CONTEXTO HISTÓRICO Y CULTURAL:
La búsqueda de la verdad y el deseo de evitar el error pueden situarse dentro de un contexto de crisis, como fue en el Siglo XVII. Hay desordenes sociales y políticos producidos por la escasez de recursos económicos y también por los enfrentamientos religiosos. La guerra de los 30 Años(1618- 1648), en la que participo Descartes, es su mejor expresión, pero también hay otros conflictos como el de la Fronda en Francia(1648-1653).Si nos fijamos en los aspectos culturales, el fenómeno que mas influye es el Barroco. Su insistencia en la fugacidad de la vida, en el continuo cambio y movimiento, en la irrealidad de las cosas(la vida se toma como un sueño) provoca como reacción la necesidad de encontrar verdades absolutas, perennes.
CONTEXTO FILOSÓFICO:
El problema del método pasa a primer plano. Se proponen soluciones que dieron lugar a dos líneas de pensamiento enfrentadas, el Racionalismo y el Empirismo. Descartes es considerado el padre del Racionalismo. Una tercera línea de pensamiento fue el escepticismo, que sostuvo la imposibilidad de encontrar nuevos referentes sólidos para alcanzar la verdad. En Segunda Parte del Discurso aparecen expresiones literales. Por eso, la estrategia cartesiana empezará por vencer el escepticismo con sus propias armas, transformando la duda escéptica en metódica. Descartes afronta un proyecto metodológico que le permita superar la crisis.
El método resolutivo-compositivo de Galileo defiende que la naturaleza está escrita en lenguaje matemático, por lo que su conocimiento solo será posible descifrando sus relaciones y exprésándolas en fórmulas. Propone tres pasos: resolución, análisis de los datos; composición, formulación de una hipótesis y resolución experimental, verificación de la hipótesis mediante experimentos y observaciones. El mundo físico de Descartes también será un mundo matematizado. Asimismo, resolución y composición estarán presentes en el análisis y la síntesis del método cartesiano.
RELACIÓN CON EL Empirismo Escéptico DE Hume
-La realidad.
Descartes distingue 3 tipos de realidades: el mundo físico, sustancias extensas; seres humanos, sustancias pensantes y Dios, sustancia infinita. La realidad, lo que Descartes llama el mundo, está formado por el conjunto de las sustancias extensas. Para Hume, la existencia de un mundo físico, de un mundo formado por sustancias extensas, es una mera crencia creada por los hábitos de la razón. El hombre solo tiene certeza de sus impresiones. La idea de sustancia carece de una impresión correspondiente, así que, también es una creencia. Ante el mundo externo solo cabe el escepticismo.
-El conocimiento. Para Descartes la única fuente de conocimiento cierto es la razón. Los sentidos nos engañan. Para Hume, las ideas son verdaderas solo si provienen de una impresión. La razón, lejos de ser el criterio de verdad, es el origen de las creencias. La razón es la que, atenazada por los hábitos, inventa ideas. El criterio de verdad reside en las impresiones. Sin embargo, según Hume, aunque las creencias no proporcionan certezas, sin ellas la vida seria imposible. No tienen que ser rechazadas, como propone Descartes, sino asumidas como necesarias para la vida.
-El ser humano. Para Descartes, el ser humano es una sustancia cuya naturaleza consiste en pensar. El yo pensante es una sustancia pensante. Para Hume, el yo es una creencia de la razón. ¿Cuál es la impresión de la que surge esa idea? No se encuentra. Por tanto, se está ante una idea falsa. El yo es simplemente un haz de impresiones, carece de identidad.
RELACIÓN CON LA ACTUALIDAD
– El Dircurso propone un método y un criterio de verdad que son herederos de las matemáticas. Descartes cree que de esta forma todas las ciencias conseguirán una certeza semejante. La matematización es una carácterística que desde entonces ha impregnado casi todos los ámbitos de la ciencia occidental. Desde los ejes cartesianos hasta el diseño del acelerador de partículas se siguen los mismo parámetros: lo real es lo matematizable.
-La matematización por si sola no hubiera propiciado el desarrollo científico si no hubiera ido acompañada por la autonomía de la razón. Solo una razón independiente a la religión puede llegar a la verdad. Descartes se convierte así en una referencia básica del proceso de laicización. Una vez que la razón se ha separado de la fe, la ciencia podrá descubrir leyes sin que tengan que estar testadas por ninguna autoridad distinta de la experiencia. Desarrollo científico y laicización son procesos paralelos. No obstante, la fe sigue presionando para mantenerse como criterio de la verdad.
-Hay otras ideas cartesianas que vuelven una y otra vez. Por ejemplo, la sospecha de que la realidad en la que creemos no sea tal, sino una mera ilusión de los sentidos, ha sido retomada en varias producciones cinematográficas. El argumento del genio maligno es actualizado en Matrix, producción que nos describe un mundo habitado por hombres que, creyendo conocer el mundo a través de los sentidos, realmente solo reciben impulsos eléctricos controlados por un poderoso sistema informático, es decir, un genio maligno los engaña, convirtiendo la realidad digital en la realidad que se impone