San Agustín de Hipona: Niveles del Conocimiento

San Agustín propone tres niveles de conocimiento:

• Sensible: Representa la experiencia cotidiana y el mundo circundante; los sentidos son sus instrumentos.
• Racional: Depende del alma, pero se produce a raíz del “contacto” con la realidad.
• Fe Iluminación: También llamado racional superior, es conocido como sabiduría. Conocimiento de las verdades universales y necesarias.

Las ideas se encuentran en la mente de Dios. (Iluminación – Gracia – Concesión Divina). Dios es el único camino de la verdad y de la salvación.

Santo Tomás de Aquino: La Razón como Guía de los Actos Humanos

Según Santo Tomás de Aquino, todos los actos humanos deben estar ordenados según las exigencias de la razón (ratio). La razón se preocupa por la aspiración de vida individual. Las acciones humanas expresan la relación entre la naturaleza y la razón. La ley divina es perfecta y añade algunas reglas de buena costumbre a la ley natural. La moral de ascenso y retorno a la esencia del ser. La sindéresis es un hábito (tendencia al bien) y también lo es la ley natural.

Maquiavelo: El Fin Justifica los Medios

Este modelo es aplicable a grupos de personas. Según Maquiavelo, quien ostenta el poder puede desentenderse de los valores cristianos y católicos para lograr el fin. El fin justifica los medios, siempre y cuando ese fin sea superior, un beneficio amplio, en busca del bien común. Son muy pocos los que temen la virtud política, por esto se diferencia si el fin justifica los medios.

Hobbes: Egoísmo y Leyes

Hobbes considera que el ser humano es egoísta por naturaleza y no tiene razón para hacer valer sus deseos. Propone dejar de lado una ética personal e individual y enfocarse en las leyes. Un hombre sería bueno si paga sus impuestos y sigue el reglamento de la sociedad.

Para Hobbes, las leyes deben ser transparentes y penalizar a quienes las infringen. El incumplimiento de la ley es penalizado dependiendo del delito. El respeto a la comunidad es fundamental para alcanzar la felicidad, poniendo límites a los deseos de las personas. La ética y la jurisprudencia van de la mano.

El Conde de Shaftesbury: Ética y Estética

Su ética se inscribe en el naturalismo optimista y estético, al suponer que la naturaleza humana ha preparado al hombre para ser estéticamente feliz. La naturaleza egoísta existe, pero somos animales sociales y necesitamos relacionarnos con el otro. Las emociones son más importantes que el razonamiento.

Simpatía y armonía: La ética debe mantener cercanía con la estética; lo bueno también es bello. La gente entiende el lenguaje sentimental. Sentirse bien es sentirse bello.

El origen del conocimiento moral se halla en el sentimiento o en alguna clase de sentido estético del mismo.

Modelo de Hume: Simpatía y Utilidad

Toma la simpatía del conde de Shaftesbury como una pasión que funciona naturalmente. La tendencia del mundo es procurar seis intereses personales. Debemos tener en cuenta la utilidad. Construye la democracia liberal. Habla del esquema de la República. Compartir es distribuir las funciones. Ajusto mis utilidades porque tú delimitas para no vivir separado del mundo; abogar por tus propios intereses es bastante antipático. La simpatía no es una luz, es una posición que existe. Ayudar al prójimo y la utilidad son importantes.

Martín Lutero: Moral de la Ciudad y Moral de la Iglesia

Lutero distingue entre dos estructuras: la ciudad y la iglesia. La moral de la ciudad se basa en las normas creadas por los humanos. La moral de la iglesia se fundamenta en las Sagradas Escrituras; la fe en él es absoluta, una fe ciega en la Biblia. Se lee la Biblia para establecerla como libro que explica la realidad. Dios no observa tus acciones, sino tu fe. Es muy irracional.

Kant: El Deber y el Imperativo Categórico

Kant parte de una división: la palabra que se acostumbra a identificar con la ética es “deber”, que es distinta a “puedo hacer”. La ética va más allá de la capacidad de hacer algo. La ONU se rige por esto.

El ser humano es capaz de obrar de forma incondicional. Hay tres condiciones en las que esto es posible:

• Cuando actúo de una manera que cualquier persona actuaría y no se ve mal. Imperativo categórico: Cualquier persona haría lo que yo hago y no lo criticaría.
• Nadie es un medio para lograr mi fin. No aprovecharse de nadie, respetar para obtener algo.
• Ser capaz de obrar como si fueras un legislador universal, de tal manera que tu acción no sea imposible ni en el presente ni en el futuro. Si no cuidas el ambiente, tus nietos sufrirán y te criticarán. No da gratificación o felicidad, es cumplir por el deber mismo.

Ejemplo: Debo estudiar ética (condición: necesito aprobar el examen, hay un interés que obliga). Esto se llama ética imperativa hipotética.

John Stuart Mill: Principio Utilitarista

Mill propone que no cabe pensar que una propuesta no puede ser universal. Haz el mayor bien posible a la mayor cantidad de personas (a una mayoría, pero no a toda).

Un alcalde debe satisfacer a la mayoría de la ciudadanía. Este modelo es propio del liberalismo. Se reconoce a la minoría, pero no se la satisface. No habrá una buena relación con la justicia. Para que este principio sea bueno, debe haber educación para reiterar en enseñar lo que es bueno.

Busca provocar el mayor interés para el mayor número de personas. Este autor propone una modificación a la Carta Magna, cambiando “Men” por “Person”, con el fin de permitir que las mujeres voten. El modelo debe tener cuidado con el lenguaje que usa.

Nietzsche: Voluntad de Poder

Según Nietzsche, todos los modelos morales registrados en la historia son inmorales en su origen, porque fueron impuestos a sangre. Toda persona que siguió estos modelos son borregos. Habla de un superhombre que se impone unos valores (hombre superior), pone a prueba su propia voluntad y no busca imponérsela a otros.

• Cada uno constituye su propia moral.
• Me burlo, pero de mi propio modelo.

Moore: Intuicionismo

No hay forma de conceptualizar o ubicar algo bueno, ya que lo bueno es como definir el amarillo. Pero sí se puede indicar y señalar lo bueno. Para portarnos bien, debemos reforzar las acciones. Lo bueno es una acción, no una cosa. La palabra “bueno” es una dirección. Lo que puede parecerse a algo bueno son las condiciones psicológicas (felicidad, agradable). Se diría: “Tengo la intuición de que eso es bueno”. Hay dos variables:

• Modelo emotivo