1. CRÍTICA DE MARX A LA CONCIENCIA FILOSÓFICA

1.1. Crítica de Marx al idealismo (Hegel)

El ajuste de cuentas que Marx lleva a cabo con la conciencia filosófica tiene como principal interlocutor a Hegel:

1. De una parte, porque el idealismo es la expresión más madura y modélica de la filosofía como interpretación de la realidad.
2. Porque en Hegel tiene lugar la consumación teórica e ideológica del mundo cristiano burgués.

1.1.1. Lo real y lo racional

La realidad es de naturaleza racional, toda la realidad depende del pensamiento y la idea. Todo lo real es racional, es perfecto porque está en consonancia con la razón.

1.1.3. La realidad como espíritu

Lo verdadero es el sujeto como espíritu. La totalidad de lo real es el espíritu y solo lo espiritual es lo real. Tiene dos interpretaciones:

• Derecha: En su interpretación conservadora, Hegel la considera como un sistema racional en la que no hay que cambiar nada.
• Izquierda: Marx considera que hay que transformar la sociedad (praxis). Marx se enfrenta y critica a Hegel. La filosofía para Marx es una forma de ideología.

1.2. La crítica de Marx al materialismo de Feuerbach

El marxismo sostiene una teoría materialista de lo real. El materialismo es una concepción del mundo basada en una interpretación determinada de las relaciones entre el espíritu y la materia. El materialismo de Feuerbach tiene limitaciones y defectos:

• Es un materialismo mecanicista, la naturaleza se explica por medio de causas mecánicas.
• También es incapaz de concebir el mundo como un proceso, como una materia sujeta a desarrollo histórico, por ello el ser humano es interpretado como un objeto sensible.

2. LA ALIENACIÓN Y EL HUMANISMO MARXISTA

2.1. El concepto de ideología

La ideología es un sistema de representaciones dotados de una existencia y de un papel históricos en el seno de una sociedad dada. Es un momento esencial y necesario en la vida humana, expresa la relación del ser humano con su mundo y su existencia social e histórica. Las ideas que reflejan esta relación pueden ser verdaderas o falsas. En este segundo caso, el término ideología significa un conjunto de ideas que dan una imagen o representación falsa de la realidad. El marxismo mantiene tres tesis:

• Lo que piensan los seres humanos es un producto de la sociedad en la que viven.
• La ideología tiene un sentido negativo, está formado por ideas falsas.
• Los contenidos ideológicos de la conciencia no tienen sustantividad propia. Las formas ideológicas de la conciencia tienen como función ocultar una situación de la realidad.

2.2. La alienación y sus formas

2.2.1. El concepto de alienación

Supone:

• Una dualidad de elementos.
• La acción de uno de ellos por la que se pone en relación con otro.
• El modo de entender esa realidad.
• El estado en el que el elemento activo se encuentra respecto al elemento que recibe la acción.

Cuando el elemento sale fuera de sí y entra en relación con algo distinto se conoce como exteriorización. En esta, el elemento se desposee de algo de sí mismo y esto es la enajenación, y esto significa la estructura activa, relacional y productiva del sujeto. La situación en que el resultado de la acción productiva y transformadora del ser humano no le pertenece, no es considerada ni usada como suya, sino que proviene de otro y al sujeto le resulta ajena, esa situación es la alienación.

2.2.2. Las formas de alienación

Es negativa. La alienación fundamental es la económica. Marx lleva a cabo una crítica de la economía política y de la alienación económica en sus obras. Esta crítica se hace con conceptos teóricos como los del valor de uso y de cambio. La alienación económica promueve otras formas de alienación como la social, que habla sobre la división social en clases, y la política, que habla de la división civil y Estado.

2.3. El ser humano y el humanismo marxista

La crítica de Marx al idealismo y al materialismo constituye la naturaleza humana.

2.3.1. El Ser Humano:

Cinco afirmaciones:

1. Es un ser natural humano. Está dotado de fuerzas activas, pero también es un ser pasivo y él mismo es un objeto para cualquier realidad o ser.
2. El trabajo es la esencia del ser humano. El concepto de producción o praxis. La praxis determina todas las expresiones de la vida humana: tiene lugar la apertura del ser humano al mundo y a la realidad; el hombre realiza y desarrolla su ser en la historia; configura la totalidad de la vida social; encuentra su origen y su sentido en el viejo problema de la verdad y conocimiento; se encuentra una solución a los verdaderos problemas y a las pseudocuestiones.
3. El hombre se constituye en la sociedad: Marx reduce el ser individual del hombre a la sociedad.
4. El hombre se constituye en la producción de su vida.
5. Es el conjunto de las relaciones sociales: Marx afirma que la esencia humana es el conjunto de las relaciones sociales por dos aspectos: la naturaleza del hombre funda y permite comprender la crítica de Marx al idealismo y materialismo y su explicación de la alienación con la explicitación de que la alienación del ser humano tiene su raíz en una determinada estructuración económico-social-histórica; junto a la radicalidad del hombre como ser humano natural y sujeto se da su relacionalidad y su carácter de resultado.

2.3.2. El Humanismo Marxista:

Tres significados:

1. El marxismo como humanismo por promover una crítica y una lucha contra la alienación del ser humano, aboga por la libertad, racionalidad y carácter personal del ser humano.
2. Como humanismo en la medida en que niega la existencia de un ser distinto y superior, es ateo, niega la existencia de Dios, afirma la suficiencia, primacía y autonomía del ser humano.
3. Como humanismo al afirmar que el hombre es el principio de la sociedad, el sujeto de la historia y la base explicativa de su concepción teórica del mundo y la historia.

3. MATERIALISMO DIALÉCTICO E HISTORIA

3.1. Materialismo y dialéctica

3.1.2. Concepto marxista de dialéctica

La idea cardinal en esta nueva concepción del mundo es la dialéctica, idea que constituía “el lado revolucionario de la filosofía hegeliana” y que expresa la naturaleza de la realidad como un proceso, como una totalidad dinámica de elementos interrelacionados.

1. En cuanto a las categorías de inmediatez-mediación, el marxismo niega que toda realidad u objeto que se presenta como inmediato suponga ya previamente una mediación. Se aplica especialmente a la naturaleza, es algo originario y por tanto ontológica y ahistóricamente inmediato.
2. La categoría de totalidad no expresa toda la razón o el espíritu sino la totalidad natural-social, totalidad de la sociedad de clases.
3. Esta totalidad encierra la categoría de la negatividad, es decir, el carácter negativo o contradictorio de lo real. Y la negación de la situación contradictoria. Transformación del orden real dado y en la instauración de otro nuevo.
4. Por ello la superación de la contradicción o negatividad no consiste en la aniquilación del objeto natural-material que recibe la actividad transformadora. Para el marxismo la realidad es pues una dialéctica material.

3.2. Materialismo e historia

Así pues, el materialismo de Marx consiste en considerar la realidad como el proceso dialéctico real de producción, un proceso material (y no espiritual), es decir, como trabajo o acción productiva del ser humano en y con la naturaleza. Como consecuencia de este proceso dialéctico entre naturaleza y hombre solo cabe una teoría y una ciencia: el materialismo histórico. La expresión “materialismo histórico” se utiliza para designar la concepción materialista de la historia.

3.2.1. La historia como “proceso real de producción”

Para el marxismo la historia no es “una colección de hechos muertos” como lo es para los empiristas, ni “una acción imaginaria de sujetos imaginarios” según interpretó el idealismo, sino en último término la sucesión de los diferentes modos de producción, el “proceso real de producción”. Los conceptos o categorías fundamentales de la historia como “proceso real de producción” son:

1. Fuerzas productivas: Designan la capacidad de producción o trabajo real de los hombres.
2. Relaciones de producción: Expresan “las relaciones que se establecen entre los propietarios de los medios de producción y los productores directos en un proceso de producción determinado”.
3. Estructura económica o infraestructura: Significa el fundamento sobre el que descansa y que condiciona todo el proceso de producción y también, en consecuencia, la producción ideológica denominada “superestructura”. La estructura económica está construida por las fuerzas productivas y las relaciones de producción.
4. Superestructura: El conjunto de representaciones o ideas que configuran la “conciencia”, así como también las estructuras jurídicas y políticas.
5. Modo de producción: “Se refiere a la totalidad social global, es decir, tanto a la estructura económica como a los otros niveles de la totalidad social: jurídico-político e ideológico”.
6. Formación social: La totalidad de los conceptos o las categorías anteriores vienen a construir en su interna relación un complejo o todo social. La formación social designa pues “una totalidad social concreta históricamente determinada”. La formación social está así integrada por una estructura económica, una estructura jurídico-política y una estructura ideológica.
7. Revolución social: Significa la destrucción y la transformación de unas determinadas relaciones de producción con la consiguiente subversión de la superestructura”.

3.2.2. Tres tesis sobre la concepción materialista de la historia

Tres tesis:

1. El factor determinante de la historia es la relación entre las fuerzas productivas y las relaciones de producción. La historia consiste, en último término, en el proceso real de la producción material de la vida.
2. En la historia se da una peculiar relación entre la infraestructura y la superestructura. El marxismo sostiene una relación dialéctica entre la infraestructura y la superestructura, si bien el fundamento económico constituye en última instancia el principio de explicación.
3. El fin al que se dirige la historia es la desaparición de las clases y la instauración del comunismo. La sociedad comunista sin clases, “fin último” al que al parecer tiende la historia, acabará con las alienaciones y permitirá la realización total del hombre.