La Superación del Estado de Naturaleza según Spinoza
En quinto lugar, hay que ser vigilante consigo mismo y con los demás. Spinoza, como Hobbes, también se plantea la necesidad de trascender, de salir de ese estado de Naturaleza, pero en el Tractatus theologico-politicus, no aporta nada nuevo (los seres humanos deben pactar obligaciones mutuas, saciar sus apetitos, etc.). Es la parte menos original de su filosofía. Además, sorprende bastante que un determinista se plantee salir del estado de Naturaleza mediante un contrato social, pues sin libertad poco tenemos que intercambiar los humanos a través de un contrato. En la Ethica ordine geometrico demonstrata y en el Tractatus politicus es más coherente con su ideología determinista, ya no habla de un contrato social, sino de sobreponerse al estado de Naturaleza a través de un instinto, que es el que nos empuja a ello. Y para evitar los inconvenientes del estado de Naturaleza, se requiere la constitución de un ente político.
Funciones del Ente Político: Spinoza vs. Hobbes
A partir de este punto –sobre las funciones del ente político– es donde Spinoza se separa de Hobbes:
- Para Hobbes, la función única y fundamental del Estado era asegurar la paz entre los seres humanos. Esto sólo se consigue mediante el Derecho positivo.
- Para Spinoza, la función primordial del Estado es asegurar la racionalidad y las libertades. El Estado tiene una misión ética antes que pacificadora.
Sin embargo, ¿cómo solucionar la contradicción de un determinista que, por un lado, niega la libertad y, por otro, se erige defensor político de las libertades? Podríamos pensar que el Estado ha de custodiar las libertades jurídico-políticas para evitar que los ciudadanos conspiren contra él. Pero entonces, tales libertades son pura ficción. Pues bien, para Spinoza -que sigue la misma línea determinista de los estoicos- la libertad es lo que se opone a la necesidad. Por tanto, la única manera de ser libre es aceptar la necesidad tomando conciencia de ella. Y esto sólo es posible a través del amor dei intellectualis, grado máximo de liberalización que un ser humano puede alcanzar. Este amor intelectual a Dios es tan raro de lograr como excelente.
El Proceso de Secularización
El proceso de secularización: los parámetros filosófico y científico -su causa y efecto-, este es el más complejo de todos. La etimología de la palabra saeculum (siglo) tiene cierta connotación religiosa negativa. Para los frailes y monjas recluidos, salir del convento para desempeñar alguna tarea concreta era “pasar al siglo”. Gradualmente, adoptó el significado de “hacer aquello que se opone o aparta del sentido religioso”. Actualmente, un sacerdote que se seculariza es el que se aparta de la Iglesia católica y queda despojado de su condición. Con el término “secularización” nos referimos aquí a un vasto proceso histórico, que comienza con la Edad Moderna, y que supone un progresivo desmoronamiento religioso en la vida de las personas de Occidente. De hecho, la ruptura protestante produjo el efecto contrario al que se habían propuesto sus promotores. Entre los siglos XVI y XVII, se suceden las Guerras de Religión en las que se enfrentan con desenfreno las diversas corrientes cristianas de la época, incrementando aún más este proceso secularizador.
Hugo Grocio y la Hipótesis Atea
Hipótesis atea: Hugo Grocio fue considerado el padre del Derecho Internacional Público y del Derecho Natural en su concepción moderna, siendo el primero que desapegara el DIP y el DN de elementos teológicos. Pero esta frase no va dirigida contra Dios, sino contra las concepciones partidistas y voluntaristas del Derecho Natural. Dado que la belicosidad religiosa no cesaba, H. Grocio crea una nueva concepción del Derecho Natural válida para todos, tratando de construir un puente de paz entre las facciones religiosas en lucha.
Interpretación radicalmente contraria a la anterior que considera a H. Grocio un epígono o repetidor, pues recuerda excesivamente a los Magni Hispani, escolásticos anteriores que se inspiraban en Santo Tomás de Aquino: Francisco Suárez y Gabriel Vázquez, además de otros autores dominicos, como Francisco de Vitoria, Domingo de Soto y Fernando Vázquez de Menchaca.
Las Leyes de la Naturaleza según Hobbes
Hobbes no se refiere a leyes vigentes en el estado de la Naturaleza, sino a los preceptos para salir puntualmente de esa guerra de todos contra todos. Si partimos de la distinción kantiana entre Preceptos Hipotéticos y Preceptos Categóricos, veremos que:
- Los Preceptos Categóricos son aquellos que ordenan o prohíben algo con carácter absoluto; se trata de preceptos tajantes que no admiten excusas para exonerar a nadie de su cumplimiento (por ejemplo, no matarás).
- Los Preceptos Hipotéticos son prescripciones acompañadas de una condición, por lo que se pueden cumplir o no, según se materialice o no la condición (por ejemplo, el que matare a otro será condenado a cadena perpetua, etc.).
Pues bien, con la expresión Leyes de la Naturaleza, Hobbes alude a los preceptos hipotéticos y no a los categóricos, propios del Derecho Natural. Sirva como ejemplo alguno de los incluidos en los capítulos 14 y 15 del Leviatán, sobre las 19 Leyes de la Naturaleza:
1ª) Si quieres salir del estado de Naturaleza, debes buscar la paz y seguirla; si no puedes, debes conformarte y defenderte como buenamente puedas en el estado natural.
2ª) Para salir del estado de la Naturaleza, el ius omnium in omnia (derecho de todos a todo) -que posee una intensidad distinta en cada hombre- debe ser renunciado no sólo por uno, sino por todos con carácter de pacto.
3ª) Los seres que quieran salir del estado de Naturaleza, deben cumplir entre ellos los pactos que celebren, y entre todos, el pacto anterior.
4ª) Cada uno debe agradecer a los demás que cumpla su pacto, la restricción mutua del ius omnium in omnia.