Contexto de Nietzsche
Siglo XIX e Industrialización
El siglo XIX estuvo marcado por la industrialización, un proceso que prometía un nuevo orden social con prosperidad material y perfeccionamiento moral. Sin embargo, la realidad fue distinta, generando desigualdad social, empobrecimiento de agricultores y enriquecimiento de la burguesía. Este contexto dio lugar a la consolidación del modo de vida urbano, el colonialismo en África y Asia, y el auge del nacionalismo, que a su vez inspiró el imperialismo y la expansión colonialista, sentando las bases para la Primera Guerra Mundial.
Corrientes Ideológicas
Políticamente, el siglo XIX vio el surgimiento de diversas corrientes ideológicas:
- Liberalismo: Defendía la libertad individual, especialmente para la burguesía.
- Tradicionalismo: Reivindicaba el pasado histórico, la tradición y la raza, convirtiéndose en germen de nacionalismos y racismos.
- Socialismo utópico: Proponía la transformación social basada en los ideales igualitarios de la Ilustración.
- Anarquismo: Defendía una sociedad sin autoridad, con figuras como Bakunin y Stirner.
Romanticismo y Positivismo
En el ámbito cultural, el Romanticismo surgió como reacción a la Ilustración, destacando el valor del sentimiento y la imaginación. La primera mitad del siglo XIX estuvo dominada por el Idealismo alemán. Posteriormente, el Positivismo se presentó como alternativa a los excesos románticos, considerando que el hombre debía atenerse a los hechos objetivos. El Vitalismo, heredero de la filosofía de Schopenhauer, promulgaba un ideal romántico frente al ilustrado.
Vida y Obra de Nietzsche
Friedrich Nietzsche (1844-1900), crítico del socialismo y el movimiento obrero, nació en una familia religiosa. Estudió Teología y Filología, llegando a ser profesor en la Universidad de Basilea. Tras su jubilación por enfermedad, viajó por Europa y sufrió una crisis que marcó el resto de su vida. Su obra se divide en etapas:
- Periodo romántico (filosofía de la noche)
- Periodo positivista (filosofía de la mañana)
- Periodo del mensaje de Zaratustra (filosofía del mediodía)
- Periodo crítico (filosofía del atardecer)
Su lenguaje expresivo buscaba la belleza literaria.
Comparaciones Filosóficas
Platón y Descartes
Epistemológicamente, Platón y Descartes valoraban la razón como fuente de conocimiento verdadero, desvalorizando los sentidos. Ambos admiraban el conocimiento y método matemático. Sin embargo, diferían en la física, que Descartes consideraba ciencia y Platón no. El método platónico estaba reservado a los filósofos, mientras que el cartesiano podía ser utilizado por cualquier persona con capacidad de razonamiento. Ambos practicaban un dualismo antropológico (alma y cuerpo), pero Descartes no veía el cuerpo como cárcel del alma.
Nietzsche y Descartes
Descartes consideraba el mundo verdadero como lo evidente y deducible matemáticamente, y el mundo aparente como lo sensible no matematizado. Nietzsche, en cambio, negaba el mundo de las ideas y apoyaba un único mundo sensible en constante devenir. En cuanto al conocimiento, Descartes desconfiaba de los sentidos y priorizaba la razón independiente de ellos. Nietzsche, por su parte, contraponía la metáfora al concepto, los sentidos a la razón, y el arte a la ciencia.
Nietzsche y Platón
Nietzsche se oponía a la idea platónica de valores universales y eternos. El concepto platónico de Idea carecía de sentido para él, considerándolo un consuelo metafísico. La ética de la razón de Platón contrastaba con la ética de la voluntad de Nietzsche. Sus modelos de ser humano eran opuestos.
Actualidad de Descartes
La influencia de Descartes, padre de la filosofía moderna, perdura en la actualidad. Su metodología, basada en el método científico, es fundamental en la investigación. La confianza en la razón como herramienta para resolver problemas sigue vigente. La duda cartesiana, como base del espíritu crítico, continúa siendo esencial.
Actualidad de Nietzsche
La obra de Martin Heidegger (1961) presentó a Nietzsche como un autor metafísico centrado en el problema del ser y la realidad. Otra interpretación lo considera un crítico de la cultura, un «filósofo de la vida». Ambas interpretaciones muestran su influencia en corrientes como el existencialismo y la hermenéutica, que interpretan la cultura desde su historicidad y replantean el problema del ser y la verdad.