Niilismo
Actitud vital y filosófica que niega todo valor a la existencia.
- Niilismo como decadencia vital: Toda cultura que cree en la existencia de una realidad absoluta, es una cultura nihilista, pues dirige toda su pasión y esperanza a algo inexistente, despreciando de modo indirecto la única realidad existente, la que nos ofrece los sentidos.
- Niilismo activo: Los valores dominantes son la pura nada, la invención. Propone la destrucción completa de todos los valores vigentes y su sustitución por otros nuevos para la aparición de un nuevo hombre, el superhombre.
- Niilismo pasivo: Consecuencia de la muerte de Dios. La vida tiene sentido porque algo exterior a ella se lo da. No cree en ningún valor, puesto que considera que todo valor es posible solo si Dios existe y Dios no existe.
Moral contranatural
- Dogmatismo moral: Critica a la consideración objetiva de la moral: los valores morales no tienen una existencia objetiva. Los valores los crean las personas, son proyecciones de nuestra subjetividad.
Las leyes morales valen para todos los hombres, si algo es bueno es bueno para todos.
- La moral tradicional es antiviral: Todas las tablas de valores son inventadas, pero hay algunas mejores que otras.
La moral contranatural es propia de los débiles y la moral natural es la de los fuertes.
Toda moral que exija sacrificio y mortificación en esta vida para ganarse otra vida en el más allá, es una moral contranatural.
Dionisiaco
Representa el “espíritu de la tierra” o valores característicos de la vida.
El dios griego Dionisos era el dios de la vida vegetal y del vino. Nietzsche hace una interpretación de este dios, considerando que los griegos representaban una dimensión fundamental de la existencia, que expresaron en la tragedia.
Transmutación de los valores
Momento necesario para el final de la moral tradicional y la aparición del superhombre.
Propone invertir la tabla de valores.
Moral de señores
- Voluntad de jerarquía
- Ama lo que eleva, lo noble
- Quiere la diferencia
- Es la moral del héroe
- Crea los valores
- Ama la muerte de Dios
A la filosofía antigua podemos encontrar varias similitudes, por ejemplo con los sofistas en cuanto a la explicación racional de la naturaleza, algunos como los Gorgias se mostraban escépticos, y otros como Protágoras y como nuestro filósofo, eran relativistas al considerar válidas las distintas verdades sobre lo mismo, al mismo tiempo que defienden su humanismo. Crítica a la metafísica, y comenzamos desde los presocráticos, Nietzsche se opone a éstos, pues no comparte la interpretación griega del orden del mundo. Dice que la metafísica occidental es nihilista, gira en torno a algo inexistente, así como esta corrupta desde Platón y Sócrates. Estos hacen triunfar el uso de la razón y, para Platón surgirá una división entre dos mundos: el mundo Inteligible (verdadero) y el mundo Aparente (sensible), a lo que Nietzsche se opone rotundamente, para él lo verdadero es lo que Platón considera aparente. A esta jerarquización, nuestro autor se opone a la vez que la invierte, siendo Heráclito al único que no critica defendiendo la realidad del devenir.
La moral occidental influenciada por el cristianismo es también objeto de crítica. Nuestro filósofo se opone a la universalidad y objetividad de los valores morales propuestos por Sócrates, Platón, Aristóteles o Kant, y propone un relativismo moral similar al sofista, diciendo que las leyes son convencionales y cambiantes, pero su criterio es la fidelidad a lo vital.
Nietzsche opina que la virtud no se enseña y que el hombre virtuoso nace y no se hace, rechazando el pensamiento de Kant, quien dirá que en esta vida la virtud no acompaña a la felicidad.
En lo referente a la ética, Nietzsche diferencia la moral de los señores y la de los esclavos. La moral de los señores es similar a la ley de la segunda sofística (ley del más fuerte), siendo contraria a la mayoría de los filósofos. La moral de los esclavos se asemeja a la primera sofística, donde se crean las leyes que protegen al más débil. Para él esta moral es la verdaderamente débil, pues son incapaces de sobrellevar el placer y, como tienen miedo de sucumbir a él queda prohibido.
Casi finalizando, la religión es duramente reprochada por Nietzsche, que está de acuerdo con los sofistas que defienden la inexistencia de un Dios. Nietzsche se considera ascético y concibe que después de la vida no hay nada, hecho que va a repercutir en su concepto de “superhombre”, razón por la que rechaza totalmente al cristianismo.
Y terminaré la relación con la política, Nietzsche está de acuerdo con Kant, Hobbes y Rousseau en que la libertad es un valor que se debe fomentar, contradiciendo a los filósofos que apoyan cualquier forma política. Nuestro filósofo apuesta por el anarquismo, rechazando la igualdad marxista, la Constitución republicada de Kant, o la aristocracia de Aristóteles. Como conclusión no debe existir Estado alguno.