Vida de Aristóteles
Aristóteles fue un filósofo macedonio del siglo IV a.C. nacido en Estagira. Con 17 años se trasladó a Atenas e ingresó en la Academia, donde fue discípulo de Platón, aunque nunca estuvo de acuerdo con sus doctrinas y enseñanzas. A la muerte de su maestro, se fue a Assos, donde se casó con la sobrina de un gobernador.
Dado que su padre, médico de oficio, tenía relación con la familia real de Macedonia, en el año 345 a.C., Aristóteles empezó a ejercer como preceptor del hijo del rey Filipo, Alejandro Magno, para retornar diez años después a Atenas y fundar el Liceo. Allí escribió gran parte de sus obras, aunque, a día de hoy, apenas se conservan unas pocas, casi todas ellas esotéricas, es decir, escritas para alumnos ya iniciados en la filosofía, pues las exotéricas se perdieron con el paso del tiempo. Así pues, encontramos un estilo muy diferente en la forma de escribir entre Platón y Aristóteles debido a que los destinatarios de dichas obras eran polos opuestos. Las obras aristotélicas fueron recopiladas y publicadas por Andrónico de Rodas, agrupándolas en:
- Tratados lógicos: Categorías, Sobre la Interpretación, Analíticos.
- Tratados físicos: Física, Sobre el cielo, Sobre el alma.
- Metafísica: Filosofía Primera
- Tratados de ética: Ética a Eudemo, Ética a Nicómaco, Gran Moral
- Tratados de política: Política
- Estética: Retórica, Poética
Aristóteles murió alejado de Atenas, ya que, tras la muerte de Alejandro Magno, fue acusado por la ciudad de impiedad.
Contexto Histórico y Cultural
El siglo V a.C. en Atenas había sido de gran esplendor, pero después de la derrota contra Esparta en las Guerras del Peloponeso, la polis ateniense se vio bajo el gobierno enemigo de los “Treinta Tiranos”. Atenas vivía una etapa de crisis, tras el fracaso de la restauración de la democracia y la decadencia de su forma de organización política (polis). El rey Filipo de Macedonia iría conquistando toda Grecia y nombraría a Aristóteles tutor de su hijo Alejandro, quien sería el gran conquistador, llegando hasta la India. Pero con su muerte, su Imperio se fraccionaría y Aristóteles debería huir de Atenas.
Esta época turbulenta también se ve reflejada en la cultura. Así, se produce un cambio desde el arte clásico, que reflejaba orden, serenidad y racionalidad, hasta llegar al helenismo, que expresaba todo lo contrario: desorden, movimientos violentos y sufrimiento humano. También se introducirán elementos orientales tras las conquistas. A su vez, los héroes se van humanizando y aparece la figura de la retórica con Demóstenes.
Contexto Filosófico
En cuanto a la filosofía, la pregunta acerca del Arjé, propia del periodo cosmológico, dará paso al periodo antropológico, en el cual los Sofistas y Sócrates intentarán responder la pregunta sobre la realidad humana. Finalmente, Platón será el encargado de unir la pregunta cosmológica con la antropológica, dando lugar a un sistema filosófico completo y fundando la Academia, en la que estudia Aristóteles. Posteriormente, se separa de las ideas platónicas y funda su propia escuela, el Liceo, con enfoques distintos a los de Platón. Finalmente, surge la aparición de nuevas escuelas helenistas.
Diferencias entre la Filosofía de Aristóteles y Platón
Como ya hemos dicho, Aristóteles, a pesar de ser discípulo de Platón, mostró un rechazo hacia la Teoría de las Ideas, y su filosofía es opuesta a la de su maestro. Pese a sus diferencias, entre ambos hay una idea común, y es que Aristóteles también consideraba que hay un elemento común en todos los elementos de una misma clase, es decir, el universal, la esencia, aunque no comparte con Platón que su existencia sea independiente de las cosas, sino que está en ellas.
A Aristóteles le resultaba imposible comprender que la esencia que hace que la sustancia sea lo que es no esté implícita en ella. Así, la duplicación del mundo platónico es innecesaria, y las relaciones entre ambos mundos, simples metáforas. Tampoco puede explicar Platón la génesis del mundo sensible, ya que él mismo comete contradicciones a la hora de explicarlo. Y así llegamos al problema del cambio, para cuya explicación había surgido la Teoría de las Ideas y que, sin embargo, no aclara la situación, ya que, si las Ideas son inmutables e inmóviles y las cosas son una copia de las Ideas, es imposible que los objetos sensibles cambien.
En realidad, las miradas de Platón y de Aristóteles acerca de la naturaleza son muy diferentes y, por lo tanto, su interpretación también. Mientras que Platón siente nostalgia del Mundo de las Ideas y, por lo tanto, censura y degrada el mundo sensible, Aristóteles se centra en este mundo y en su naturaleza, que es el desarrollo de las capacidades que tienen en sí mismos los seres en busca de la perfección. Platón era un amante de lo matemático y de elementos místicos y relacionados con el alma, lo que contrasta con la visión biológica de Aristóteles y su desinterés por las matemáticas y la religiosidad.
Así, para Platón el cambio y la materia son negativos. Por eso separó la idea universal, a la que le da prioridad siempre sobre los individuos, de la materia sensible y creó el dualismo ontológico. Por otra parte, para Aristóteles el cambio no es negativo, por lo que no separa las ideas o formas de las cosas sensibles, sino que estas residen en el mundo tangible. Así, el afán separatista de Platón desemboca en el hilemorfismo aristotélico, en el cual las sustancias están compuestas de materia y forma unidas inseparablemente, y también la prioridad del individuo sobre la idea universal.
En definitiva, Aristóteles niega la dualidad ontológica, afirma que el mundo sensible es la verdadera realidad, forma y materia van siempre ligadas, la idea universal está dentro del individuo y el ser es inmanente.
Metafísica Aristotélica
En su crítica a Platón nos encontramos ya con los fundamentos que estarán presentes en su propia metafísica, en la que nos centraremos a continuación, y que son la teoría de las cuatro causas del ser y la distinción entre ser en acto y ser en potencia.
Cabe recordar que para Aristóteles la naturaleza es el centro de toda su filosofía, contrastando con las Ideas de la teoría platónica. Al hablar de naturaleza no nos referimos a un concepto con un único significado, sino que engloba los tres siguientes: es un modo de ser de las cosas, es decir, su esencia; es un principio inmanente de movimiento; y también es un principio inmanente de reposo, operatividad y desarrollo.
Tipos de Seres
Tenemos también que diferenciar entre los distintos tipos de seres, todos ellos formados por sustancia (individuo concreto) y accidente (cualidades cambiantes):
- Seres naturales: son aquellos que poseen principio inmanente y, por lo tanto, tienen naturaleza o espontaneidad y finalidad.
- Seres artificiales: carecen de principio inmanente, por lo que no tienen naturaleza, aunque sí tienen finalidad, introducida por el productor.
- Seres azarosos: tienen naturaleza, pero no finalidad, por lo que se consideran “fallos de la naturaleza”.
Hilemorfismo
El hilemorfismo es la doctrina filosófica que considera que la realidad física y natural está compuesta de materia y forma, siendo inseparables, justificando así que la sustancia primera, es decir, el individuo, no es algo estático, sino que tiene la capacidad para desarrollarse y perfeccionarse.
Cada sustancia, compuesta por materia y forma, posee en su interior otras sustancias, por lo que debemos diferenciar entre dos tipos de materia:
- Materia próxima o segunda: es el componente de las sustancias, lo particular y que la distingue, y está siempre ligada a una forma, que representa la esencia o lo universal del objeto.