Aristóteles: Un Legado Filosófico

Crítica a la Teoría de las Ideas

Aristóteles se ocupa extensamente de la crítica a la teoría de las Ideas en su obra fundamental, *Metafísica* o *Filosofía Primera*. La teoría de las Ideas continúa el intento de Sócrates de determinar y definir la esencia de las cosas. Aristóteles consideraba que Sócrates no otorgaba una existencia separada a las definiciones, sino que fue Platón quien lo hizo. El Estagirita critica este carácter separado de las esencias: él admite que hay esencias, pero éstas se encuentran en las cosas. Para marcar sus diferencias con Platón, ya no llamará a la esencia «Idea», sino **forma** y afirmará que siempre aparece junto a una **materia**. Esta teoría se denomina **hilemorfismo**. Aristóteles continúa siendo en cierto sentido platónico: existen las esencias, pero no existen separadas de las cosas mismas. Aristóteles permanece fiel a lo fundamental de la herencia platónica y socrática: la ciencia versa sobre lo general y universal. El método científico que desarrolla Aristóteles se fundamenta en la **inducción** y la **deducción**.

Familia, Aldea y Polis

Aristóteles distingue tres ámbitos de relación entre los individuos, son tres formas de vida en común:

• La **familia** es una forma de relación entre distintos miembros en la que cada uno cumple una función. El núcleo familiar permite al ciudadano ser autárquico, es decir, autónomo.
• La **aldea** está formada por la unión de varias familias.
• La **polis** o ciudad es la comunidad social por excelencia. La familia y la aldea hacen posible vivir; sin embargo, la polis permite al ciudadano vivir bien.

La **constitución** es la ley fundamental de una polis, en la que se establece la organización de la ciudad. Aristóteles desarrolla una concepción teleológica del Estado: su fin es asegurar la vida de los ciudadanos, para que puedan vivir bien.

Materia y Forma: Hilemorfismo

La contemplación del mundo nos presenta un hecho innegable: todas las cosas nacen, se desarrollan y mueren. Para explicar el problema del cambio, Aristóteles sostiene que las sustancias son un compuesto de **materia** y **forma**. Aristóteles las definió de la siguiente manera:

• La **forma** es la esencia, es decir, lo que hace que una sustancia sea tal sustancia.
• La **materia** es el sustrato de la forma, el material del que está hecho.

Según Aristóteles, toda sustancia es un compuesto inseparable de materia y forma: la forma no puede existir sino en la materia y la materia sin tener una determinada forma. La forma es la esencia y, por tanto, la naturaleza de cada cosa es lo que hace que una cosa sea lo que es.

Antropología: Hilemorfismo

La antropología tiene como objeto el estudio del ser humano. La antropología aristotélica se denomina **hilemorfismo**. Los seres vivos son una fusión de materia y forma. En los seres vivos la forma se identifica con el **alma**, que es un principio vital. El alma no se encuentra accidentalmente en el cuerpo ni es una realidad separada de él, sino que, unida a él, forma una unidad sustancial. Las funciones y capacidades de los seres vivos pueden ordenarse de forma jerárquica:

• Capacidad para alimentarse y reproducirse.
• Capacidad de movimiento, percepción y deseo, presentes en los animales y el hombre.
• Capacidad de pensar. Es la capacidad más elevada y es propia exclusivamente del ser humano.

Ética

El término **ética** significa etimológicamente «carácter» y es, según Aristóteles, una ciencia práctica que estudia las acciones humanas. Toda conducta humana se realiza para la consecución de algo. Las acciones humanas tienen un carácter intencional o teleológico. Como el propio Aristóteles observa, los bienes o fines perseguidos en la acción son múltiples y distintos en cada caso. Ante esto, Aristóteles se pregunta si existe un fin último al cual se orientan todos los demás. Este fin último es la **felicidad**. Para Aristóteles la actividad más propia y natural del hombre, aquella que conllevaría el ideal de felicidad perfecta, es la actividad intelectual. La forma más perfecta de felicidad será, por tanto, la contemplación permanente de la verdad. Pero Aristóteles sabe que una vida dedicada a la contemplación solamente sería posible si el hombre no tuviera necesidades corporales, problemas económicos…

Las Virtudes Éticas o de Carácter

A la deliberación le sigue la elección y es necesario estar dispuestos a elegir lo correcto y mantenerse en la elección. Esto depende, según Aristóteles, del carácter de cada persona. Así, Aristóteles define la **virtud ética** o del carácter como «el hábito de elegir consistentemente en un término medio relativo a nosotros». La elección virtuosa se sitúa siempre en un término medio entre dos extremos reprobables, sin caer en el exceso ni en el defecto. No hay un término medio absoluto, el término medio es relativo a nosotros y dependiente de cada situación. De este modo la regla que determina y define la acción virtuosa, la mejor y la preferible, es aquella que en cada caso fijaría el hombre prudente.