Ilustración
Más que una corriente filosófica, la Ilustración supone una determinada actitud y un modo de enfocar los problemas filosóficos que presenta los siguientes rasgos:
- Confianza en la razón: Como fuente de conocimiento, trabajando conjuntamente con la experiencia (no se acepta la doctrina innatista del racionalismo del siglo XVII).
- Deísmo: Se afirma la existencia de Dios como exigencia de un pensamiento racional, pero se rechazan los ritos y los misterios de la religión revelada.
- Iusnaturalismo: Se afirma la posesión de unos derechos mínimos para todos los seres humanos, derivados de su naturaleza.
- Antitradicionalismo: Se cuestiona que algo pueda tener valor solo porque ha contado con el respaldo de la tradición. La razón es el único juez que puede decidir.
- Interés por la filosofía de la historia: No interesa la recopilación de datos históricos, sino su interpretación.
- La idea de progreso: Concebida como mejora de las condiciones de vida de los seres humanos, cobra especial importancia como criterio para decidir sobre la bondad o maldad de acontecimientos, instituciones, etcétera.
- Enciclopedia: Es el símbolo que mejor representa el espíritu de la Ilustración.
- Aspiración principal: Difundir la cultura, haciéndola llegar a amplias capas de población, e incluir saberes técnicos y artesanales tradicionalmente menospreciados.
- Voltaire: Gran defensor de la tolerancia. El fundamento del valor de la tolerancia se encuentra en la limitación del conocimiento humano. Combatió la intolerancia política (absolutismo monárquico) y la religiosa que manifiestan las religiones reveladas. Estudia las leyes que, de hecho, gobiernan la política y la sociedad desde un análisis de los hechos.
- Montesquieu: Distingue tres formas de gobierno inspiradas cada una de ellas en un principio rector: Republicano, inspirado en el principio de la virtud (amor a la patria e igualdad); Monárquico, inspirado en el principio del honor (reputación que se hereda); Despótico, inspirado en el principio del temor que inspira el gobernante. Los gobiernos se corrompen cuando se corrompe el principio que los inspira. Para evitar la corrupción del gobierno es necesaria la división de los tres poderes que, según Montesquieu, existen en toda sociedad: poder legislativo, poder ejecutivo y poder judicial.
Kant y la Revisión Crítica de la Razón
Kant comparte con los autores ilustrados la idea sobre la importancia de la razón para el progreso humano y asume la tarea de realizar una revisión crítica de la misma para ponerla a punto. El objetivo de la filosofía de Kant es hallar los límites del conocimiento humano.
Relación con el Empirismo y el Racionalismo
- Rechaza el dogmatismo racionalista, que sostiene que no hay límites para el conocimiento a partir de las ideas innatas.
- Rechaza el escepticismo empirista que, al circunscribir el conocimiento a los estrechos límites de la experiencia, reduce nuestro conocimiento cierto a su mínima expresión.
- Propone una concepción del conocimiento denominada idealismo trascendental, según la cual generamos espontáneamente ideas, pero estas solo tienen utilidad cuando se emplean para ordenar lo dado en la experiencia.
Preguntas Filosóficas
- ¿Qué puedo conocer? A esta pregunta responde su metafísica.
- ¿Qué debo hacer? A esta pregunta responde su teoría ética.
- ¿Qué me cabe esperar? La respuesta a esta pregunta delimita la propuesta kantiana de una religión y una teoría política dentro de los límites de la razón.
Kant sostiene que las tres preguntas anteriores se pueden sintetizar en una: ¿Qué es el hombre? Y, por tanto, la filosofía se resume en antropología o estudio del ser humano.
Razón Teórica y la Crítica de la Razón Pura
En la obra Crítica de la razón pura, Kant trata de dar respuesta a la pregunta: ¿Qué puedo conocer? En ella trata de averiguar si es posible alcanzar un conocimiento científico sobre Dios, el alma humana o el mundo concebido como totalidad de los fenómenos. Para ello, analiza las condiciones que han hecho posible que la física y las matemáticas se conviertan en ciencias y trata de aplicar esas condiciones a la metafísica.
Clasificación de los Juicios
El estudio de las condiciones que cumplen la física y las matemáticas exige un estudio de los juicios de estas disciplinas y eso lleva a Kant a realizar una clasificación de los juicios según dos criterios:
Según la relación del sujeto con el predicado hay dos tipos de juicios:
- Juicios analíticos: la información del predicado está contenida ya en el sujeto. Son juicios estrictamente universales y necesarios, pero no amplían nuestro conocimiento.
- Juicios sintéticos: el predicado nos aporta información nueva sobre el sujeto, pero su verdad no es necesaria.
Según la relación del juicio con la experiencia también hay dos tipos de juicios:
- Juicios a priori: su verdad es independiente de cualquier comprobación experimental. Son juicios universales y necesarios.
- Juicios a posteriori: su verdad puede ser establecida tras una comprobación experimental. Estos juicios no pueden ser ni estrictamente universales ni necesarios.
Juicios Sintéticos a Priori
Combinando las dos clasificaciones, Kant concluye que hay tres tipos de juicios: analíticos a priori, sintéticos a posteriori y sintéticos a priori. Kant afirma que los juicios sintéticos a priori son la base de las matemáticas, la física y la metafísica. Pero han permitido a las dos primeras convertirse en ciencias y no así a la metafísica. Es necesario, por tanto, encontrar el fundamento de los juicios sintéticos a priori.
Sensibilidad, Entendimiento y Razón
Sensibilidad
La captación de una sensación por parte de un sujeto es un conocimiento inmediato que Kant denomina intuición sensible y cuyo objeto es un fenómeno. Un fenómeno está compuesto de materia, que es el contenido de la sensación, y forma, que es el modo como la sensación es captada por el sujeto. Espacio y tiempo son los dos elementos de nuestra sensibilidad con los que damos forma a las intuiciones sensibles. Son formas a priori de la sensibilidad o intuiciones puras (sin materia).
El Fundamento de los Juicios de las Matemáticas
Los juicios sintéticos a priori de las matemáticas (aritmética y geometría) tienen como fundamento las formas a priori de la sensibilidad (espacio y tiempo). La geometría estudia las propiedades del espacio y la aritmética las del tiempo. Cualquier juicio válido formulado en relación con una u otra disciplina será a priori y, por ello, estrictamente universal y necesario.
Entendimiento
Es la facultad encargada de construir juicios y encadenarlos formando razonamientos. Para construir los juicios, el entendimiento cuenta con los conceptos, que unifican lo que le llega de modo múltiple y disperso. Comprendemos un fenómeno cuando somos capaces de aplicarle un concepto.
Tipos de Conceptos
Del mismo modo que en la sensibilidad encontrábamos intuiciones sensibles e intuiciones puras, ahora tenemos dos tipos de conceptos: Los conceptos empíricos son los que el entendimiento crea a partir de lo captado por la experiencia sensible. Los conceptos puros son las distintas formas que el entendimiento tiene de ordenar lo dado en la experiencia.
El Fundamento de los Juicios de la Física
Los juicios sintéticos a priori de la física tienen como fundamento los conceptos puros o categorías del entendimiento. Puesto que todo lo que conocemos lo hacemos a través de esas categorías, cualquier conocimiento que alcancemos sobre ellas (las leyes de la física lo son) es estrictamente universal y necesario.
Los Fenómenos y el Noúmeno
Los fenómenos son el objeto de nuestro conocimiento. Estos son un compuesto de los datos provenientes de la sensación y las estructuras cognoscitivas del sujeto. El noúmeno, también llamado cosa en sí, es la realidad separada de las estructuras que le aplicamos para conocerla. El noúmeno, por definición, permanece incognoscible para el sujeto.
Razón
Los silogismos son el tipo de razonamientos en los que la verdad de la conclusión es segura siempre que sean verdaderas las premisas. El ser humano tiende a rebasar los límites de su capacidad de conocimiento y aplica las categorías a aquello de lo que no tiene intuición sensible. No es el sujeto el que se adapta al objeto para conocerlo, como se había creído hasta ahora, sino que es el objeto el que experimenta una adaptación a las estructuras del sujeto para ser conocido. En nuestro conocimiento, no nos limitamos a construir juicios, sino que los encadenamos formando razonamientos. Según Kant, existen tres tipos de silogismos; cada uno de ellos llega a una idea de la razón pura:
- Los silogismos categóricos nos conducen hasta la idea de alma.
- Los silogismos hipotéticos nos conducen hasta la idea de mundo como totalidad.
- Los silogismos disyuntivos nos conducen hasta la idea de Dios.
Puesto que no tenemos impresión sensible de ninguna de estas tres ideas, se comete un error. La función de las categorías es ordenar lo intuido en el espacio y el tiempo, por tanto, cuando se aplican a los noúmenos se hace un uso ilegítimo de ellas y el resultado son ilusiones, es decir, falsos conocimientos.