor del movimiento.
- Final: Es el fin hacia el que se cambia.
Metafísica o Filosofía Primera
Aristóteles utiliza los términos «filosofía primera» o «sabiduría» para designar a la ciencia que trata de una serie de temas de interés principal. Esta ciencia tiene dos vertientes: una ciencia de la primera causa del movimiento y una ciencia del ser en tanto ser.
Teología
Según Aristóteles, tiene que haber un primer motor, un motor que mueva sin ser movido, que sea inmóvil. A esto es a lo que llama «primer motor inmóvil» o «Dios».
Dios como Acto Puro y Forma Pura
Dios es inmóvil, ha de carecer de materia; será solo forma, forma pura. Dios es inmóvil, no podrá ser nada en potencia, por eso es solo acto puro.
El Ser no es el Género Supremo
El ser es aquello en que coinciden todas las cosas, pero ser no significa lo mismo en todos los casos en que se usa. Por ejemplo, «esto es un caballo» y «esto es una vaca». Estas formas de ser no significan lo mismo entre sí. A esto, Aristóteles lo llama «categorías».
La Unidad Análoga del Ser
La sustancia es, por lo tanto, el ser por excelencia. La expresión «ser» no es unívoca ni equívoca. La expresión «ser» es análoga, nombra una multiplicidad de cosas diferentes pero con referencia a algo común.
Ética
En tanto su alma engloba la vida vegetal, el hombre tiene movimientos propios como el crecimiento, la nutrición y la reproducción. En tanto que engloba la vida animal, tiene movimientos propios como las sensaciones, las apetencias y los movimientos locales. Pero el hombre también tiene movimientos propios del hombre, y estos movimientos son de dos tipos:
- Orientados a la acción: Cuando el propio movimiento es el fin buscado, cuando el movimiento es acto.
- Orientados a la producción: Cuando el movimiento tiene por objeto hacer algo distinto del movimiento mismo.
Del primer tipo de movimientos propios del hombre se ocupan la ética y la política; del segundo tipo, las ciencias apropiadas al objeto a producir.
Todos los movimientos pasan del ser en potencia a ser en acto. Ser en acto es la finalidad del movimiento.
- Fines útiles como medios: Son los que mueven al hombre, pero solo como medios para conseguir otros fines.
- Fines últimos: Serán los que no están condicionados por otros y valen, por lo tanto, en sí mismos. Aristóteles señala que el fin o bien último es la felicidad.
La Felicidad
Aristóteles considera que la felicidad consiste en que cada cosa haga lo que le es propio, en que cada cosa llegue a ser lo que realmente es o, dicho de otro modo, en que cada cosa alcance su plenitud. Por eso, para descubrir en qué consiste la felicidad para el hombre, habrá que descubrir primero qué es lo propio del hombre, qué es lo que hace al hombre ser hombre.
Al controlar racionalmente tales pasiones y deseos, al satisfacerlos bajo el dominio de la razón, evitamos que nos lleven a desviarnos y nos mantenemos en el camino del medio.
La Virtud
En general, la virtud es asociada a la excelencia, es decir, al hecho de ser mejor. Para Aristóteles, la virtud reside en aquellas capacidades que hacen al hombre un ser pleno y, por ello, feliz. Tales capacidades consisten en una serie de «hábitos» o costumbres: la costumbre de ejercitar la razón y la costumbre de guiar nuestros deseos y pasiones por la prudencia.
- Virtudes intelectuales o dianoéticas.
- Por otro lado, están las virtudes que Aristóteles llama morales: consisten en guiar las pasiones, deseos y emociones.
La Virtud y la Justicia
Aristóteles distingue entre varios tipos de justicia:
- Justicia general o legal.
- Por otro lado, están los tipos particulares de justicia: La justicia conmutativa, la justicia correctiva y la justicia distributiva.