Ascetismo:
El ascetismo es la doctrina filosófica o religiosa que busca, por lo general, purificar el espíritu por medio de la negación de los placeres materiales o abstinencia. En el dualismo antropológico se sigue un estilo de vida ascético.
Amor fati:
La compatibilidad entre la irracionalidad de la existencia y el optimismo de afirmar la vida terrena como es, se encuentra el concepto de amor fati o amor al destino. Esta idea se ve especialmente reflejada en la figura del Dios Dionisos, el Dios que muere y renace cada año. Amor fati significa amar la vida en su continua construcción y destrucción, en su felicidad y sufrimiento.
Héroe trágico:
es una tragedia griega que encontró Nietzsche que sirve como ejemplo idóneo de la actitud que habría que tener frente al sufrimiento. El héroe trágico destaca precisamente por no ser pesimista, se enfrenta a su destino con honor, aunque incluso éste le lleve a la muerte. En este sentido se afirma que el Nihilismo puede llegar a ser positivo, en tanto que hace compatible el absurdo del sufrimiento con el amor a la vida tal y como es.
Nihilismo:
El Nihilismo es una doctrina filosófica que considera que nada tiene sentido. Rechaza todos los principios morales y religiosos alegando que Dios no existe y que el sufrimiento no tiene sentido. Ser nihilista significa quedarse huérfano, vivir en indigencia y aceptar el absurdo. Es el ateísmo llevado a sus últimas consecuencias.
Proletariado:
el proletariado es, en la filosofía marxista, la clase social que no posee propiedades privadas. Como no tiene propiedades, nada puede producir. No puede transformar la naturaleza para realizarse en el trabajo. El proletariado hace referencia a la clase obrera.
Símil del pintor:
es una metáfora utilizada para reflejar el concepto de sentido dentro del debate entre el ateísmo de Nietzsche vs cristianismo. A partir de él podemos entender que la pregunta por el sentido de la vida es una pregunta genuinamente cristiana, porque sólo tiene sentido preguntarse por el sentido de la vida si creemos que ha habido un Dios creador que le ha dado un significado concreto al mundo, a la historia y a nuestra vida. Por ello Nietzsche, que no cree en Dios, establece que las cosas no tienen un significado, sino que las cosas ocurren porque sí y punto. Desde el ateísmo nietzscheano, buscarle un sentido a la vida es un error propio de cristianos.
Símil de la moneda:
es una comparación entre la visión del mal, la cual tiene dos caras, y una moneda. Que relata que el amor, el mal y la libertad son una misma cosa. El mal sería las consecuencias de la libertad mal usada, y el bien y el amor sería las consecuencias de la libertad bien usada. Igual que una moneda tiene dos caras; la cara y la cruz, también la libertad tiene dos caras; el amor y el sufrimiento.
Mal como privación:
según S. Agustín de Hipona, el mal es la privación del bien. Se refiere a que el mal es la ausencia de Dios en los seres creados. En esta explicación S. Agustín se separa radicalmente del dualismo cósmico, ya que establece que el mal ni existe antes que Dios ni es creado por Dios. Simplemente define el mal como un uso de la libertad sin Dios.
Interés individual
Principio del capitalismo en el que, según Adam Smith, el motor de la economía, la fuente original de toda riqueza es el deseo individual de enriquecerse. Es importante no contraponer el deseo individual de enriquecerse al de Bien común. Adam Smith afirma que aquel individuo que busca enriquecerse aporta a la sociedad mucho más que aquel que sólo vive para el bien común.
Enriquecerse y servicio:
es un principio básico del capitalismo en el que vender es tener la empatía suficiente para entender lo que el otro necesita. De este modo, una persona se enriquece en tanto oferta algo que facilita la vida del otro. Hay pues, un principio de solidaridad en el liberalismo económico, pues el sentido de la riqueza está en la capacidad de servir las necesidades ajenas.
Ley de la oferta y la demanda:
La ley de la oferta y la demanda es un principio básico del capitalismo. Este principio establece que el precio de las cosas depende de la relación que existe entre la demanda (servicio necesitado) y la oferta (el servicio ofrecido). Según esta ley, mientras más demanda exista de un determinado producto o servicio, más sube el precio del producto. Del mismo modo, mientas menos demanda exista, menor precio.
Mano invisible
El concepto de mano invisible es una metáfora que usa Adam Smith para expresar la capacidad autorreguladora del libre-mercado. Según él, hay una especia de mano invisible que señala qué servicio prestar y a qué precio. El Estado y el gobierno, no deben intervenir ni cambiar estas reglas del juego estableciendo precios, ni qué se puede producir ni qué se debe consumir, pues al hacer esto estaría frenando el progreso económico. Según el liberalismo, hay que dejar libertad para que la economía crezca.