Comparativa entre Platón y Descartes: Dos Visiones del Dualismo y el Conocimiento
Vamos a comparar a dos grandes filósofos de la historia, por un lado Platón, como máximo representante de la filosofía griega en la Antigüedad y, por otro lado, Descartes, considerado el padre de la filosofía moderna. En primer lugar, podemos decir que tanto Platón como Descartes son considerados filósofos dualistas, es decir, que defienden la existencia de dos sustancias o componentes en el ser humano, a saber, alma y cuerpo. Platón recurre a su famoso mito de la caverna para distinguir entre alma y cuerpo, perteneciendo la primera al mundo inteligible o de las ideas y el segundo al mundo sensible o de las copias. También Descartes diferencia entre alma y cuerpo, o como también él las denomina res cogitans o sustancia pensante y res extensa o sustancia extensa. Según el filósofo francés, ambas se unen en la glándula pineal. Otro punto en común entre ambos filósofos es la defensa de las denominadas ideas innatas. Aunque Platón y Descartes entienden cosas diferentes respecto a la noción de Idea, ambos coinciden en defender algo así como un conocimiento no aprendido, un saber que ya se tiene desde siempre. Descartes distingue entre tres tipos de ideas: facticias, adventicias e innatas, estando entre estas últimas la idea de Dios, al que conocemos sin tener experiencia de él. Del mismo modo, Platón entiende que no aprendemos las Ideas, sino que solo las recordamos (anamnesis), porque nuestra alma ya las ha aprendido con anterioridad, por lo que aprender es recordar. Así, por tanto, ambos filósofos comparten una misma concepción de la educación, en la que aprender no consiste en fijarse en el mundo exterior, sino en el propio sujeto, en el verdadero conocimiento que éste ya posee. Finalmente, otro punto de relación entre Platón y Descartes es el uso de la razón como método de conocimiento. Ambos pensadores rechazaron los sentidos como fuente de conocimiento fiable. Descartes porque no nos da un conocimiento, únicamente se alcanza para ambos a través de la razón, solo así, según Descartes, podemos alcanzar un conocimiento cierto y seguro, indudable y un conocimiento inteligible o de las ideas, según Platón. Así pues, para concluir, podemos decir que, a pesar de la gran diferencia temporal entre Platón y Descartes, existen puntos de relación o puntos en común entre estos dos grandes filósofos de la historia.
Nietzsche y Schopenhauer: Voluntad de Vivir vs. Voluntad de Poder
Sin duda en la filosofía de Nietzsche y a lo largo de su vida influyen numerosos autores, pero el autor que más influirá en Nietzsche será sin duda Schopenhauer y su voluntad de vivir. Para Schopenhauer todos los individuos tienen una voluntad de vivir, una fuerza que les impulsa a vivir la vida y a afirmar su existencia sin pensar en los demás. Schopenhauer cree que es por esto que nos encontramos en un mundo donde dominan la codicia y la crueldad. Es por eso que determina que la solución pasa por aniquilar esa voluntad de vivir, es decir, negar la vida. Para ello propone dos caminos:
- En primer lugar, Schopenhauer considera la experiencia estética como un camino para aniquilar la voluntad de vivir, más que para aniquilar, para engañar, para hacer que se olvide de su objetivo, y así, negar la vida.
- En segundo lugar la santidad o el ascetismo: debido a que la experiencia ascética no es más que un engaño a la voluntad de vivir, un alivio temporal hemos de recurrir a una solución duradera, que pasa por: buscar la espiritualización del cuerpo por medio de la negación de los placeres materiales, las necesidades fisiológicas, etc… es decir, renunciar a la voluntad de vivir, de autoafirmarnos, renunciar a nosotros mismos.
Nietzsche lo que hará será coger estas ideas de Schopenhauer y darle la vuelta completamente. Convertirá la voluntad de vivir en voluntad de poder, propia y diferente en cada individuo y que exigirá en mayor o menor medida la autoafirmación del individuo sean cuales sean las circunstancias. Pero al contrario que Schopenhauer, no cree que haya que eliminar esta voluntad de poder, sino que será la misma voluntad de poder y su exigencia de autoafirmación y de dominio sobre los impulsos (esto quiere decir que los estimula pero los dirige a placer para que estos no dominen al individuo sino que el individuo los domine) lo que hará que el individuo crezca y no sea vencido por las necesidades fisiológicas y los impulsos.
La Epistemología de Platón: Niveles de Conocimiento y Acceso a las Ideas
I. Dualismo Epistemológico
El dualismo epistemológico es la distinción platónica de diferentes niveles de conocimiento con los que podemos llegar a conocer las ideas. Se compone de copias que percibimos a través de los sentidos, y de ideas, percibidas a través de la razón. La epistemología está relacionada directamente con la metafísica. Una vez sabemos cómo es la realidad, tenemos que plantearnos cómo acceder a ella, cómo conocerla. Hay 2 partes:
- El cuerpo ligado al mundo sensible y el alma ligada al mundo inteligible.
II. Teoría del Conocimiento
En la epistemología hay 3 formas necesarias para conocer la realidad:
- Reminiscencia o recuerdo (anamnesis): El ser humano recuerda las cosas durante su vida, no las conoce. El alma existe ya antes de entrar en un cuerpo, con lo cual ya conoce todas las ideas. Pero al nacer el alma entra en el cuerpo y olvida todo lo aprendido y necesita del mundo sensible para recordar. Ejemplo: El mito de Fedro.
- Dialéctica. Diálogos de madurez. Sirve para «hacer nacer» las ideas, llegar a conocerlas. Tiene dos sentidos: Entendido como método, entendido como ciencia.
- Método: Diálogos con Sócrates en los que por medio de preguntas y respuestas se llega a la verdad, a la definición de las cosas.
- Ciencia: Contemplación intelectual de las ideas. Quien conoce dialécticamente puede llegar a las Ideas y ser considerado como SABIO.
- Amor. Por medio del amor nos vemos involucrados en un proceso abstractivo como el de la dialéctica. Ir desde lo más concreto (sintiendo atracción) hasta lo más abstracto. Se convierte amado un cuerpo bello, de ahí se pasa al amor por la belleza del alma de la persona amada y de ahí se ama todas las almas bellas, hasta llegar a la Idea de Belleza y de éste a la Idea Suprema.
III. El Símil de la Línea y el Mito de la Caverna
El símil de la línea relacionado con el mito de la caverna es la manera conceptual de explicar el dualismo epistemológico con diferentes niveles de conocimiento y la relación entre METAFÍSICA Y LA TEORÍA DEL CONOCIMIENTO.
Niveles de conocimiento:
- Opinión:
- Conocimiento sensible.
- Dividido entre:
- Imaginación (conocimiento de imágenes)
- Creencia (conocimiento de objetos)
- Ciencia:
- Pensamiento:
- Como el de las matemáticas es más abstracto que los anteriores pero necesita soporte sensible como dibujos.
- Van de los presupuestos a lo deducido.
- Conocimiento inteligible: Partimos de una idea y a partir de esta establecemos relaciones. Propio de la dialéctica. Relación descendente como el dialéctico que desciende a la caverna cuando pretende hacer ver la realidad (Mundo Inteligible) a aquellas personas que aún no lo conocen y solo creen en copias de objetos reflejadas en la pared.
- Pensamiento:
POR ESO las matemáticas no son uno de los saberes más altos, son ejercicios buenos para prepararse para alcanzar el conocimiento de las ideas.
Matemáticas
Platón las sitúa como un nivel de conocimiento superior a la imaginación y creencia pero que no llegan a considerarse tan abstractas como una idea. Sí que sirve para poder entrar en el mundo inteligible pero no pueden llegar a la idea de Bien porque trabaja con cosas abstractas y representaciones sensibles. Las matemáticas se utilizan para cultivar la razón mediante la educación. Hay tres factores y las matemáticas están incluidas en ellas.
Dialéctica
La dialéctica, como la mayéutica, sirve para «hacer nacer» las ideas, llegar a conocerlas. Tienen dos sentidos:
- Método: diálogos con Sócrates en los que por medio de preguntas y respuestas se llega a la verdad, a la definición de las cosas.
- Ciencia: contemplación intelectual de las ideas. Quien conoce, dialécticamente puede llegar a las Ideas y ser considerado como sabio, por tanto, poder acceder a la política.
Idea del Bien
La idea del Bien es la idea Suprema en el mundo Inteligible. En el mito de la caverna, la idea de Bien se encuentra en el mundo inteligible y simbólicamente es el Sol. Esta idea de Bien no es una idea moral.
Arte
Para Platón el arte es una imitación, el artista copia lo que percibe que a la vez es una imitación de la Forma verdadera. De manera que un artista está alejado dos veces de la VERDAD. Platón valoraba las obras artísticas del hombre, como pinturas o esculturas, pero su interés por la Verdad lo llevaba a menospreciar el trabajo artístico. En lo que se refiere a la pintura señalaba que un pintor se limita a ver nada más que lo que percibe desde un solo punto de vista, el suyo, que está lejos de lo verdadero. A pesar de este concepto sobre el arte, Platón veía con buenos ojos que el Estado diera lugar al arte no solo para educar sino también para el sano esparcimiento. Platón reconocía que el arte ocupaba un lugar singular en la actividad del hombre que no se tenía que reducir a la contemplación estética sino que debería estar al servicio de la educación y la moral. Platón y su concepción acerca de la Educación, cual era para él su significado de educación, la vinculación de la dimensión política y la Educación. Como deben ser educados los futuros gobernantes, y como debían ser. Es muy interesante el pensamiento de éste filósofo, por que hace reflexionar y asimilar su manera de pensar, puesto que expone que al ser educados debemos ir más allá de nuestro sentido común.
Palabras clave: Dialéctica, Estado, Gimnasia, Música, Dimensión Política.
Es el primer gran filósofo ateniense que nos deja una extensa obra escrita, siendo alumno de Sócrates, y creador de la academia. Su pensamiento ha puesto de manifiesto una gran influencia en el desarrollo de la filosofía, hasta nuestros días. La gimnasia para conocer el cuerpo, el mundo sensible y poder cultivarlo, las matemáticas para poder entrar en el mundo inteligible pero no puedes llegar a la idea de Bien por las representaciones sensibles y trabajar con cosas abstractas. La educación es el medio idóneo para que el estado alcance su fin: la justicia. De ella depende que logre o no su ideal. Para finalizar Platón decía que “el gobernante debía de ser un hombre valiente, capaz de sacrificar su propia vida por el bien del Estado, para que el hombre prefiera la muerte antes que la derrota o la esclavitud”.
MUNDO MATERIAL, MUNDO SENSIBLE Y OPINIÓN (DOXA):
- IMÁGENES – OBJETOS MATERIALES
- IMAGINACIÓN (EIKASIA) – CREENCIA (PISTIS).
MUNDO DE LAS IDEAS O MUNDO INTELIGIBLE CIENCIA (EPISTEME):
- Objetos matemáticos – ideas
- Inteligencia discursiva (DIANOIA) – Dialéctica – ciencia – pensamiento (NOESIS).
El Dualismo Ontológico de Platón y el Mito de la Caverna
El dualismo ontológico: Platón defiende el dualismo ontológico, ya que afirma que la realidad está dividida en dos ámbitos de realidad totalmente distintos:
- El mundo sensible o mundo material, el de las cosas concretas y particulares. Es el mundo de lo plural, lo múltiple, lo cambiante, lo particular, lo temporal, lo aparente, lo imperfecto… se trata de la realidad más inmediata a nosotros, aquello que podemos conocer a través de los sentidos.
- El mundo inteligible o de las Ideas, es el mundo de la verdadera realidad, donde las Ideas se caracterizan por ser únicas, eternas, universales, inmutables, perfectas e inmateriales. A estas realidades solo se puede acceder por medio de la inteligencia o el pensamiento y son para Platón la verdadera realidad.
Esta división de la realidad afecta al concepto metafórico de Platón (mundo de las ideas – mundo de la naturaleza), su antropología (alma inmortal – cuerpo) y su ética (mundo ideal – mundo material). Para explicar este dualismo ontológico, Platón recurrió al mito de la Caverna: Los seres humanos que viven en el mundo sensible, el visible, son semejantes a prisioneros que nunca han visto la luz del Sol y que se hallan encadenados de pies y manos en el fondo de una gran cueva, de espaldas a la única abertura de entrada que da al exterior. Dentro de la caverna y detrás de ellos arde una hoguera que tampoco ven por hallarse de espaldas y porque se interpone una valla, a lo largo de la cual van pasando hombres portadores de figuras de cosas y animales. Los prisioneros solamente pueden escuchar sus voces y contemplar las sombras que se proyectan sobre el fondo de la cueva. Cuando uno de estos hombres rompe sus cadenas y se libera, ascendiendo hacia la salida de la cueva, al principio, cegado por la luz del Sol, no percibe nada. Pero poco a poco se acostumbra y consigue ver primero sombras, luego imágenes de objetos y de los hombres reflejadas en las aguas y finalmente las cosas mismas, la Luna, las estrellas y el Sol. Sabe entonces que el mundo que conocía hasta entonces era irreal y engañoso e intentará bajar de nuevo a la cueva para explicárselo a sus compañeros, pero estos sin embargo no le creerán, se reirán de él y si intentara soltarlos estos lo matarían.
Simbología del mito de la caverna:
- La caverna es el mundo sensible y sus sombras son las cosas que lo pueblan.
- Los hombres encadenados al fondo de la caverna representa al hombre encadenado a los sentidos y a los apetitos del cuerpo, que considera que lo percibido por él es la única realidad existente.
- El mundo exterior es el mundo de las ideas o mundo inteligible.
- El Sol es la Idea de Bien.
- El hombre que logra salir de la cueva es el filósofo que ha conseguido liberar su alma de las cadenas del cuerpo y que contempla la verdadera realidad de las Ideas. El camino de la Dialéctica les libera de sus cadenas y les permite contemplar el mundo ideal, cuyo Sol es la Idea del Bien.
Filosofía y Moral en Platón: El Modelo de Estado Ideal
Modelo de estado: Platón busca un modelo de estado que produzca hombres «buenos», justos y virtuosos. Solo en un estado justo pueden evitarse injusticias como la muerte de Sócrates. Por eso la ética está relacionada con la política y no se puede pensar una sin la otra. El hombre bueno contribuye al bien del estado y el Estado ideal produce hombres buenos. La justicia se convierte en la virtud fundamental de la ética y de la política. La justicia hace al hombre virtuoso y al estado perfecto. Por eso es necesario encontrar una definición de justicia universal, válida para todo hombre, para todo estado, en todo momento y en todo lugar. Esto es lo que intenta Platón en LA REPÚBLICA, donde intenta encontrar una concepción del ser humano que exija una moral en condiciones. Para Platón el hombre es algo más que impulso, algo más que deseo. Descubre tres partes del alma humana y a cada una de ellas va asociada una virtud:
- Alma racional situada en la cabeza es la encargada del conocimiento de las cosas y el pensamiento, y su virtud es la sabiduría o la prudencia.
- Alma irascible situada en el tórax se ocupa de dominar las pasiones y su virtud específica sería la fortaleza. El sujeto debe controlar tanto su odio como su amor hacia los demás.
- Alma concupiscible se encontraría en el abdomen o en el bajo vientre y su función sería el dominio de los impulsos o dominio en sí. La virtud que le es propia es la templanza o la moderación.
Entre estas tres partes del alma debe existir armonía y justicia. La virtud platónica presenta así diferentes caras:
- Sabiduría: el sabio es virtuoso. Esto está directamente relacionado con el intelectualismo moral de Sócrates y ataca el relativismo de los sofistas.
- Purificación: el hombre debe purificar su alma de las pasiones y desprenderse del cuerpo. Se valora más el alma que el cuerpo y el sujeto debe ser capaz de controlar en todo momento sus impulsos y sus sentimientos pasionales.
- Armonía y justicia.
Todo esto conduce a la Utopía platónica un estado ideal en el que no es posible ningún tipo de injusticia. Será un estado formado por tres clases sociales anteriormente dichas: GOBERNANTES – ALMA RACIONAL – PRUDENCIA / GUARDIANES – ALMA IRASCIBLE – FUERZA / PRODUCTORES – ALMA CONCUPISCIBLE – TEMPLANZA.
Moral, Decadencia y Racionalidad en el Pensamiento de Nietzsche
En la obra de Nietzsche “El Crepúsculo de los ídolos” se tratan temas relacionados con la moral, la decadencia y la racionalidad, características que Nietzsche otorga y critica a una cultura occidental. “El Crepúsculo de los ídolos” tiene como objetivo fundamental dar a conocer que la cultura occidental se encuentra en decadencia (crepúsculo) al creer en unos valores absolutos (ídolos) que son fruto de la razón como instrumento para alcanzar la verdad que tiene su origen en el pensamiento socrático y platónico. Nietzsche, al darse cuenta de esta situación de enfermedad de la cultura occidental, propone como solución acelerar el proceso.
- La crítica a la cultura occidental realizada por el filósofo alemán se basa en una crítica a la razón mediante el método genealógico por el cual Nietzsche busca un momento en el tiempo en el que nuestra cultura se ha equivocado y por alguna razón ha elegido a la razón. Ese momento concreto es el paso del mito al logos en el cual el hombre deja de utilizar fábulas y mitos para explicar los fenómenos que ocurren a nuestro alrededor y pasa a explicarlos por medio de la razón buscando una demostración experimental y racional de las cosas. Al elegir el hombre a la razón, ha hecho una elección entre los pensamientos presocráticos de Heráclito y Parménides. Heráclito se identifica con el cambio y el devenir y Parménides con el ser y lo inmutable. De esta manera la sociedad construye mediante el criterio de Parménides “el ser es” (was ist) y utiliza la razón como medio para alcanzar el verdadero conocimiento.
- La crítica que Nietzsche establece se basa en esta elección porque ha elegido la razón por miedo al cambio y por la seguridad de sentirnos cómodos porque el devenir, el cambio, lo mutable; conlleva problemas. La sociedad occidental ha realizado con el uso de la razón un ultramundo que no existe, es falso y por tanto es un mito, no ha habido ningún paso del mito al logos, todo es mentira. Nietzsche se da cuenta de esta situación de decadencia, de esta enfermedad y decide solucionarla acelerando su proceso de decadencia mediante la creación de espíritus libres que sean capaces de crear ellos mismos unos valores y no someterse a unos valores impuestos por la sociedad democrática o por la religión.
- Nietzsche concibe como natural aquello que se identifica con el cuerpo, con la salud y con los instintos. Es la voluntad de poder la que se muestra como una energía vital que lleva al hombre a potenciar sus instintos y sus pasiones, autoafirmarse y ser capaz de crear unos valores propios. La voluntad de poder se caracteriza por su inconsciencia y ese resultado de las pasiones y fuerzas del cuerpo, de ser peculiar al actuar según unas características fisiológicas, según parámetros como la edad, de ser diversa en sus manifestaciones y distintas en sus expresiones según el cuerpo de cada persona; en ser carente de finalidad externa y no buscar el placer ni la felicidad que son secundarias, sino de autoafirmarnos; de ser espontánea al actuar según le dicta el cuerpo y al establecer una razón o negar un ridículo según como eres corporalmente; es previa a la razón, la razón es un instrumento de la voluntad de poder. La voluntad de poder es una pluralidad de fuerzas corporales que llevan a autoformarnos. Según este planteamiento se identificó el cuerpo, la salud, los instintos y la voluntad de poder con la vida, es el vitalismo de Nietzsche que solo busca que el hombre viva según sus instintos y sus pasiones y no utilice la razón. “El que piensa no vive, y el que vive no piensa”.
- Según la forma en la que utilicemos nuestros instintos y de cómo sea nuestra visión ante el dolor, se pueden identificar dos formas de vida:
- Una ascendente es aquella que busca superarse, que es capaz de crear sus propios valores, que no se humilla, que utiliza el dolor como una fuerza más para actuar porque también forma parte de la vida y que reconduce sus instintos y no lucha contra ellos sino que busca autoafirmarse. Se identifica con la salud y el placer como victoria.
- Una vida descendente, que en contraposición con la anterior, es aquella que muestra decadencia, que se humilla y se somete, que lucha contra los instintos y que intenta evitar el dolor o aliviarlo cuando este aparezca. Esta es la vida que Nietzsche critica y tacha de enferma al concebir el placer como algo malo y venenoso. Este individuo no es capaz de crear unos valores, le falta voluntad de poder pero no es culpable, su situación es fruto de la jerarquía de la naturaleza. Esa vida decadente y absurda, según el postulado de Nietzsche, se identifica totalmente con la moral a la que Nietzsche le niega los valores absolutos del bien y del mal e identifica ese bien con la salud corporal y ese mal con la enfermedad. Esto se debe a la contraposición entre los filósofos momia y el pensamiento nietzscheano. Los filósofos momia son aquellos que creen en los conceptos abstractos que son fruto de la razón que para Nietzsche no es sino un mecanismo de defensa que no habla de la realidad sino de nosotros mismos y se representa mediante la metafísica del lenguaje. Estos filósofos momia, que están representados por Platón, identifican el mundo verdadero con el de las ideas y los conocimientos abstractos que es el inmutable (Parménides) y otro falso y cambiante que es el sensible (Heráclito). Nietzsche en cambio dice que el mundo de las ideas es una fábula y que el mundo sensible es en realidad un mundo experimentado y el único que existe. Lo llama experimentado, porque para él, el mundo no se puede conocer sino que solo lo podemos experimentar mediante los impulsos, las vivencias y el aparato sensorial. De esta manera niega a la razón como instrumento de conocer la verdad y explica su perspectivismo por el cual la verdad absoluta no existe sino que cada uno experimenta unos hechos de los que saca su perspectiva que depende de la voluntad de poder y esta de su fisiología. La moral es criticada por Nietzsche por su antivitalismo (odio a la vida, al cuerpo y mundo negando su voluntad de poder), su intelectualismo (al creer en que por medio de la razón podemos conocer lo bueno y al realizar muchas veces, virtud, seremos felices) y su dogmatismo (al crear valores absolutos que no son verdad y encima se pretenden imponer a todos). Podemos diferenciar dos tipos de moral: Una moral de esclavos, que es aquella que se expresa mediante un comportamiento gregario de una mayoría contraria a los nobles (arios) creando unos valores absolutos (razón, verdad, progreso,…) que intenta imponer a todos incluso a los señores. Este es un símbolo de decadencia porque estos valores y esta moral se identifican con la vida descendente. Han transmutado con los valores que un día pusieron los señores, capaces de crear sus propios valores mediante la voluntad de poder que es creativa, individual y espontánea. Nietzsche realiza una crítica a la cultura occidental, especialmente al uso de la razón, a la moral, a la democracia (moral sin Dios) y a las religiones, especialmente a la cristiana por su espíritu de sumisión. Nietzsche pretende que los señores capaces de formar unos valores pasen de un nihilismo pasivo (camello) en el que se dan cuenta de la decadencia de la sociedad, a un nihilismo activo (león) que rompe con todos los valores de la cultura occidental pero está lleno de ira y no es capaz de ejercer su libertad a finalmente el Ubermensch (niño) que solo pretende disfrutar y no tiene prejuicios para crear nuevos valores acelerando el proceso de decadencia de la cultura occidental superando a una sociedad que no es capaz de pasar este proceso al negar su voluntad de poder. La moral, la filosofía, el uso de la razón y esa negación de la voluntad de poder de la cultura occidental representan síntomas decadencia.
La moral para Nietzsche en el texto sería un conjunto de normas que abren la posibilidad de que el hombre pueda ser “de otro modo” que se juzga como mejor. Esto es imposible, según Nietzsche. Un poco más abajo, se dice que la moral es una “condena” señalando de esta manera su negatividad en el sentido de que sería una forma de “amargarle” la vida al individuo que se equivoca cuando se deja llevar por los instintos vitales. Así pues, la moral sería para Nietzsche contraria a la vida; un instrumento que, en manos de los repugnantes moralistas y sacerdotes, serviría para dominar.
La razón está muy relacionada con la moral porque Nietzsche la coloca en el ámbito del sacerdote, del moralista. Ellos son los que razonan la moral. La razón es pues el instrumento determinante de la moral. Con la razón, el moralista le dice al individuo hacia donde tiene que dirigir sus esfuerzos para lograr conformar su vida con ese modelo que se le presenta.
Así pues, razón y moral son claramente errores contrarios a la vida. Con la razón, el moralista ha pretendido “parar” el mundo y dar con la verdad pero negando la vida. Con la moral, se ha querido que los individuos “luchen” ingenuamente para lograr ser mejores como si se pudiera ser distinto de lo que somos. Para Nietzsche, la razón es un instrumento con el que el hombre ha logrado su supervivencia de la misma manera que las fieras tienen garras para lo mismo. Pero la verdad es imposible debido a su perspectivismo. Y la moral es una manifestación de la voluntad de poder, degenerada por la razón que de esta forma trata de imponerse, no por el instinto natural animal, sino de forma resentida esclava. Estamos ante la famosa transmutación de todos los valores.
El concepto de sabio que usa Nietzsche es evidentemente distinto del que solemos utilizar hoy en día. Habitualmente lo asociamos a una persona que hace uso de la razón y con ella intenta alcanzar la verdad en diversos campos del conocimiento. Llegamos incluso a llamar sabio también al que sabe lo que es importante en la vida moral. Pero en este texto de Nietzsche la palabra verdad puede ser de tono claramente despectivo, puesto que el autor nos afirma de que en realidad no eran sabios, puesto que estaban simplemente creando ultramundos imaginarios y reflexionando sobre cosas sobre las que no podían pensar, al estar de hecho metidas en ellas. En toda la obra nietzscheana se desprecia a los sabios griegos puesto que fueron los que pasaron del mito al logos y empezaron a crear, según él, ultramundos imaginarios por miedo al devenir y no aceptaron la realidad. Por culpa de estos primeros sabios comenzó la decadencia cultural de la humanidad.
En cuanto al término «filosofía», Nietzsche la relaciona en el texto con los sabios griegos, pues la filosofía es la reflexión sobre el mundo en el que vivimos y la practican los sabios o filósofos. Esta filosofía es la encargada de pensar, de usar la razón, y por eso Nietzsche la desprecia. La razón para el autor solo crea monstruos de fantasía y no nos dice la realidad, que es el puro devenir y que por eso no se puede conocer. A lo largo de la obra de Nietzsche se habla de los filósofos-momia, que son aquellos que con la razón pretenden inmovilizar la realidad y conocerla, cosa que es imposible por el continuo devenir.
El término egipticismo en el pensamiento de Nietzsche tiene un carácter despectivo, es un adjetivo que coloca a los filósofos, a los falsos “buscadores de la verdad”, que tienen tendencia a simplificar la realidad, hacer de ella una momia, otorgando un valor superior, a veces infinitamente superior, a aquello que “deshistorizan” porque no aceptan la realidad cambiante que la experiencia sensorial les confirma constantemente así que niegan el devenir, con ella los sentidos y sus consecuencias.
Las momias conceptuales son el ejemplo perfecto de la labor de los filósofos. Todo lo que cae en sus manos muere, es vaciado de vida, momificado para que permanezca inmutable, simplificado en extremo para poder abarcarlo, comprenderlo y, después, convertirlo en ídolo, adorarlo y obligar al resto a aceptarlos también como valores supremos, verdades objetivas que solo son fruto de su miedo al devenir.
- CONOCIMIENTO: En Nietzsche, la reflexión sobre el conocimiento adopta dos actitudes: La primera, de sospecha, se apresta al desenmascaramiento del conocimiento como modo de engaño e ilusión, incluso como manera de olvido. Por eso, empieza la narración “Sobre verdad y mentira en sentido extramoral”, con una fábula en la que el conocimiento o la inteligencia nos la presenta como una invención realizada por los hombres para poder sobrevivir, y sentirse el centro de todo. Es un recurso utilizado por el hombre para considerarse como algo especial. La mentira en sentido extramoral, hace referencia a la incapacidad de acceder al conocimiento auténtico de la realidad, por estar condicionados por un modo determinado de percibir las cosas (perspectivismo). La segunda actitud, de escucha, atiende a la génesis de esas ficciones que pasan por verdades. La verdad por lo tanto no es más que una ficción, una convención establecida por los seres humanos para poder entenderse y poder conocer la realidad. Ambas actitudes son complementarias. Si la falsedad del conocimiento proviene del olvido de que fue inventado para la supervivencia, habrá de ser una genealogía la que desande el camino y nos ponga en la pista del auténtico saber.
Importancia del Lenguaje
En esta convención escondemos y deformamos la realidad, nos olvidamos del pacto y pensamos que las palabras coinciden con las cosas. ¿Cómo tener claro que el lenguaje no coincide con la realidad?. La respuesta la encontramos en el proceso y fases a través de las cuales se forman las palabras.
- 1ª fase.- Entramos en contacto con la realidad exterior que actúa como estímulo nervioso y provoca en el sistema nervioso una reacción.
- 2ª fase.- Los estímulos captados a través de los sentidos crean una imagen, que se convierte en una metáfora del original.
- 3ª fase.- Intentamos transmitir esa imagen mental a los demás mediante un sonido articulado que es a lo que llamamos palabra. Segunda metáfora.
El lenguaje pues transforma la realidad originaria y la expresa de modo metafórico. Nietzsche insiste en la imposibilidad de alcanzar la verdad mediante los conceptos. Al intentar con una única palabra referirnos a un conjunto amplio de cosas (con la palabra “hoja” designamos a todas las hojas existentes) eliminamos lo individual que hay en cada cosa, en cada ser. Esto representa una crítica al pensamiento platónico y su mundo de las ideas. Para reivindicar lo individual y lo diferente que es lo real.
Crítica a la Filosofía según Nietzsche
Toda la filosofía se ha basado también en un error: El pensamiento de que ser, verdad y concepto, son lo mismo. La verdad y los conceptos son estáticos, no cambian. El hombre para comprender debe captar en su mente una idea no cambiante. El ser de cada cosa queda reducido a un concepto verdadero, que no debe cambiar, porque si no su verdad quedaría en entredicho. Sin embargo Nietzsche va a defender la concepción del ser según Heráclito: El ser es cambiante. Si esto es así, el conocimiento no es posible, porque no cabe en conceptos estáticos verdaderos.
La filosofía ha seguido el camino de Parménides (ser = verdad = pensar) equivocadamente. Es hora de reivindicar a Heráclito y su ser como devenir, cambiante y por lo tanto incognoscible.
La Verdad Extramoral en Nietzsche
Viene a estar vinculada al interés social, es una construcción que en su uso termina en costumbre y adopta forma de norma, de obligación. Nos olvidamos de la mentira original, de las impresiones intuitivas originarias, y construimos un universo ficticio de conceptos que utilizamos para poder comunicarnos y vivir en sociedad. Nietzsche admira la capacidad constructora e inventiva del hombre, capaz de levantar un edificio complicadísimo como es el lenguaje. Pero que nos aleja de la auténtica verdad, de la auténtica realidad, que no podrá ser jamás alcanzada.
CRITICA A LA CIENCIA Si la auténtica verdad para Nietzsche resulta ser inaccesible o inaprensible. La ciencia y el trabajo científico, creen que son poseedores de la auténtica realidad, creen poseer un rigor y una objetividad por las que descubren la existencia en la naturaleza de unas leyes, que les permiten determinar lo que sucederá, puesto que la Naturaleza sigue unas regularidades que son comprensibles desde la metodología matemática. Nietzsche realiza una crítica a la ciencia, y muestra que es una peculiar manera de interpretar la realidad basada en la regularidad que establecen las matemáticas. El ser es cualidad y no cantidad.. La ciencia para Nietzsche se encuentra muy alejada de conocer la realidad. Ya hemos dicho que el lenguaje no reproduce la realidad en sí, ha creado un entramado de relaciones ficticias entre los conceptos, un conjunto de generalizaciones, ilusiones que el uso y la costumbre han ido imponiendo, sin embargo la ciencia construye desde esos conceptos y se crea unas relaciones entre estos conceptos inauténticas (Ejemplo V=E/T conceptos como velocidad, espacio y tiempo). Pero esa verdad científica, que es una más entre las muchas que puedan existir. La ciencia se muestra con un orgullo, que considera que es la única válida. El científico se cree que en la naturaleza existe un orden (cosmos) que ha conseguido conocer.DIOS La “Muerte de Dios” es la idea reguladora de todo el proceso de limpieza y destrucción la cultura occidental que realiza Nietzsche, el afán que tenía este por destruir todo lo creado por la cultura occidental desde que se abandonó el ámbito de la sabiduría trágica por el de la científica. Esto es, desde la época de los primeros filósofos griegos, con lo que supone la destrucción total de todo conocimiento filosófico por haber sido orientado mal desde un principio. La idea de Dios representa la concreción máxima de los valores de la cultura judeo- cristiana.La demostración de la vaciedad de tal concepto, del engaño al que nos somete y de la infravaloración de lo humano a que impulsa, nos obliga a enterrarlo. Pero tras su muerte hay que tener cuidado de no sustituirlo por otros elementos que desempeñen las mismas funciones, como ha sido el caso de la Ilustración con la Razón, el Positivismo con la Ciencia y el Liberalismo con el Estado.Si Dios ha muerto, la moral occidental no tiene ningún sentido: hay que transmutar todos los valores sostenidos en el resentimiento de la moral de los esclavos, por los valores de la vitalidad y la fuerza de la moral de los nobles o señores. Desterrado el concepto de verdad, sustentado en la existencia de Dios, la voluntad es aquello que comprende y empuja el auge de la vida: acepta la voluntad de poder y su repetición. El sentido de la vida ya no es conocer una verdad muerta con Dios, sino reconocer que la vida por sí misma es su sentido, la fuerza del deseo, de la voluntad hace que lo que ella quiere se torne en realidad. La voluntad es un sentimiento vital que en vez de crear verdades crea algo de más valor: realidades. La conclusión de la muerte de Dios es el nihilismo. El nihilismo no se puede entender como una teoría filosófica, sino como un movimiento histórico y como un proceso psicológico. Como movimiento histórico representa toda la evolución cultural de occidente, sustentada en la metafísica platónica y la moral cristiana que despreció la ingenuidad del devenir y el valor telúrico de la vida. Como proceso psicológico es el estado de desasosiego y desorientación en el que el individuo cae al darse cuenta de la ficción en la que cree. Es el punto último en el que desemboca, tras los estados de conmoción y desesperación.EL HOMBRE En su antropología, el hombre es pensado como un ser mediocre, gregario, miserable, incapaz de grandes valores. El hombre es un ser defectuoso y enfermo, que se niega a evolucionar, a abandonar los errores de la cultura occidental, sin ser consciente de que se vence a sí mismo mediante la superación. La transformación del hombre en superhombre pasa por tres metamorfosis : Camello: el espíritu del hombre es un animal de carga, que obedece a su amo sin quejarse. Este le manda y el obedece. León: el hombre- camello cansado por el peso de la carga, se revela contra su amo y lo derriba se convierte en el hombre león crítico y dueño de si mismo e impone su voluntad. Niño: A medida que se va quitando las cargas, se va haciendo el creador se sus propios valores; se convierte en el hombre- niño que busca la afirmación de si mismo. El niño es el símbolo de la propuesta definitiva de transformación en el superhombre. Características del superhombre: Ansia de vivir: El superhombre se preocupa, sobre todo de la vida sin traba alguna. Valora la vida corporal, la salud , el placer, las pasiones , la violencia, la victoria el éxito…Ama la fuerza física, el poder, la rebeldía, del fuerte y del poderoso. Superación: No está sometido a ningún precepto moral, porque se situa por encima del bien y del mal. Su conciencia es la conciencia de la naturaleza: lo que favorece la naturaleza es bueno y lo que la perjudica es malo. Superior: Es un ser superior que dice si a la jerarquías entre los hombres: la igualdad sólo lleva a la moral de rebaño, de esclavos. El superhombre debe practicar la moral de los señores que dominan por la fuerza y por la violencia. Valores: Ha cambiado no sólo los valores sino la misma forma de valorar, es decir, la forma de vivir. Se ríe de los valores tradicionales Tierra: Es fiel a lo terreno, a lo que pisa, olvidando las elucubraciones espirituales. Es el más acá lo que le preocupa hasta que lo vive con toda intensidad. Poder: el superhombre vive la voluntad de poder, que es la consecuencia de las ansias de vivir. Se debe dejar llevar por el deseo de dominar, de ser señor y no esclavo. Retorno: Es el ser que vive el eterno retorno. Querer el futuro es volver a querer el pasado; todo ha existido ya. Voluntad de poder significa voluntad de dominio, fuerza, impulso vital, emoción, pasión y voluntad de poderío, la ley del más fuerte…Es la exaltación de la fuerza y de la agresividad. El superhombre es el que debe fundar una sociedad de nobles y tiranos dominadores. La VOLUNTAD DE PODER es la fuerza que se aloja en el interior de ser humano para conseguir que lo que el deseo anhela se convierta en realidad.El que quiere suficientemente, puede. Esta VOLUNTAD DE PODER no ha sido reconocida como tal por el hombre hasta que no ha llegado el final del NIHILISMO. En ella ha habido tres momentos: -VOLUNTAD DE NADA: El hombre necesitaba la Verdad, Dios, y su voluntad los ha creado, aunque solo eran una invención olvidada. Pura nada. -VOLUNTAD DE VERDAD: El hombre se hace consciente del engaño al que él mismo se había sometido y descubre que todo lo que la voluntad quería, no era más que eso, deseo de voluntad. El eterno retorno es un sí a la vida tan fuerte que no solamente afirma los valores de esta tierra, sino su deseo de que se repita eternamente. No se resigna a que se termine esta. Parece ser que el eterno ciclo del morir y el volver a existir se repite eternamente para todos, esta vida hay que vivirla infinitas veces con cada dolor y cada alegría… El eterno retorno es la repetición de los mismos acontecimientos en los mismos individuos. Lo que se repite es la voluntad, el deseo, la vida es sentir deseos que retornan eternamente.Pretender aplacar los deseos satisfaciéndolos significa ser un ignorante porque el deseo, la voluntad, retornan eternamente.