1. La alienación
La alienación en el trabajo se produce cuando el valor del producto creado por el trabajador no le pertenece ni contribuye a mejorar el mundo, sino que beneficia al propietario. El salario no compensa el trabajo realizado, sino solo la fuerza de trabajo. Marx busca la raíz de la alienación en las condiciones materiales de los individuos, y su crítica a la alienación se convierte en una crítica a la ilusión de libertad en la sociedad burguesa moderna, comenzando por su núcleo: el trabajo asalariado.
La relación entre el propietario de los recursos y el trabajador desposeído es una relación contractual-mercantil. Marx criticó cuatro aspectos de esta relación:
- La igualdad contractual legal no implica igualdad material, ya que el contrato se establece entre una parte con recursos (los propietarios) y otra sin ellos, lo que limita la libertad de esta última.
- Los propietarios de los medios de producción se aprovechan injustamente de esta desigualdad material, explotando a los trabajadores a cambio de un salario bajo. La plusvalía es la diferencia que obtienen como beneficio empresarial.
- Las decisiones importantes las toma la clase social poseedora de los recursos económicos, que tiene acceso al poder político.
- La falta de libertad material lleva a que los individuos se representen el producto de su propio trabajo de forma fetichizada y alienada.
2. La ideología
En la sociedad capitalista, la ideología sirve para justificar, mantener y reproducir las condiciones de explotación de una clase sobre otra. La ideología es un conjunto de ideas y formulaciones confusas que distorsionan la realidad y las condiciones de vida de las personas.
El marxismo sostiene las siguientes afirmaciones sobre la ideología:
- La conciencia es un producto social.
- La ideología tiene un sentido negativo, ya que se basa en ideas falsas y distorsionadas.
- Los contenidos ideológicos de la conciencia no tienen sustancia propia. Su función es ocultar, desfigurar y suplantar la situación real de existencia de los individuos, que el marxismo caracteriza como alienación.
3. El hombre y el humanismo marxista (antropología)
El hombre
El auténtico conocimiento es la praxis, a través de la cual el hombre se relaciona con la naturaleza y con otros hombres. La esencia humana es el conjunto de las relaciones sociales.
La concepción del hombre en el marxismo se resume en:
- El hombre es un ser natural en construcción: similar a los animales, pero también un ser natural humano.
- El hombre es un ser activo: la actividad productiva, el trabajo, es su fundamento.
- El hombre es un ser social: la naturaleza del hombre consiste en una relación natural y social.
El humanismo marxista
El marxismo puede considerarse un humanismo porque promueve la crítica y la lucha contra la alienación del hombre, buscando su liberación. Niega la existencia de un ser distinto y superior a la naturaleza y al hombre.
4. A) El método dialéctico
La dialéctica expresa la naturaleza de la realidad como un proceso, una totalidad dinámica de elementos interrelacionados.
- La naturaleza no es el resultado de algo previo, sino que es originaria e inmediata.
- La categoría de totalidad expresa la totalidad natural-social y consiste en la transformación de la estructura y el orden real dado, y la instauración de uno nuevo.
- La realidad es dialéctica y material.
B) Concepto marxista de materialismo
El materialismo de Marx consiste en considerar la realidad como el proceso dialéctico real de producción (como trabajo o acción productiva del hombre en y con la naturaleza).
El materialismo dialéctico es un sistema filosófico que afirma que la materia constituye la esencia de todo lo real.
C) Materialismo histórico
La historia es la sucesión de los diferentes modos de producción. Cada sucesión implica una revolución social provocada por las contradicciones entre las fuerzas productivas y las relaciones de producción, que constituyen la estructura económica de la sociedad. Esta estructura se relaciona con la superestructura ideológica y jurídico-política, a la que corresponden unas formas sociales de conciencia.
La concepción materialista de la historia se basa en:
- La lucha de clases es el motor de la historia.
- Existe una relación dialéctica entre la infraestructura y la superestructura.
- El fin de la historia es la desaparición de las clases y la instauración del comunismo, que permitirá la realización total del hombre.