El Mecanicismo de Descartes
Definición
Una teoría mecanicista de la naturaleza es aquella que no admite más explicación de los fenómenos naturales que las derivadas de los movimientos o combinaciones de movimientos de los cuerpos en el espacio. Esta teoría concibe la naturaleza como una máquina, cuyos movimientos son resultados automáticos de otros movimientos, que se transmiten de cuerpo a cuerpo por medio de una acción recíproca.
El Reloj de Descartes
Descartes relaciona el mecanicismo con un reloj de cuerda, ya que es un claro ejemplo de concepción mecanicista. Continuando con este símil, podemos preguntarnos: ¿Quién le ha dado cuerda o quién lo ha construido? Descartes contesta de esta manera: Dios ha creado el universo de materia inerte y la ha dotado de movimiento. La cantidad de esta materia permanecerá estable e inalterable porque Dios es inmutable y no vuelve a intervenir desde el momento en que ha creado el universo.
Materia y Diversidad
No existe diversidad de materias, ya que la materia extensa ha sido dividida indefinidamente dando lugar a todas las clases de seres materiales que existen. Por lo tanto, es común y única.
Alcance del Mecanicismo
La interpretación mecanicista abarca todo el universo, por lo que también se incluye en la explicación el mundo orgánico, al que considera máquinas que se rigen por las leyes universales y necesarias del movimiento.
La Moral Provisional de Descartes
Necesidad de una Moral Provisional
Descartes nos propone una moral provisional para sustituir la ausencia de certeza. Debemos tomar dicha moral como un»mientras tant» hasta que alcancemos la certeza, puesto que no podemos permanecer sin soluciones en la vida práctica. Hay que establecer una moral provisional que nos proporcione una especie de normas que nos permitan actuar de manera correcta.
Las Máximas
1ª Regla: Descartes recomienda que nos guiemos por las opiniones de los hombres más sensatos, ya que son los más prudentes. Esto nos exige observación y juicio. En caso de incertidumbre y duda, hasta que alcancemos nuestros propios principios de certeza, es mejor seguir el ejemplo de los más sensatos que dejarnos llevar por el amoralismo, que es la ausencia de moral o la falta de norma.
2ª Regla: En esta regla, Descartes propone la acción y no la parálisis que nace de la duda y la incertidumbre. Se debe actuar aunque cometamos un error, porque es preferible a la indecisión. La vida nos obliga continuamente a elegir y actuar, y según Descartes, la constancia en la acción es preferible a la inconstancia y, además, más provechosa. Es decir, debemos realizar aquello que hemos decidido aunque no estemos totalmente seguros.
3ª Regla: Es una regla estoica que sigue el principio de que no nos afectan tanto los objetos como el juicio que hacemos de ellos. Por ejemplo, el miedo que nos puede producir entrar en una habitación perfectamente conocida pero que está oscura. En esta moral, se distingue aquello que depende de nosotros y que, por lo tanto, podemos controlar y modificar (por ejemplo, los juicios) y aquello que no depende de nosotros porque está al margen de nuestra voluntad (por ejemplo, nuestro cuerpo o el azar). Debemos conseguir hacernos dueños de nuestros pensamientos y controlar nuestros juicios. De esta manera, podremos llegar a alcanzar la felicidad, pues el cómo nos afecte la realidad será controlado por nuestra voluntad y cómo nos afecte el azar estará sometido a nuestro control. Descartes nos advierte de que esto no es fácil y requiere mucho esfuerzo.
Conclusión: Nos recomienda elegir la mejor entre las diversas ocupaciones de los hombres. En el caso de Descartes, él elige la filosofía, cultivar la razón y alcanzar el conocimiento de la verdad, y esto lleva a una conducta justa y buena, ya que por medio de los buenos principios no se pueden cometer errores.
El Método Científico
Aspectos del Método Científico
En el método científico, hay dos aspectos a destacar: el aspecto racional y el aspecto empírico. Destacan tres autores: Bacon, Galileo y Descartes. Sus reflexiones se han elaborado con independencia los unos de los otros; sin embargo, podemos decir que los tres tienen algo en común, por ejemplo, su confianza en la ciencia. Los tres son bastante críticos respecto a la tradición y la autoridad de los filósofos del pasado.
Bacon: Aspecto Empírico
Para Bacon, destaca más el aspecto empírico y el aspecto de la observación minuciosa de la naturaleza. Para Bacon, saber es poder. Se debe adquirir dominio sobre la naturaleza, y a la naturaleza se le domina conociéndola. Bacon nos propone el método de la inducción, que desarrollará buenas inducciones procurando evitar las inducciones precipitadas debido a la observación de pocos casos.
Galileo: Aspecto Racional
Contrariamente a Bacon, Galileo destacó el aspecto racional, la confección de esquemas matemáticos a los que sometemos los fenómenos naturales. A su método lo llamó resolutivo-compositivo, que consta de tres pasos:
- Resolución: El fenómeno se analiza dejando fuera todos los aspectos que no sean cuantificables o matematizables.
- Construcción de una hipótesis: Estableciendo una relación entre algunos de los elementos cuantificables que antes se han analizado y dando a dicha relación una expresión matemática. De esta hipótesis se deducen consecuencias que deberán ser válidas para los fenómenos futuros.
- Verificación de las consecuencias: Extraídas de la hipótesis sobre la realidad empírica. Una vez sean verificadas por medio de experimentos, se considerarán leyes. Podemos considerar a Galileo como uno de los fundadores del método experimental.
Descartes: Fundador del Racionalismo
La existencia de esos dos aspectos del método científico, el empírico y el racional, hará posible la bifurcación de la filosofía en dos ramas diferentes: el Empirismo (que se desarrolla bajo las influencias de Bacon en Inglaterra) y el Racionalismo (que toma la matemática como modelo del saber en Europa). Descartes es el fundador del Racionalismo.
dor del Racionalismo.