Conceptos Fundamentales en Agustín de Hipona, Tomás de Aquino, Rousseau y Marx

Agustín de Hipona: La Necesidad de Dios en la Sociedad

1. Autor

Agustín de Hipona vivió en el siglo IV y pertenece a la Filosofía Medieval. Inicialmente se inclinó por la filosofía, pero terminó optando por la religión, específicamente el cristianismo. Se le considera el primer filósofo cristiano, aunque en su época estas corrientes aún no estaban completamente unidas.

2. Tema

Necesidad de Dios en la sociedad para la existencia de la política.

3. Ideas

  • A. Justicia: Dios debe imperar sobre las sociedades, y en los hombres de esta sociedad, el alma debe imperar sobre el cuerpo y la razón sobre los vicios.
  • B. Mandato de Dios: Que todo el pueblo viva de la fe.
  • C. Creyente: Aquel que obra por amor a Dios y al prójimo como a sí mismo.
  • D. Donde no haya esta justicia, no hay sociedad fundada en derechos e intereses comunes y, por lo tanto, no hay pueblo.
  • E. Si no hay pueblo, no hay política.

4. Relación de las Ideas

La idea D se basa en las definiciones expuestas en A, B y C. E es consecuencia de D. Si no hay justicia, no hay pueblo; si no hay pueblo, no hay política. Por lo tanto, sin justicia no puede haber política.

5. Explicación de las Ideas

Agustín introduce una serie de conceptos como justicia, mandato de Dios y creyente para facilitar la comprensión de su argumento principal: la presencia de Dios es necesaria en la sociedad para que esta sea posible. Esta afirmación recuerda a la teoría de la iluminación de Agustín, que sostiene que Dios está presente en todas las verdades parciales y es necesario conocerlo y permitir que actúe para alcanzar la felicidad (y, en este caso, para que la política sea posible). En su obra La Ciudad de Dios, a la que pertenece este fragmento, Agustín afirma que la Ciudad del Mundo (el Imperio o el Estado) solo tiene sentido si en su interior se realiza la Ciudad de Dios, lo cual resume su argumento en este texto.

Tomás de Aquino: Justificación de la Teología

1. Autor

Tomás de Aquino vivió en el siglo XIII y es el máximo representante de la escolástica cristiana, una rama de la filosofía cristiana. Pertenece a la Filosofía Medieval, de la cual también se le considera el máximo representante. Aquino basa gran parte de su obra en Aristóteles, de quien era un fiel seguidor.

2. Tema

Justificación de la necesidad de un saber (teología) que trate sobre Dios.

3. Ideas

  • A. Para la salvación humana es necesaria, además de la filosofía, la teología.
  • B. Dios es el fin humano.
  • C. Dios es superior a la razón.
  • D. Necesidad de la revelación divina para que el hombre llegue a Dios.

4. Relación de las Ideas

Como Dios es el fin y la salvación humana, y la razón es insuficiente, debe existir una ciencia basada en lo divino, la teología, para que el hombre pueda salvarse. Debido a B y C, se deduce D. Debido a D, se deduce A.

5. Explicación de las Ideas

El texto presenta una serie de argumentos para justificar la necesidad de la teología, basada en lo divino, como ciencia. Dado que la razón es insuficiente para encontrar a Dios, y Dios es el fin y la salvación humana, se necesita la revelación divina para que la salvación llegue de manera fácil y segura a los hombres. Tomás sostiene que a verdades como la existencia de Dios y su necesidad para la salvación humana se puede llegar desde la razón, pero es un camino complejo, solo apto para los sabios. Por ello, el hombre necesita conocer los artículos de la fe (obtenidos mediante la revelación divina) para no estar condenado. También distingue dos tipos de teología: la natural (zona de confluencia entre fe y razón) y la sagrada (artículos de la fe, que deben ser interpretados de las Escrituras).

Rousseau: Libertad e Igualdad como Base del Estado Justo

1. Autor

Rousseau fue un pensador franco-suizo que vivió en el siglo XVIII (perteneciente a la Filosofía Moderna) y es reconocido como uno de los filósofos más importantes de la Ilustración.

2. Tema

La base de un Estado justo reside en la presencia de la libertad y la igualdad.

3. Ideas

  • A. Meta de los sistemas legislativos: libertad e igualdad.
  • B. Si se elimina la libertad, se debilita el Estado.
  • C. Libertad e igualdad son interdependientes.
  • D. El poder debe ejercerse sin violencia, en virtud del rango y las leyes.
  • E. Igualdad-Riqueza: Ningún ciudadano debe ser tan rico como para poder comprar a otro, ni tan pobre como para ser obligado a venderse.

4. Relación de las Ideas

La idea A es la principal del texto. Las ideas B y C justifican A (explican por qué la libertad y la igualdad deben ser la meta de todo sistema legislativo). Las ideas D y E explican cómo debe ser un Estado en términos de poder y riqueza.

5. Explicación de las Ideas

En su obra El contrato social, Rousseau desarrolla su teoría política, que propone un Estado justo que obedece a la voluntad general (la voluntad de todos los individuos). Las bases de dicho Estado son la libertad civil y la igualdad. La libertad civil es crucial porque el ciudadano participa directamente en el Estado a través de la voluntad general; por lo tanto, eliminar la libertad debilitaría al Estado. En cuanto a la igualdad, Rousseau sostiene que el hombre en su estado de naturaleza (supuesto estado anterior a toda sociedad) solo tiene desigualdades físicas, y todos los individuos son prácticamente iguales. Aplica este concepto a su Estado justo, basándose en el estado de naturaleza para corregir la sociedad corrupta en la que vivía. Esto implica que nadie debe tener más rango social o nivel económico que otro, y todos deben estar igualmente sometidos a las leyes emanadas de la voluntad general, ya que en el estado de naturaleza no hay rangos sociales ni propiedad privada (considerados el origen de la desigualdad y la injusticia). En este Estado, no existe la propiedad privada, pero sí el derecho a la propiedad, que puede ser aprobado por la voluntad general para que sea explotada en beneficio de la sociedad.

Marx: La Alienación del Hombre en el Trabajo

1. Autor

Karl Marx, un judío-alemán que vivió en el siglo XIX, es uno de los pensadores más importantes de la Filosofía Contemporánea. Sus teorías políticas son el origen del pensamiento socialista y comunista, que aún tiene influencia en nuestra sociedad.

2. Tema

Enajenación del hombre en el trabajo.

3. Ideas

  • A. El trabajo es externo al trabajador; no pertenece a su ser.
  • B. El trabajador no se realiza en su trabajo: se niega, no se siente feliz, modifica su cuerpo, arruina su espíritu, se siente fuera de sí.
  • C. Recíprocamente, el trabajador se siente en sí y está en lo suyo fuera del trabajo.
  • D. Dicho trabajo es un trabajo forzado porque no satisface una necesidad, sino que es un medio para satisfacer necesidades externas a él.
  • E. El trabajo no pertenece al trabajador, sino a otro.
  • F. Con el trabajo sucede como con la religión: actúa sobre el hombre una actividad extraña, divina o diabólica, que hace que no sea él mismo.

4. Relación de las Ideas

La idea A es la principal del texto. Las ideas B y C están relacionadas recíprocamente (que el trabajador se sienta fuera o no de sí depende de si realiza un trabajo forzado) y son una continuación de A (exponen en qué consiste la enajenación, pero no por qué sucede). Las ideas D y E explican el origen de la enajenación del hombre (es un trabajo forzado y no pertenece al trabajador). La idea F es una analogía que Marx establece entre la religión y el trabajo (en ambas considera al hombre alienado).

5. Explicación de las Ideas

Para Marx, el hombre se siente fuera de sí mismo (enajenado, alienado) cuando realiza un trabajo forzoso, un trabajo que no satisface una necesidad, sino que es un medio para satisfacer otras necesidades (comer, tener un hogar, etc.). Que este trabajo pertenezca a alguien externo al propio trabajador y no a él también causa dicha enajenación. Marx entiende que el trabajo es la esencia del hombre, ya que de él deriva lo que los seres humanos piensan y son; por eso, frente a las alienaciones políticas, religiosas o culturales, esta es la más peligrosa. La idea de que el trabajo del hombre pertenece a alguien externo a él se comprende mejor a través de las relaciones de producción: en todos los sistemas económicos sociales (esclavismo, feudalismo, capitalismo) siempre existe una clase oprimida y abundante (los trabajadores) y una clase reducida y opresora, que posee los medios de producción (trabajadores, herramientas, maquinaria, propiedad privada) y que en la época de Marx correspondían a los patronos capitalistas. Para estos dueños de los medios de producción es para quienes el hombre realiza ese trabajo forzado. En cuanto a la similitud entre religión y trabajo, Marx resume su visión de la religión en su célebre frase: «La religión es el opio del pueblo», es decir, produce una alienación en el hombre, al igual que el trabajo (pertenece a otro, en este caso a Dios, que es planteado como algo contrario al hombre).

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