3 Nietzsche O LA FILOSOFÍA DEL MARTILLO
Si Marx es el filósofo que descubre las relaciones de producción que subyacen bajo las manifestaciones culturales de la sociedad capitalista, Nietzsche es el filósofo que desenmascara las fuerzas vitales que se esconden tras los valores de la cultura occidental. Su crítica a la civilización occidental en todos sus ámbitos es quizá la más radical que se ha hecho nunca. Esta crítica, que denuncia que la razón es el resultado de una represión de los instintos, una negación de la vida, se expresa de una forma muy poco sistemática. Nietzsche se define como «filósofo a martillazos»: utiliza esta expresión como símbolo de una filosofía que destruye todos los ídolos de la cultura occidental al demostrar que están huecos.
Un lenguaje muy personal un estilo brillante e incisivo, con una fuerza expresiva arrolladora, y el uso continuo de ta metáfora y el aforismos hacen de Nietzsche un autor siempre sugerente y estimulante. Su método genealógico y su análisis desmitificador del lenguaje son aportaciones fundamenta-les de Nietzsche a la filosofía posterior.
Reivindicado por el anarquismo, el nazismo, el existencialismo e incluso por el cristianismo, el vitalismo de Nietzsche influirá decisivamente sobre la filosofía y la cultura del Siglo XX: pintores y escritores se inspirarán en este filósofo y sus frases, convertidas en un lugar común, aparecerán reproducidas en las pintadas de la revolución contracultura’ de Mayo del 68. En sus últimos años, ya al borde de la locura, Nietzsche parece intuir su destino: «Alguna vez irá unido mi nombre al recuerdo de algo gigantesco: de una crisis como jamás la había habido en la tierra, de la más profunda colisión de conciencia, de una decisión tomada, mediante un conjuro, contra todo lo que hasta ese momento se había creído, exigido, santificado. Yo no soy un hombre: soy dinamita».
3.1 Vida y obra
Friedrich Nietzsche nace en Rocken (Alemania) en 1844, hijo y nieto de pastores pro-testantes. Educado en un ambiente religioso, muestra una gran sensibilidad para la música y se forma en el estudio de los clásicos. En 1864 empieza a estudiar teología y filología clásica en la Universidad de Bonn. En esos años lee a Schopenhauer y conoce a Wagner, con quien mantendría durante años una gran amistad. En 1868 es nombrado catedrático de la Universidad de Basilea (Suiza). Comienza entonces la primera de las tres etapas en que suele dividirse su pensamiento, que no deben ser entendidas como períodos distintos y sin relación entre ellos, sino como momentos de la evolución de una obra que tiene una clara continuidad:
-Período ROMántico (1871-1878). Corresponde a su etapa como profesor en Basilea. Escribe El nacimiento de la tragedia, su primera obra importante, en la que ya plan-tea la afirmación de la vida, representada en la tragedia griega. En esta etapa, mar-cada por la influencia de Schopenhauer y Wagner, escribe Consideraciones intempestivas, donde ataca los valores de su época, y la cultura alemana en particular
. -Periodo positivista (1878-1883). En esta época empiezan a agudizarse sus problemas de salud que te obligan a abandonar su cátedra. Empiezan los viajes por Italia y tos Alpes suizos. Unos años después, Wagner escribe su ópera Parsifal, y Nietzsche rompe su amistad con él. Contra él y contra Schopenhauer escribe Humano, demasiado humano. Un libro para espíritus libres. Otras obras de este período son El viajero y su sombra y La gaya ciencia, en ta que propone la liberación del hombre de los valores trascendentes.
-Período crítico (1883-1889). Una de sus obras fundamentales, Así habló Zaratustra. Un libro para todos y para nadie, marca el cambio de etapa. En sus páginas se consolidan los grandes temas de su filosofía: la voluntad de poder, la muerte de Dios, el eterno retorno y el superhombre. En las obras de esta etapa, Nietzsche desarrolla la crítica radical de la religión y la filosofía y el concepto de transvalora-ción de los valores: Más allá del bien y del mal, La genealogía de la moral, y tres obras de i888, su último año de lucidez: El crepúsculo de los ídolos o cómo se filo-sofá con el martillo, El Anticristo. Maldición contra el cristianismo y Ecce Horno. Cómo se llega a ser lo que se es. Los problemas de salud se agravan y en 1889, después de un colapso en Turín, le diagnostican reblandecimiento cerebral. Tiene entonces 45 años. Muere en 190o, tras diez años de internamiento en una clínica psiquiátrica. Los aforismos y fragmentos que dejó se publicarían después bajo el título de La voluntad de poder (1901).
A la muerte de Nietzsche su hermana Elizabeth falsificó y descontextuatizó algunos de sus escritos para ofrecer una imagen antisemita del filósofo. La revisión crítica de su obra no llega hasta 1954, to que contribuye a la aparición de interpretaciones ter-giversadas. Algunos conceptos de la filosofía de este autor (voluntad de poder, superhombre) son fáciles de malinterpretar debido a la falta de un discurso lineal y al empleo de metáforas y aforismos. De hecho, el nazismo adoptó como propia la filosofía de Nietzsche al considerar que justificaba la superioridad de una raza sobre el resto y el dominio de un hombre sobre otros.