Relación con la actualidad
Desaparición de las economías comunistas y las crisis económicas
Los estados que han adoptado una economía inspirada en el marxismo han caído en una profunda crisis que les ha llevado a abandonar ese modelo. Sólo hay restos en países como Cuba o China. Esto nos hace dudar si la propuesta marxista de una economía que sustituya la competencia por la cooperación es un modelo con algunas posibilidades de funcionar. Las respuestas de los gobiernos a las crisis económicas asumen la necesidad de controlar e intervenir en el mercado mediante los rescates.
Los antagonismos entre fuerzas productivas y relaciones de producción
En el siglo XXI se confirma este fenómeno descrito en el “Prefacio”: hay ejemplos como las descargas de música gratuitas, las copias de CD y DVD, etc. Las nuevas fuerzas no hacen sino exprimir el sistema aplicando su lógica. Los trabajadores están expuestos a la explotación de las empresas. Esta situación va más allá de los límites establecidos por las leyes.
Contradicciones del mercado: planificación y redistribución
- La PAC cumple con dos funciones: asignar a cada país miembro una cuota de producción agraria y distribuir subvenciones a los agricultores.
- La OMC organiza la cantidad de productos que unos países pueden exportar a otros. Estas medidas rompen con la lógica del mercado para evitar las consecuencias detectadas por Marx. Los economistas clásicos que Marx estudió y criticó defendían que el mejor modo de crear riqueza para todos es que cada uno se esfuerce al máximo por crear riqueza para sí. Las nuevas fuerzas productivas representadas por las empresas orientales son más competitivas que las europeas o estadounidenses, debido a que no reconocen a sus empleados salarios equiparables.
La guerra como solución
Nuestro autor criticó que el modelo capitalista propone para sus problemas de superproducción: la guerra. La guerra permite dar salida a los excedentes, humanos y materiales, y continuar con la producción.
Contexto filosófico
Algunas de las influencias en el pensamiento marxista fueron, por ejemplo: el idealismo hegeliano, aunque el materialismo marxista se opone al enfoque idealista, Marx incorpora con su interpretación propia dos elementos hegelianos:
- El concepto de alienación
- La concepción dialéctica de la realidad y su historia: a toda realidad se le opone otra urgida de la propia tesis y que al oponerse origina una nueva realidad.
El idealismo hegeliano derivó en una crítica con el propio Hegel, la izquierda hegeliana. Feuerbach fue el representante de esta corriente más influyente en Marx. De este, Marx aceptará:
- Que el ser humano no se define por ser espíritu, sino por sus condiciones materiales.
- También asumirá que Dios es una invención en la cual los humanos proyectan sus cualidades positivas elevándolo al grado supremo.
Pero Marx, frente a Feuerbach, dirá que el ser humano no tiene naturaleza, sino historia. En París, Marx conoció a los seguidores de Saint-Simon, las ideas de Fourier y las posiciones de Owen.
Marx y Engels calificaron estas propuestas como “las primeras auténticamente socialistas”, pero critican que no identifiquen dentro del sistema industrial las condiciones que permitirán la liberación del proletariado y que las sustituyan por una sociedad idílica por ellos inventada. Así calificaron estos proyectos como socialismo utópico. También conoció el anarquismo de Proudhon y Bakunin. Este movimiento era más sindicalista que el socialista y chocó con Marx en la Primera Internacional, organización que expulsó a Bakunin por creer que la revolución no vendría de los obreros sino del campesinado y por proponer la supresión del estado. Marx decía que el estado solo se eliminaría una vez alcanzada la sociedad comunista. En París Marx entró en contacto con la economía política, donde desde entonces centraría sus esfuerzos. Vio en esto el mejor instrumento para explicar al ser humano, o sea, para explicar las condiciones materiales en que vive. Marx asume el aparato teórico de la economía política pero critica el análisis que Adam Smith y David Ricardo proponían del capitalismo.
Contexto histórico-cultural
Marx vivió paralelamente a la consolidación de la Revolución Industrial. Marx asistió a revoluciones liberales de la primera mitad del siglo XIX. Con estos movimientos, la burguesía pudo ampliar su poder político. En lo que se refiere a la economía, el liberalismo burgués propone que se abandone la economía de la oferta y la demanda y su única función es garantizar la propiedad privada. Esta sociedad burguesa con un sistema económico liberal y con un modo de producción industrial es la sociedad capitalista. Marx dijo que este nuevo sistema, como afianzaba solo los derechos políticos y el funcionamiento del mercado, consolidó el dominio burgués. Con la industrialización hacía falta materias primas abundantes y nuevos mercados. Para obtenerlos, la burguesía presionará a los estados para que desarrollen una política colonial que beneficie sus industrias. Para Marx, la colonización es la internacionalización de la relación de explotación entre propietarios (metrópolis) y asalariados (colonias) por lo que proyectó también ese fenómeno en la inmigración.
Varios factores, la explotación colonial, que no se podían hacer conquistas sociales… llevaron a Marx a pensar que los trabajadores tenían que generar sus propios medios de lucha y le llevaron a cuestionar el sistema político-económico. Marx buscó las causas de esta situación y buscaba otra alternativa. Liberalismo y nacionalismo se nutrieron de la exaltación de la libertad encarnada por el Romanticismo, movimiento que alcanza sus expresiones más acabadas en literatura (Goethe), pintura (Géricault) y música (Chopin). El Realismo (Stendhal en literatura y Courbet en pintura) y después su evolución al Naturalismo (Émile Zola) reflejaron la situación que acompañaba a gran parte de la sociedad.
Los Manuscritos económicos y filosóficos de 1844
Los Manuscritos se centran en la alienación del trabajador en la sociedad capitalista. Es en el trabajo donde el hombre debería realizarse como hombre. Pero en las condiciones del trabajo asalariado sucede exactamente todo lo contrario: lo que se produce es la alienación del hombre:
- Con respecto al producto de su trabajo: éste es la objetivación de su trabajo como un ser extraño, como un poder independiente. Al contrario, cuantos más objetos produce el trabajador, tantos menos alcanza a poseer, y tanto más sujeto queda a la dominación de su producto, es decir, del capital.
- Con respecto a su propia actividad: para el trabajador se muestra la exterioridad del trabajo en que éste no es suyo, sino de otro, en que no le pertenece, en que cuando está en él no se pertenece a sí mismo, sino a otro por lo cual el trabajo aliena al trabajador respecto a sí mismo.
- Con respecto a la naturaleza: ésta, en lugar de convertirse en el cuerpo inorgánico del hombre, aparece como algo ajeno al trabajador, como propiedad de otro.
- Con respecto a los otros hombres: el hombre, a diferencia de los animales, es capaz de trabajar no sólo para sí mismo y sus propias necesidades, sino también para los demás y para la transformación del mundo en favor de la especie humana. Pero en el trabajo alienado se corta toda relación con la Naturaleza y con la humanidad; cada uno trabaja por sí mismo, y el otro aparece como el ser extraño al que pertenecen el trabajo y el producto del trabajo.
Marx concluye que la propiedad privada es la consecuencia del trabajo alienado o también la relación de la alienación. Por eso, Marx considera que sólo el comunismo –entendido como supresión de la propiedad privada, es decir del capital– permitirá la eliminación de todas las alienaciones y la humanización del hombre. El sentido del tener debe desaparecer para que el hombre pueda liberar todos sus demás sentidos físicos y espirituales, y se pueda relacionar con las cosas por amor a las cosas, y no por tenerlas.
Idealismo de Hegel
La realidad (ontológica)
Hegel afirma que todo lo racional es real y todo lo que es real es racional, la única realidad es el espíritu. La naturaleza y el hombre son sus manifestaciones en su proceso de autoconocimiento: El espíritu no puede conocerse en sí mismo si no que tiene que objetivarse y conocerse a través de ese objeto que surge de él. Del proceso del exteriorización del espíritu surge la naturaleza que es así espíritu alterado (hecho de otros) por eso la naturaleza tiene que ser necesariamente racional ya que es expresión de una razón. El conocimiento que no reconozca esta racionalidad no será verdadero.
Marx se opone a la tradición idealista-racionalista. Lo único real es lo material. La existencia es posible porque existen condiciones materiales que la permiten. Todo (lo físico, lo biológico, psíquico) es una manifestación del carácter dialéctico, procesual e histórico de la materia. La naturaleza no es principalmente objeto de conocimiento sino fuente de recursos para el ser humano.
El conocimiento
Para Hegel, el conocimiento verdadero es el reconocimiento de la racionalidad de la realidad; es el autoconocimiento que el Espíritu solo consigue conociendo sus manifestaciones. Cuando la razón reconoce que “lo que debe ser” llega a la comprensión completa de lo real.
Para Marx no existe una realidad, depende de las condiciones materiales en las que vive. Las entidades inteligibles de la filosofía idealista y racionalista no son reales; son elementos ideológicos que proponen una realidad ilusoria.
El ser humano
El marxismo defiende que el ser humano se define por transformar la naturaleza para obtener lo que necesita. Las condiciones materiales que lleva a cabo determinan su conciencia. Para Hegel el hombre se reconoce como espíritu finito cuando descubre la tensión entre el ser humano y el ideal que proyecta en su interior. Esto lleva a cambiar la realidad para hacerla coincidir con su ideal.
La ética
Según Hegel, la moralidad es una manifestación del espíritu humano. El proyecto de moral del hombre es un intento por cumplir con el ideal propuesto.
Para Marx, la moral forma parte de la ideología. Los valores morales justifican las condiciones materiales de la existencia.
La política
Para Hegel, la familia, sociedad civil y las formas del estado son consecuencia del proyecto de espíritu. El estado nace para ordenar y planificar y evitar los desastres. Es un padre protector.
Para Marx, culmina la superestructura jurídico-política de toda la sociedad dominada por relaciones sociales de explotación (es un comité para administrar asuntos comunes de la burguesía), no equilibra los desajustes sociales, los refuerza.