Contexto Histórico y Filosófico de Santo Tomás de Aquino
La *Suma Teológica* y el Método Escolástico
Santo Tomás de Aquino se propuso ofrecer una síntesis teológica en su obra cumbre, la Suma Teológica. La cronología exacta de su composición es incierta, pero se estima que fue escrita entre 1265 y 1273, durante sus estancias en Italia y París. Sus obras, que incluyen comentarios, cuestiones y sumas, reflejan una estrecha relación con los métodos de enseñanza de la época, mostrando una notable sincronía entre la pedagogía teológica y la producción literaria.
En tiempos de Tomás de Aquino, la teología, aunque inspirada en la Palabra revelada, se orientaba hacia el desarrollo de un sistema que incorporara las leyes lógicas de Aristóteles. Este enfoque dio origen a la quaestio, un método de indagación sistemática cuyo precursor fue Abelardo.
La Suma Teológica comprende 512 cuestiones, subdivididas en artículos. Cada artículo sigue una estructura definida:
- Planteamiento de la Cuestión: Se introduce con una pregunta que se aborda mediante el método escolástico.
- Presentación de Argumentos: Se exponen las razones a favor y en contra de la cuestión planteada, con especial énfasis en los argumentos que se oponen a la opinión del maestro (objeciones).
- Respuesta del Maestro: Se ofrece una respuesta que busca resolver las dudas planteadas.
- Solución a las Objeciones: Se refutan, uno por uno, los argumentos contrarios presentados inicialmente.
Estructura de la *Suma Teológica*
Tomás de Aquino organiza su obra en tres partes:
- Introducción: Aborda la teología como doctrina sagrada.
- Primera Parte: Trata sobre Dios y las criaturas que dependen de Él.
- Segunda Parte: Se divide en dos subsecciones:
- Primera Parte de la Segunda: Examina las acciones humanas en general.
- Segunda Parte de la Segunda: Analiza los actos humanos en particular.
- Tercera Parte: Se centra en la figura de Cristo.
La Cuestión de la Existencia de Dios
La segunda cuestión de la Suma Teológica se dedica a la existencia de Dios, dividida en tres artículos:
- ¿Es la existencia de Dios evidente por sí misma? Tomás de Aquino concluye que la existencia de Dios es evidente en sí misma, pero no para nosotros.
- ¿Es demostrable la existencia de Dios? Argumenta que no es posible una demostración a causa de, pero sí una demostración de por qué.
- ¿Existe Dios? Sostiene que la existencia de Dios puede ser probada de cinco maneras distintas (las Cinco Vías).
Vida y Formación de Santo Tomás de Aquino
Tomás de Aquino nació en el castillo de Roccaseca, cerca de Nápoles, entre finales de 1224 y principios de 1225. Hijo del conde de Aquino, recibió su primera educación en la abadía benedictina de Monte Cassino y luego en la Universidad de Nápoles. En 1244, ingresó en la orden de los dominicos, contra los deseos de su familia. En 1245, fue enviado a París, donde estudió bajo la tutela de Alberto Magno, quien ejerció una profunda influencia en su pensamiento.
En 1256, obtuvo la licencia para enseñar en la facultad de teología de París, donde ejerció como Maestro hasta 1259. Posteriormente, se trasladó a Italia, donde enseñó teología en la Corte pontificia hasta 1268. Durante este periodo, residió en varias ciudades italianas y fue invitado a impartir conferencias en las universidades de Nápoles y Bolonia. Conoció a figuras ilustres como Guillermo de Moerbeke, traductor de Aristóteles, quien le facilitó el acceso a varias de sus traducciones, incluyendo algunas prohibidas en la época.
Madurez Intelectual y Últimos Años
En 1268, Tomás de Aquino regresó a París, donde continuó su magisterio hasta 1272. Este periodo estuvo marcado por intensas polémicas, tanto por los ataques contra las órdenes religiosas como por las controversias con los averroístas latinos, liderados por Siger de Brabante. Fue en esta etapa cuando Tomás de Aquino alcanzó su plena madurez intelectual.
En 1272, fue enviado a Nápoles, donde continuó su labor docente hasta 1274. Ese año, el Papa Gregorio X lo convocó al Concilio de Lyon. Sin embargo, Tomás de Aquino falleció en el camino, el 7 de marzo de 1274, en el monasterio cisterciense de Fossanuova.
Influencias Filosóficas y Legado
El objetivo principal de Tomás de Aquino era conciliar la filosofía de Aristóteles con la teología cristiana. Siguiendo los pasos de Alberto Magno, buscó establecer una filosofía autónoma e independiente del dogma, pero en armonía con él. De la metafísica platónica, adoptó los conceptos de ser y participación. Sin embargo, la influencia más significativa en su pensamiento fue la de Aristóteles, a quien citaba como «El Filósofo».
Entre las principales tesis aristotélicas adoptadas por Santo Tomás se encuentran:
- Física: Concepto de naturaleza, teoría del movimiento, teoría de las cuatro causas, interpretación teleológica de la naturaleza y cosmología.
- Metafísica: Distinción entre sustancia y accidente, y entre potencia y acto.
- Teología: Demostración de la existencia de Dios basada en el movimiento, y la caracterización de Dios como Acto Puro, Pensamiento Autopensante y Motor Inmóvil.
- Antropología: Concepción del alma como principio de vida, forma y acto del cuerpo, y la distinción de las facultades del alma.
- Teoría del Conocimiento: Limitación del entendimiento humano a conocer el ser de lo sensible, el punto de partida de todo conocimiento intelectual en la sensación y la teoría de la abstracción.
- Ética: Idea de una moral teleológica y la definición de la virtud.
Aunque el pensamiento tomista fue eclipsado por nuevos sistemas filosóficos a partir de la Edad Moderna, en el siglo XIX resurgió gracias a un grupo de pensadores italianos que inspiraron la encíclica Aeterni Patris (1879) de León XIII. Esta encíclica defendía el pensamiento de Tomás de Aquino como el más adecuado al cristianismo, dando lugar a la corriente conocida como neoescolástica.
Finalmente, en la sociedad medieval, se consideraba que todos los hombres estaban distribuidos en tres «órdenes» establecidos por Dios: los que rezan, los que combaten y los que trabajan, cada uno con una misión específica.