Contexto Histórico

Los últimos años del siglo XIX se vivieron con optimismo, pero las primeras décadas del siglo XX sufrieron desastres como la Primera Guerra Mundial. La Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría pusieron al descubierto una crisis enorme. Esta situación contrastaba con el imparable avance de la ciencia, beneficiada por las guerras. El siglo XX nace con la convicción de que la ciencia va a resolver los problemas. Aparece un movimiento filosófico que hizo de la ciencia su principal centro de atención: el movimiento analítico.

Contexto Filosófico: Movimiento Analítico

Rasgos:

• Tendencia empirista (Hume)
• Atención al estudio del lenguaje
• La convicción de que el análisis del lenguaje constituye la tarea de la filosofía

Se ha desarrollado a través de tres corrientes filosóficas:

1. Atomismo Lógico: Russell

2. El Neopositivismo Lógico: Círculo de Viena

Sus líneas teóricas son:

• La ciencia es un saber seguro, compuesto de proposiciones con sentido (al contrario que la metafísica) y significado cuando se atienen al principio de verificación.
• El principio de verificación se aplica en las proposiciones de la lógica y la matemáticas porque son tautológicas, porque su verdad es concluyente por la experiencia.

Las conclusiones:

• La metafísica no contiene proposiciones verificables.
• La filosofía es una actividad que aclara si una proposición no es verificable y hay que olvidarla, o si es un problema con sentido y hay que colocarlo con la ciencia correspondiente.
• La ética y sus proposiciones son falsas y tienen valor emotivo o estético. Irracionalismo ético, al no aceptar la intervención de la razón.

3. La Filosofía Analítica: Wittgenstein y Ryle

Difícil de exponer en su conjunto porque no presenta una uniformidad y su producción se halla en artículos dispersos. En las «Investigaciones Filosóficas», Wittgenstein rompe con la tesis que antes apoyaba del atomismo lógico.

La nueva concepción del lenguaje:

• Abandona la tesis del lenguaje-retrato de la realidad. También la de que los hechos complejos constan de elementos simples. El concepto simple es relativo o determinados contextos.
• Por último, abandona la tesis de que el significado de un término es aquello a lo que se refiere, porque si el significado fuera la realidad, las propiedades de esa realidad deberían serlo del significado de ese término. Cuando el señor N. W. muere, decimos que ha muerto el portador del nombre pero no desaparece el nombre.
• La pluralidad de usos lingüísticos: niega el lenguaje como descripción de la realidad. El lenguaje se usa para muchas cosas.

La función de la filosofía:

La tarea de la filosofía ya no es el descubrimiento de la forma lógica del lenguaje, porque no hay tal forma lógica. Hay que aceptar que los usos lingüísticos funcionan, no hay que corregir las sentencias sino entenderlas. Los problemas filosóficos surgen al confundir unos usos con otros. La tarea de la filosofía consiste en disolver los problemas filosóficos comprendiendo los usos lingüísticos; al comprender esos malos usos, los problemas filosóficos desaparecen.

El Valor de la Filosofía

Se pregunta Russell en esta parte del texto cuáles son los valores de la filosofía, y procede a explicarlos. Hay quienes opinan que la filosofía es inútil y frívola, y dudan que tenga algún uso. Las ciencias son útiles, pero la filosofía tiene un primer valor: su efecto sobre la vida de quien la estudia. Generalmente, el hombre vive aferrado a todo lo material, pero si busca algún beneficio, podrá obtenerlo gracias a la filosofía, alimentando a su espíritu. El segundo valor de la filosofía debe encontrarse exclusivamente entre los bienes del espíritu. La filosofía aspira primordialmente al conocimiento (tercer valor), pero a aquel conocimiento que nos da la unidad y el sistema del cuerpo de las ciencias y aquel que resulta del examen crítico del fundamento de nuestras convicciones o prejuicios y creencias; así, aquellos problemas que no consienten una respuesta precisa, se han metido en el campo de la filosofía, como se observa en la metáfora del árbol de la ciencia. Las preguntas que se plantea la filosofía, no tienen una respuesta única verdadera, lo que nos hace conscientes de su importancia (cuarto valor). El valor de la filosofía debe ser buscado en su real incertidumbre: el hombre es prisionero de sus prejuicios sin la cooperación de su razón, la filosofía nos sugiere posibilidades, amplía nuestros pensamientos y nos libera de la costumbre, rechaza el dogmatismo y guarda nuestro sentido de la admiración. Introduce la crítica y la incertidumbre para hacernos pensar, hemos de retocar nuestra vida con un pequeño barniz filosófico.

La Contemplación

Se nos da un nuevo valor, el de la liberación de los intereses mezquinos y personales. El yo tiene intereses privados, que nos ofrecen un mundo pequeño que no conoce la paz, sino la guerra, y para tener una vida grande y libre, debemos escapar mediante la contemplación filosófica, que contempla el todo de un modo imparcial. El egoísmo usa el mundo como medio para sus fines, el yo pone límites a la grandeza de sus propios bienes. Partiendo del no-yo ensanchamos los límites del yo, el espíritu que lo contempla participa un poco del infinito. El conocimiento es una forma de la unidad del yo con el no-yo, considera el hombre como la medida de todas las cosas. Esta opinión priva a la contemplación filosófica de aquello que le da valor, puesto que encadena la contemplación al yo. El conocimiento es una serie de prejuicios que tejen un velo entre nosotros y el mundo exterior. La verdadera contemplación filosófica se satisface mediante la ampliación del no-yo. El intelecto libre aprecia más el conocimiento abstracto y universal. La filosofía ayuda a contemplar el yo unido al mundo, al todo; este es otro de sus valores. Saca al hombre de sus intereses individuales, le hace libre y es capaz de unirle al universo en el pensar (verdad), en el obrar (justicia) y en el sentir (amor).