1. Contexto Histórico de Santo Tomás de Aquino
1.1. Biografía
Santo Tomás de Aquino nació el 28 de enero de 1225 en Nápoles. Fue hijo del conde Landolfo de Aquino y Teodora. A los 5 años fue enviado a recibir su primera formación con los monjes benedictinos de Monte Casino. Le enviaron a la Universidad de Nápoles donde conoció al dominico Juan de San Julián y recibió el hábito de la Orden de Santo Domingo. Se dirigió a París para impedir que su madre interrumpiera su vocación, tuvo como maestro a Alberto Magno. Falleció el 7 de marzo de 1274.
1.2. Hechos Históricos Relevantes
1.2.1. Plenitud de la Edad Media
El siglo XIII representó el mayor esplendor de la Edad Media, caracterizado por un desarrollo económico, social y cultural. Un importante crecimiento demográfico, consecuencia de un clima beneficioso que provocó buenas cosechas, impulsó el desarrollo de universidades como Bolonia, Oxford, Cambridge y Salamanca. Santo Tomás vivió como profesor ese auge de las universidades.
1.2.2. Las Cruzadas
Las Cruzadas fueron intervenciones militares con el objetivo de conquistar Tierra Santa a los musulmanes. Las últimas cinco pertenecieron al siglo XIII. La Sexta Cruzada logró el condominio confesional de Jerusalén, Belén y Nazaret. Participaron soldados, campesinos, niños, mujeres y reyes.
1.2.3. Enfrentamiento entre Papado y Emperador
Dos poderes se disputaban la autoridad suprema en Europa: el poder temporal del Imperio y el poder espiritual del Papa. Santo Tomás vivió ese conflicto, ya que Federico I Barbarroja era pariente de su madre y él era firme al Papa por su vocación. En 1212, Federico II fue coronado emperador. La decadencia del imperio y el ascenso de Francia en Europa llegaron tras la muerte de Federico II.
1.2.4. El Arte Gótico
El arte gótico nació y se desarrolló desde el siglo XII hasta la implantación del Renacimiento, coincidiendo con el desarrollo de la cultura urbana. Dentro de la arquitectura, la catedral se convirtió en el elemento básico, ya que reunía todas las características esenciales de este estilo.
2. Contexto Filosófico de Santo Tomás de Aquino
2.1. Obra a Estudiar: La Suma Teológica
La obra capital de Santo Tomás, la Suma Teológica, quedó inacabada porque el 6 de diciembre de 1273 recibió una visión que le convenció de que sus investigaciones eran como paja ante la grandeza de la realidad divina. La Suma es una obra capital de la historia filosófica y teológica, escrita en tres partes. La intención de Santo Tomás era proveer a los principiantes de un tratado que recogiera todos los grandes temas del saber sin los defectos de desorden y prolijidad de los anteriores. Tomás estudió en Nápoles, donde pudo conocer el pensamiento de Aristóteles.
2.2. Recepción de Aristóteles
Tras la toma de Toledo, la escuela de traductores empezó a difundir versiones latinas traducidas de los comentarios a las obras de Aristóteles. Santo Tomás adquirió tesis sobre la naturaleza del mundo a partir de estas traducciones.
2.3. San Agustín y San Alberto Magno
La influencia más amplia en todos los pensadores medievales es San Agustín, quienes reciben a través de él la doctrina platónica. Vemos cómo en los textos de Santo Tomás le influye notablemente su doctrina sobre el mal o su visión de la ley, en la que desarrolla en clave cristiana el pensamiento estoico. San Alberto Magno fue el primer modelo de su proyecto filosófico: la realización de una nueva filosofía cristiana al hilo de las grandes tesis aristotélicas.
2.4. Otras Influencias
Influyeron en él Boecio, a quien atribuye la distinción fundamental de su doctrina entre el ser y la esencia. Santo Tomás recibió tesis de la doctrina de Pseudo Dionisio Areopagita, quien se hizo pasar por el primer discípulo ateniense de San Pablo, como la analogía o el modo de referir a Dios las propiedades que vemos en las criaturas.
3. Justificación de la Ley en Santo Tomás de Aquino
3.1. Orígenes
En el pensamiento estoico, la noción de ley se invierte con respecto a la ideada por Anaximandro. En el caso del estoicismo, la ley humana no es más que un momento de la ley general que manda en el universo. En Santo Tomás se consolida y desarrolla esta posición. Eso explica la prioridad de los temas éticos sobre los políticos y de la ley natural sobre la civil. Es importante que el concepto de ley se entienda en nuestro pensador en un sentido más amplio que el que utilizamos en los ámbitos jurídicos. La noción de ley traspasa el universo real de Santo Tomás, desde Dios hasta la más ínfima de las criaturas.
3.2. Los Tipos de Leyes
Para Santo Tomás, la palabra ley tiene un sentido moral. Es la orientación externa que conduce al ser humano a obrar bien. No es un obstáculo a la expansión de la libertad, sino un medio para su desarrollo. Para el dominico, ley es toda norma que prohíbe o prescribe una acción. Tanto en el mundo natural como bajo el imperio de la libertad en el mundo moral, la ley es algo interno al individuo. Aunque en la filosofía de Santo Tomás la vertiente ética domina sobre la política, en realidad, a la hora de analizar los diversos tipos de leyes que existen, utiliza un criterio político, pues el ser humano necesita de la ley para ser adiestrado y encauzado en el bien de la sociedad. Las leyes que distingue son: la divina, la natural, la religiosa y la política. Los seres, sean lo que sean, obran con ciertos fines y se dirigen por unos principios determinados que la ciencia estudia. Todo eso es posible en el pensamiento tomista porque esos principios ya se encuentran en Dios. Esto es la ley eterna. Santo Tomás la llama ley natural, junto con los decretos justos y debidamente promulgados que forman la ley humana.
3.2.1. Ley Natural
Por una parte, está el poder y designio de Dios hacia las criaturas en cuanto que criaturas, que se halla inmerso en la propia naturaleza de cada una de ellas: es la ley natural. Por otra parte, está el poder y el designio de Dios hacia el hombre en cuanto que este está destinado a vivir y a conocer realidades que traspasan el orden meramente natural: es la ley divino-positiva.
3.2.2 Ley Humana
El fundamento último de valor y legitimidad del resto de las leyes reside en la existencia de una ley eterna, perfecta e inmutable. La ley natural es la parte de la ley eterna que se encuentra inmersa en las criaturas y no es una ley distinta a la otra. La poseen los seres vivos e inertes. Todo proceso dirigido a un fin responde a las leyes naturales. En el ser humano se encuentra repartida de dos maneras: cuando es un ser corporal y cuando es un ser libre en su actuación consciente. Tomás enuncia una serie de preceptos fundamentales que corresponden al seno de la ley natural en el hombre:
- Hacer lo que es bueno y evitar lo que es malo.
- El derecho a la supervivencia y al mantenimiento en lo propio.
- La reproducción, la educación de los hijos y otras obligaciones de este tipo.
- Ayudar a una buena convivencia social y a la búsqueda de la verdad.
3.3. Ley Natural y Ley Humana
La ley natural, según Santo Tomás, es fruto de la capacidad humana. En la determinación de los medios para evitar el mal y hacer el bien es donde surgen los problemas. Por eso es necesario que existan leyes humanas. Estas deben tener las siguientes características:
- Tiene que ser un ordenamiento de razón.
- Ha de estar dirigida al bien común.
- Las leyes humanas no obligan sino en la medida en que son justas.
- Debe estar promulgada por la autoridad correspondiente.
- Ha de ser suficientemente promulgada.
Las leyes humanas no lo son por el hecho de ser promulgadas, sino que deben ser aplicaciones de la ley natural.