Tanto Platón como Descartes son considerados figuras centrales del racionalismo. Ambos sitúan la fuente del conocimiento en la razón y desconfían de los sentidos, argumentando que pueden engañarnos y no demuestran la realidad de las cosas. Sin embargo, reconocen que la razón a veces puede ser influenciada por los sentidos.

Teoría de las Ideas

Descartes defiende el innatismo, la idea de que nacemos con ciertas ideas preexistentes, introducidas en nuestra mente por Dios. En contraste, Platón argumenta que las ideas son a priori, es decir, existen antes de la experiencia sensible. Para explicar cómo la razón conoce, Platón propone la teoría de la reminiscencia: recordamos las ideas a partir de la experiencia sensible.

Platón también introduce la dialéctica, un conocimiento superior basado en las matemáticas que conduce a la Idea del Bien, la idea suprema. Descartes, por otro lado, se basa en el método cartesiano, inspirado en los principios geométricos de Euclides, para alcanzar el conocimiento superior. Este método se divide en cuatro pasos: evidencia, análisis, síntesis y comprobación. Descartes utiliza este método para descubrir la primera verdad y avanzar hacia una comprensión unificada del conocimiento.

Dualismo y la Naturaleza de la Realidad

Tanto Platón como Descartes son dualistas. Ambos sostienen que la persona es una entidad compuesta de cuerpo (sujeto a cambios) y alma (capaz de subsistir sin el cuerpo). Para Descartes, Dios es la causa de todo; todo existe gracias a Él. El Dios de Descartes es un Dios creador, capaz de crear el mundo de la nada, un Dios católico.

Platón, en cambio, atribuye la creación del mundo a tres principios: el Demiurgo (una inteligencia ordenadora similar a un Dios, pero que ordena en lugar de crear), la Materia (eterna y caótica, en constante movimiento) y las Ideas (perfectas e inmutables).

Para Platón, el cuerpo pertenece al mundo sensible, pero el alma, proveniente del mundo de las ideas, es lo más importante. Para Descartes, el cuerpo es extensión y el alma es pensamiento. El alma informa a todo el cuerpo, teniendo su sede principal en el cerebro.

Realismo Platónico vs. Idealismo Cartesiano

Si bien ambos autores hablan de ideas, lo hacen desde perspectivas distintas. Platón parte de la premisa de que las Ideas son reales y existen independientemente de nuestra mente. Descartes, por otro lado, considera las ideas como representaciones mentales de la realidad, como pensamientos o contenidos de nuestra mente. Se podría decir que Platón defiende un realismo de las ideas, mientras que Descartes se inclina hacia un idealismo.

Conceptos Clave en Platón

• Ámbito inteligible: Uno de los dos ámbitos que Platón distingue en la realidad. Su ontología dualista separa lo sensible del ámbito inteligible, que está formado por los seres inteligibles.
• Ámbito visible: Se refiere al ámbito sensible. Su ontología dualista separa lo inteligible del ámbito sensible, que está formado por seres sensibles.
• Modo de opinar: El saber de los prisioneros en la alegoría de la caverna es una mera conjetura, el grado inferior de opinión. Consiste en el conocimiento de imágenes y no es un conocimiento genuino, pues se basa en suposiciones, rumores y saberes sin fundamento.
• Sombras de los objetos: Representan el mundo sensible, que no es la auténtica realidad. Las sombras, al igual que los objetos que las proyectan, refieren a un grado del ser.

Conceptos Clave en Descartes

• Razón: La capacidad de juzgar correctamente y distinguir lo verdadero de lo falso. Es la única propiedad que nos hace humanos y es igual en todos. Los errores no provienen de la razón en sí, sino del mal uso que se hace de ella.
• Idea: Las ideas no son verdaderas ni falsas en sí mismas. La verdad o falsedad reside en los juicios que hacemos sobre ellas. Las ideas tienen dos aspectos: la realidad formal y su modo de pensamiento.
• Evidencia: Conocimientos obtenidos a través de la intuición. Lo evidente es inmediatamente cierto.
• Verdad: Las ideas que la razón, a través de la voluntad, juzga como evidentes o ciertas son verdaderas. La verdad no reside en la idea misma, sino en el juicio que se hace sobre ella. La verdad no es fruto del entendimiento, sino de la voluntad.
• Sustancia: Una cosa que existe de tal manera que no necesita de ninguna otra para existir. Solo hay una sustancia infinita: Dios. Hay tres tipos de sustancia: infinita, pensante y extensa.
• Clara y distinta: Clara se refiere a las percepciones del entendimiento y a las ideas que conocemos a través de ellas. Distinta se refiere a las ideas y percepciones de la mente que, además de ser claras, son precisas y separadas de todas las demás.