Ciencia y Pseudociencia: Características y Diferencias Clave

Caracterización de la Ciencia y de la Pseudociencia

La ciencia está constantemente presente en nuestras vidas, motivo por el cual es importante distinguirla de la pseudociencia. La ciencia es un creciente cuerpo de ideas caracterizado como conocimiento racional, sistemático, exacto, verificable y falible del mundo. No obstante, la pseudociencia es una falsación de la ciencia que el hombre ha conseguido a través de cuatro formas distintas: el plagio, la tergiversación de datos, empleando falsos mitos presentados como datos científicos o presentándola como si fuese ciencia.

La pseudociencia es tan característica de la cultura moderna como la ciencia y, en muchos casos, es más popular y rentable que esta. La pseudociencia es peligrosa por:

  • Hace pasar la especulación desenfrenada o los datos no controlados por resultados de investigaciones científicas.
  • Contamina seriamente algunas áreas de la ciencia.
  • Es accesible a millones de personas, mientras que la ciencia auténtica es difícil y elitista.
  • Se ha convertido en un negocio multimillonario a costa de la credulidad popular de una masa de población desinformada.
  • Posee el apoyo de poderosos grupos de presión, como partidos políticos, y goza de la simpatía de los medios de comunicación.

Además, los proyectos de la pseudociencia no buscan leyes por medio de la utilización de un método científico, no hacen uso del conocimiento antecedente del que se dispone, fruto del trabajo científico, ni tampoco son compatibles con dicho conocimiento. Por otro lado, tanto la ciencia como la pseudociencia pueden caracterizarse como campos de conocimientos, sectores de la actividad humana cuya finalidad es obtener, difundir o utilizar conocimientos de alguna clase, ya sean verdaderos o falsos. Pero se diferencian en los elementos en los que están basadas.

La Ciencia

La ciencia es un campo de conocimientos C que incluye:

  1. Un trasfondo filosófico (o perspectiva general) F: una ontología de entidades reales y mudables, una gnoseología realista y crítica, un ethos o espíritu de libre búsqueda que no persiga únicamente la fría utilidad, el poder o la salvación eterna.
  2. Un trasfondo formal F: formado por teorías lógicas y matemáticas actualizadas.
  3. Un trasfondo específico E: formado por pruebas de experimentación, datos, hipótesis y teorías actualizadas y bien confirmadas obtenidas en otros campos de investigación relacionados con el campo de investigación C.
  4. Una problemática P: se compone del conjunto de problemas teóricos y prácticos que se trata de solucionar.
  5. Unos objetivos o metas O de la investigación científica.
  6. Una metodología M: consiste en el conjunto de procedimientos controlables, analizables y justificables que la ciencia particular utiliza en la solución de la problemática P y en la búsqueda de los objetivos O.

Un campo de conocimientos que no satisface todas las seis condiciones enumeradas es un campo no científico. Sin embargo, la cientificidad se representa en grados, es decir, un campo de conocimientos que satisface casi todas las condiciones descritas y que se dirige progresivamente a lograr el total cumplimiento de ellas, puede ser considerado una protociencia o ciencia progresiva. En cambio, todo campo de conocimientos que no es científico y no pretende serlo será considerado como pseudocientífico. La diferencia entre ciencia y protociencia es una cuestión de grado de satisfacción de las condiciones enumeradas, mientras que la diferencia entre ciencia y pseudociencia es radical y abismal.

La Pseudociencia

La pseudociencia es un campo de conocimientos C que incluye:

  1. Una comunidad de creyentes C: que no realiza una investigación rigurosa.
  2. Un grupo social S: que presta apoyo material e ideológico a C, porque lo considera un buen negocio.
  3. La perspectiva general o cosmovisión G: incluye una ontología que contempla entidades irreales o procesos inmateriales, esto es, entidades falsas. También incluye una gnoseología que se basa en argumentos de autoridad de algún gurú o en modos paranormales de conocimiento asequibles solo para iniciados o a aquellos entrenados para interpretar ciertos textos canónicos, o un ethos de la cerrada defensa el dogma y del engaño. La crítica no es bienvenida.
  4. Un casi inexistente trasfondo formal F: no siempre respeta la lógica y las teorías matemáticas son la excepción en lugar de la regla.
  5. Un trasfondo específico E casi inexistente: la pseudociencia no aprende nada de los otros campos de conocimientos ni tampoco contribuye al desarrollo de otros campos. Es estático y contiene numerosas hipótesis no contrastables e incluso falsas, que son contradictorias con las hipótesis científicas bien confirmadas.
  6. Una problemática P: incluye problemas “prácticos” de la vida humana, más que problemas de carácter cognoscitivo.
  7. Objetivos O: son principalmente prácticos. No incluyen metas típicas de la investigación científica.
  8. Una metodología M: no es controlable ni justificable mediante teorías bien confirmadas.

En conclusión, la pseudociencia no es basura ordinaria que no hay que tener en cuenta, sino que es un germen intelectual peligroso que puede atacar a cualquiera. También puede afectar el estado de salud de una cultura a causa de su extensa y rápida difusión. Pero este germen puede ser identificado y parado mediante la filosofía de la ciencia, que nos enseña cómo mantenernos alerta de los peligros de la pseudociencia y cómo distinguirla de la auténtica ciencia.

El Método Hipotético-Deductivo en la Ciencia

La ciencia está presente en nuestro día a día, pero ¿qué es? La ciencia es un creciente cuerpo de ideas que se caracteriza como conocimiento racional, sistemático, exacto, verificable y falible del mundo, y su función es buscar la verdad. Pero el proceso científico de buscar la verdad no ha sido siempre como es ahora.

Anteriormente, los avances científicos estaban ligados a los dogmas que presidían el mundo y las mentalidades de las culturas. Si un avance, por muy preciso y verdadero que fuese, iba en contra de lo que se había impuesto, automáticamente era considerado falso. Por ejemplo, esto pasó con la teoría heliocéntrica de Galileo, que a causa del dogma de la teoría geocéntrica, fue falsacionada. Los dogmáticos actuaban de esta manera porque no estaba entre sus objetivos demostrar empírica y racionalmente lo que afirman.

Sin embargo, esto ha cambiado, pues actualmente, el conocimiento científico se caracteriza por su verificabilidad, siempre es susceptible de ser verificado (confirmado o desconfirmado). El conocimiento científico pretende ser verdadero y siempre intenta serlo más y más, pero la veracidad no caracteriza el conocimiento científico de manera tan inequívoca como el método por el cual la investigación científica plantea problemas y pone a prueba las soluciones propuestas o hipótesis. Un dato será considerado verdadero hasta cierto punto, siempre que pueda ser confirmado de manera compatible con los cánones del método científico.

Para verificar un enunciado de la ciencia fáctica necesitamos encontrar un enunciado confirmatorio o desconfirmatorio que estará referido a una experiencia o conjunto de hechos del mundo exterior. En cambio, si lo que se pretende verificar es un enunciado acerca de un conjunto de signos, entonces los enunciados confirmatorios o desconfirmatorios serán definiciones, principios o regla de una ciencia formal (matemática o lógica). Por ello, la verificación de los enunciados de la ciencia formal solo incluye operaciones racionales y no requieren otro instrumento material que el cerebro, ni tampoco necesitan hacer referencia al mundo exterior. Sin embargo, los enunciados de la ciencia fáctica, que comunican información acerca de la naturaleza y de la sociedad, requieren de la observación, de la medición y del experimento en un mundo exterior.

Una vez entendido que los enunciados científicos son verificables, hay que averiguar qué se puede verificar y qué no, pues no todas las afirmaciones son verificables. Toda afirmación acerca de fenómenos sobrenaturales es inverificable, pues trasciende todo cuanto está a nuestro alcance y no se la puede someter a prueba ni con la experiencia, ni con la lógica y la matemática. Cuando un enunciado es verificable posee un grado de generalidad suficiente o cuando una proposición general puede verificarse solo de manera indirecta (por el examen de algunas de sus consecuencias), se le llama hipótesis científica.

Actualmente, el núcleo de toda teoría científica es un conjunto de hipótesis verificables que deben pasar la prueba de la experiencia. De esta forma, podemos llamar hipótesis científicas a dos cosas:

  1. A las soluciones provisionales que se plantean ante un problema científico antes de efectuar el ensayo o experimento correspondiente.
  2. A las suposiciones razonablemente confirmadas y establecidas, ya que probablemente no hay enunciados fácticos generales perfectos, es decir, incluso a las teorías ya confirmadas se las puede llamar hipótesis, pues aún pueden ser mejoradas.

Pero además de ser verificadas empíricamente, las hipótesis deben coincidir con unos soportes extracientíficos: uno de carácter psicológico, que influye sobre la elección de nuestras hipótesis; y otro de carácter cultural (es decir, la mentalidad de la época) que consiste en su compatibilidad con alguna concepción del mundo y con la concepción prevaleciente en una época determinada. Esto se debe a que la experiencia disponible en cada momento no puede ser considerada como definitiva e inapelable, porque nuevas experiencias pueden mostrar la necesidad de una corrección y porque la experiencia científica no se basa únicamente en los hechos, sino que es interpretada en relación a una teoría.

Desarrollo Metódico de la Investigación Científica

La investigación científica se desarrolla de manera metódica, las hipótesis no se nos imponen por la fuerza de los hechos, sino que son construidas para dar cuenta de los hechos. La ciencia es una creadora de teorías explicativas de la realidad y no una simple plasmación fotográfica de esta. La ciencia es un sistema de ideas y su método es:

1. Planteamiento del Problema

  • 1.1 Observación de los Hechos: Recoger datos de forma sistemática a partir de la observación de los hechos de tal forma que permita identificar el problema y buscar una solución.
  • 1.2 Formulación del Problema: Reducción del problema a una pregunta que puede ser respondida satisfactoriamente con ayuda del conocimiento del que disponemos.

2. Construcción del Modelo Teórico

  • 2.1 Invención de las Hipótesis Centrales y de las Suposiciones Auxiliares: Propuesta de un conjunto de conjeturas y suposiciones que se espera que den respuesta y solución.
  • 2.2 Traducción Matemática: Traducción de las hipótesis a un lenguaje matemático.

3. Contrastación de las Hipótesis

  • 3.1 Diseño de la Prueba: Planteamiento de los medios para poner a prueba las predicciones o conjeturas: diseño de las mediciones y experimentos.
  • 3.2 Ejecución de la Prueba: Realización de las operaciones de experimentación y recolección de datos.
  • 3.3 Elaboración de los Datos: Clasificación, análisis y evaluación de los datos.
  • 3.4 Inferencia de la Conclusión: Sacamos conclusiones a partir de los datos obtenidos.

4. Introducción de las Conclusiones en las Teorías

  • 4.1 Comparación de las Conclusiones con las Predicciones: Verificación o falsación de la hipótesis.
  • 4.2 Reajuste del Modelo: Eventual corrección o reemplazo del modelo.
  • 4.3 Sugerencias acerca del Trabajo Ulterior: Si el modelo teórico ha sido falsado se buscan los errores y si ha sido confirmado, se examinan las posibles investigaciones futuras y las extensiones y consecuencias que tienen en otras ciencias o saberes relacionados con el modelo teórico estudiado.

Filosofía de la Ciencia vs. Cientificismo

La filosofía de la ciencia es la clase de concepciones filosóficas que aceptan el método de la ciencia como la manera que nos permite plantear cuestiones fácticas “razonables”, es decir, preguntas significativas y que pueden ser respondidas dentro de una teoría existente o concebible. No se debe confundir la filosofía de la ciencia con el cientificismo en ninguna de sus dos variantes:

a) El Enciclopedismo Científico: Pretende que la única tarea de los filósofos de la ciencia es recoger los resultados más generales de la ciencia, elaborando una imagen unificada de los mismos y formulándolos en un único lenguaje. En cambio, la filosofía de la ciencia construye teorías de segundo nivel (metateorías). La filosofía será científica en la medida en que elabore de manera racional los materiales previamente elaborados por la ciencia.

b) El Cientificismo Concebido como Reduccionismo Naturalista: Pretende describirlo como una tentativa de resolver problemas con ayuda de las técnicas creadas por las ciencias naturales, no considerando las cualidades específicas y las técnicas propias de cada nivel de la realidad, es decir, pretende reducir cuestiones de la realidad a la ciencia natural, sin consideraciones de tipo social.

En cambio, la filosofía científica favorece la elaboración de técnicas específicas en cada campo, con la única condición de que estas técnicas cumplan las exigencias esenciales del método científico.

Significados del Término «Ley» en las Ciencias Fácticas

En cuanto a las leyes científicas, hay pocos teóricos de la ciencia que concuerden respecto a lo que el término “ley” designa, hay una variedad de significados de este término en el ámbito de las ciencias fácticas.

  1. LEY1: Denota toda relación constante y objetiva en la naturaleza, en la sociedad o en la mente.
  2. LEY2: Designa toda regla mediante la cual puede regularse una conducta determinada en la naturaleza, en la sociedad o en la mente.

En conclusión, las leyes científicas son un duro trabajo de reconstrucción conceptual que va desde la observación, descripción y clasificación de los hechos hasta una teoría científica compuesta por un conjunto sistemático de leyes que explican y predican los hechos de la realidad, y aun así, nunca podremos estar seguros de la veracidad de una teoría, pues siempre puede ser perfeccionada o falsada.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *