Introducción a la Filosofía de Nietzsche
Para dar comienzo a este análisis, examinaremos las ideas principales que aparecen en el texto proporcionado.
Crítica a la Razón y los Filósofos Racionalistas
«Ahora bien, todos ellos creen… en lo que es»
Nietzsche arremete contra los filósofos racionalistas porque son los causantes de que la razón sea considerada el único medio para conocer la realidad, menospreciando el valor de los sentidos.
«Tiene que haber una ilusión… esconde el engañador»
Esta concepción racionalista, tan arraigada en la historia de la filosofía, comete el error de crear conceptos metafísicos como Dios, Alma y Mundo.
«Decir no a todo lo… de la humanidad»
Por último, Nietzsche identifica, en gran medida, a aquellos que menosprecian los sentidos como los defensores de la religión judeo-cristiana. Nietzsche utiliza un lenguaje para asociar en un solo concepto el monoteísmo de esta religión y la monotonía y el antivitalismo tan característicos de los filósofos racionalistas y moralistas. Unos y otros defienden valores «descendentes», propios de una moral contra natural, que enfermizamente instaura tanto la religión judeo-cristiana como la tradición filosófica que nace con Sócrates y Platón.
Conceptos Clave en la Filosofía de Nietzsche
A continuación, definiremos una serie de términos relacionados con la filosofía de este autor:
Dionisíaco y Apolíneo
- Dionisíaco: Es, junto con Apolíneo, uno de los conceptos mediante los que Nietzsche expresa las dos maneras que tiene el individuo de interpretar el mundo. Estos términos provienen de dos dioses griegos.
- Apolo: Dios de la belleza y la luz, representa la racionalidad, la armonía, el equilibrio y la mesura.
- Dionisio: Dios del vino y de la embriaguez, representa la oscuridad, la pasión, el desenfreno y la irracionalidad.
Nietzsche considera que en la antigua Grecia se combinaban ambas concepciones y que el gran error de la civilización occidental fue cercenar la parte dionisíaca. Nietzsche reivindica la recuperación de la parte instintiva e irracional (vitalista) del ser humano frente a los excesos del racionalismo.
Moral Contra Natural
Llamada por Nietzsche «moral de esclavos» o «moral tradicional«. Se refiere a la moral que ha imperado desde Sócrates y Platón en adelante, que se funda en valores «descendentes», pues van en contra de la vida. Dicha moral ha cercenado las manifestaciones «ascendentes» de la vida como son el valor, la gallardía, la creatividad, la voluntad de poder, etc. Así, instintos primordiales de la vida, como la sexualidad, el orgullo y la fortaleza fueron considerados valores negativos. Esto se explica porque individuos débiles, cobardes y resignados hicieron creer que sus valores eran «ascendentes» cuando realmente eran fruto del resentimiento. Es una moral contra natural porque se opone a la biología y a la naturaleza que son la base de la «moral de señores«.
Inocencia del Devenir
Con esta expresión, Nietzsche pretende hacer una defensa a ultranza del cambio y del movimiento frente a los intentos racionalistas y metafísicos de darle una connotación absolutamente negativa. Nietzsche habla de inocencia, no de culpabilidad. El Devenir, tan denostado por los racionalistas porque lo consideran fuera del alcance de la ciencia, es, según Nietzsche, intrínseco al mundo, a la vida. El cambio y la apariencia son lo único verdadero y cualquier intento de buscarle, como contraposición, un mundo superior e inmutable es disparatado.
Comparación con Otros Autores
Nietzsche vs. Kant (Política)
El ideal político para Kant era el republicanismo dado que representa al pueblo, así como la separación de los poderes del estado. Kant desecha los despotismos y cualquier otro sistema en el que el gobierno posea todos los poderes. Nietzsche descarta rotundamente este sistema, ya que él estaba en contra de la igualdad y del socialismo, pues decía que el «superhombre» no tiene miedo a las diferencias y que así se reduciría todo lo que es original y extraordinario al corriente y mediocre. Por ello, separa el concepto de igualdad del de justicia, pues veía la igualdad predicada por el cristianismo como algo repugnante. Nietzsche no defendió ninguna postura política concreta, si bien criticó muchas, pero de su filosofía salieron argumentos para defender desde el totalitarismo hasta el anarquismo.
Nietzsche vs. Platón (Concepción del Hombre)
La concepción del hombre en Nietzsche es opuesta a la filosofía tradicional. Platón identifica al hombre con el alma. El alma es una parte fundamental para el hombre, pero también es importante el cuerpo. El cuerpo no es más que una cárcel. El alma pertenece al mundo inteligible y su estancia en este mundo es accidental y transitoria. El cuerpo es, además, el centro de todos los males: nos ata, nos confunde con sus sentidos, nos complica el acceso al mundo inteligible por sus pasiones. El hombre debe liberarse, purificarse de su influjo negativo. Nietzsche, muy al contrario, valora el cuerpo: sus sentidos y sus instintos naturales. Los sentidos nos mostrarán la realidad del Devenir; frente al intelectualismo de Platón, afirma que los instintos deben guiar nuestros actos. Para Nietzsche, el único comportamiento con sentido es la fidelidad a la tierra, al cuerpo y a los instintos.
Nietzsche vs. Marx (Crítica a la Religión)
Estos filósofos comparten la dura crítica que hacen a la religión, pues ambos la culpabilizan de ser la causante de limitar las posibilidades e impedir el desarrollo del ser humano, pues engaña a sus seguidores llevándolos a creer en un mundo ilusorio. Sin embargo, Nietzsche lo hace desde un punto de vista más personal al culparla de imponer una moral de esclavos en la que se premia la mediocridad, la cual impide que el ser humano se realice; y Marx, desde un punto de vista más social, al creerla la causante de que la sociedad se resigne ante situaciones intolerables y acepten como normal multitud de injusticias.