Contexto Histórico y Filosófico
Siglos XV – XVIII
Este periodo, que abarca desde finales del siglo XV hasta el siglo XVIII, presenció el surgimiento de importantes movimientos como el Renacimiento, caracterizado por el resurgir de las culturas griegas y romanas, y el heliocentrismo, que desplazó al geocentrismo. El Renacimiento también vio el desarrollo del humanismo, que promovía la educación a través de los textos clásicos, y la revalorización de la naturaleza como fuente de belleza y placer.
Otro movimiento relevante fue el Barroco, con su énfasis en la agitación de las formas. También se destacaron el neoclasicismo (retorno a los valores de la antigüedad clásica), el antropocentrismo (el hombre como centro del universo) y el humanismo (preocupación por la humanidad). El mecenazgo, que financiaba las obras artísticas, también jugó un papel importante en este periodo.
En el ámbito filosófico, resurgieron corrientes de la antigüedad como el platonismo, el aristotelismo, el estoicismo, el epicureísmo y el escepticismo.
René Descartes (siglos XVI – XVII)
René Descartes, nacido a finales del siglo XVI en Francia, provenía de una familia noble y estudió en el colegio jesuita de La Flèche. Se licenció en derecho y viajó por Europa, participando en la Guerra de los Treinta Años. Durante este periodo, comenzó a escribir su obra fundamental, el Discurso del método, y murió a los 50 años. Entre sus obras más importantes se encuentran las Meditaciones metafísicas. El Discurso del método se publicó junto con otros tres libros: Dióptrica, Meteoros y Geometría. En esta obra, Descartes compara a varios filósofos con arquitectos, y el resultado es una ciudad caótica y desordenada. Aborda temas como la duda metódica, las reglas del método, el concepto de sustancia y la moral provisional. Su método matemático se basa en la geometría de Euclides.
El racionalismo, iniciado por Descartes en la Europa continental, se extendió con Spinoza, Leibniz y Malebranche. Esta corriente filosófica otorga primacía a la razón por encima de todo y defiende la existencia de ideas innatas.
Cambios Religiosos y Revolución Científica
En el ámbito religioso, el cristianismo se dividió en diversas ramas, como los anglicanos y los luteranos. El calvinismo se introdujo en Ginebra y Suiza, mientras que en Roma se produjo la Contrarreforma. La Orden de los Jesuitas se encargó de difundir las ideas del Concilio de Trento y de combatir las ideas de la Reforma.
La revolución científica también marcó este periodo. Se desarrolló el método hipotético-deductivo y se consolidó la idea del heliocentrismo. La astronomía experimentó grandes avances con Copérnico, Kepler y Galileo, quienes afirmaron que la Tierra es redonda y se mueve en órbitas elípticas. Isaac Newton formuló la teoría de la gravedad.
Ideas Clave del Discurso del Método
En la segunda parte del Discurso del método, Descartes relata cómo, tras aplicar la duda metódica, llegó a una verdad indubitable: el cogito ergo sum («pienso, luego existo»).
La razón defiende la existencia de ideas innatas. El Discurso del método es una afirmación del alma, que es independiente del cuerpo.
- Pienso, luego existo es la verdad evidente que surge del simple hecho de dudar.
- No se puede dudar de la existencia del yo, pues la duda misma refuerza la evidencia de su existencia.
- Si se deja de pensar, no se puede certificar la existencia del «yo».
- El yo existe como una sustancia cuya esencia radica en el pensamiento y es independiente de cualquier otro elemento natural.
- El alma, como sustancia pensante o «yo», es distinta del cuerpo, es más fácil de conocer que el cuerpo y, aunque el cuerpo no existiera, el alma no dejaría de ser todo lo que es.
La Duda Metódica
La duda metódica utiliza la razón para alcanzar la verdad a través del conocimiento. Sin embargo, podemos equivocarnos porque los sentidos nos pueden engañar. Descartes representa la filosofía como un árbol: la metafísica es la raíz, la física es el tronco, la medicina y la moral son las ramas, y las matemáticas son la savia. El texto está sometido a la razón. Es racionalista y epistemológico, ligado a la ciencia.
Identificación y Análisis del Texto
La Duda Metódica
Nos encontramos ante un texto que expone la duda metódica como un proceso para llegar a la verdad a través del conocimiento. Descartes no es un escéptico, ya que del acto de dudar surge la primera verdad evidente: pienso, luego existo. Montesquieu, en cambio, era un escéptico. Existen tres tipos de duda:
- La duda escéptica, que es el estado al que se llega tras el rechazo de todos los argumentos que pretenden demostrar la verdad de algo.
- La duda existencial.
- La duda metódica, un proceso para llegar a una verdad evidente.
Fases de la Duda Metódica
Fase 1: Los sentidos pueden engañarnos, no podemos confiar en ellos. Las leyes de la mente son la claridad y la distinción. Una idea es verdadera si se ajusta a estas leyes. Las ideas se dividen en:
- Innatas: proceden del pensamiento.
- Adventicias: vienen de la experiencia.
- Ficticias: las fabrica nuestra mente a partir de las anteriores.
Reglas del Método
- Evidencia: no considerar nada como verdad, aceptar solo lo que esté «claro y distinto».
- Análisis: dividir un problema complejo en otros más sencillos.
- Síntesis: ir desde las ideas más simples a las más complejas mediante un orden deductivo.
- Enumeración: repasar lo anterior para comprobar que no se ha omitido nada.
Clases de Sustancias
- Infinita (Dios).
- Finita (seres creados).
- Pensante (Res Cogitans).
- Extensa (Res Extensa).
El cogito es la mente pensante, la segunda sustancia se refiere a Dios y la tercera al cuerpo.
Método Deductivo
Descartes utiliza el método deductivo. El mundo está compuesto por materia extensa que no tiene movimiento local. El ser humano está formado por dos sustancias: cuerpo y alma. El alma es la sustancia pensante y el cuerpo es la sustancia extensa. La intuición capta la verdad total, tiene claridad y distinción.