Contexto Histórico Descartes nace en el año 1596 en la Haye y muerte en Estocolmo en 1650, es decir, su filosofía se desarrolló durante el Siglo XVII, por lo que estuvo fuertemente condicionada por el absolutismo, contrarreforma y la nueva ciencia:
El absolutismo, aunque surge mucho antes, comienza a afianzarse durante la Edad Media tras la victoria de los reyes frente a la nobleza debido principalmente a los soberanos, al desgaste de las continuas guerras político-religiosas y al apoyo burgués a la monarquía. Este absolutismo también acabó influyendo en la religión del pueblo, ya que, desde la Paz de Augsburgo de 1555, es el rey el encargado de elegir la religión de sus súbditos; además, obviamente, de encabezar el poder político, legislativo y ejecutivo. Probablemente la guerra de religiones más importante fue la Guerra de los 30 años (1618-1648), en la cual católicos y protestantes lucharon entre sí, en un primer momento, en Alemania como escenario; y, posteriormente, extendíéndose al resto de Europa. En esta guerra participó Descartes, aunque, en un primer lugar defendiendo al ejército protestante para posteriormente cambiar al bando católico. En esta guerra, aunque en un principio parecía que los protestantes acabarían claramente derrotados, las incorporaciones de Suecia y Francia del lado luterano igualaron el conflicto, siendo incapaz de decidirse para cualquiera de los dos bandos. Finalmente, terminaría en 1648 tras la Paz de Westfalia; sin embargo, la gran extensión de la guerra acarreó enormes desastres económicos y demográficos que provocaron que la población se sumergiera dentro de un carácter ilusorio de la vida, amenazados permanente por la muerte (reflejado en La vida es sueño de Calderón de la Barca, influyente en el proceso de duda cartesiano) Otro factor relevante en esta época es la Contrarreforma, que la podemos considerar como la respuesta católica a la Reforma protagonizada por Lutero en el siglo anterior; aunque por otros muchos es considerada efectivamente, la auténtica Reforma del catolicismo que se hubiera producido independientemente de la aparición del protestantismo siguiendo la nueva tendencia impulsada por: – Ockham, que criticó la visión de Tomás de Aquino respecto a que la razón está subordinada a la fe, dando lugar a que, si existe un conflicto entre ambas, habrá que decantarse por la segunda. Sin embargo, Ockham comprende los contenidos de la fe y de la razón como contenidos totalmente independientes, entendiendo a Dios como fruto de la fe, nunca de la razón. – El humanismo, que obliga al enfoque teocéntrico de la escolástica medieval a dar un paso atrás para permitir situar al hombre en el lugar central, convirtiéndose en el inicio de cualquier reflexión posible. Esta tendencia se pone de relieve en las filosofías de Descartes, donde piensa que Dios no es el punto de partida, sino la Idea de Dios en cada uno. – Revolución científica Desde estrictamente el punto de vista religioso, los hechos más significativos fueron la fundación de la Compañía de Jesús (jesuitas) en 1534 por San Ignacio de Loyola; y el desarrollo del Concilio de Trento, que sería la primera respuesta de la Iglesia contra la Reforma protestante. Por último, el otro factor fue la aparición de la ciencia moderna, asentada tras los trabajos de Copérnico, Kepler y Galileo. Esta aparición condiciónó el viraje de la filosofía hacia lo que ahora conocemos como Filosofía Moderna, iniciada por Descartes. Esta nueva ciencia está caracterizada por usar el método experimental (lo que se refleja en la Filosofía Moderna en que la última palabra ya no la tiene ni la Biblia ni Aristóteles; sino la razón). Esto, como era de esperar, no le producía simpatía a la Iglesia, que condenó a Galileo y censuró a Copérnico. Esta nueva ciencia no hubiera sido posible sin su matematización, un saber considerado como la única ciencia indudable debido principalmente a que cuentan con un método, factor del que no disponen otras ramas del conocimiento.
Es por ello por lo que Descartes piensa que el objetivo del filósofo es elaborar unas reglas que permitan dirigir correctamente el pensamiento. De la aparición de esta ciencia moderna resulta un acercamiento entre dos áreas del saber a priori totalmente distintas: la ciencia de Newton, Kepler, Galileo y Copérnico; junto a la filosofía de Descartes, Spinoza, Leibniz, Locke y Hume. Contexto filosófico. Descartes era el máximo representante del Racionalismo junto a Leibniz, Spinoza y Malabranche –son exactamente los mismo de la línea de arriba, pero sustituyendo a Locke y Hume por Malabranche-. Estos afirmaban la autosuficiencia de la razón como fuente de conocimiento. Ésta se convertirá en el principio supremo, que no podrá ser limitada por la fe, tradición, ni autoridad. El Racionalismo afirma que: 1) el único conocimiento válido es el obtenido a través de la razón, y que por lo tanto 2) no se debe valorar el conocimiento obtenido por los sentidos pues nos engañan. 3) Afirman la existencia de ideas innatas ajenas a la experiencia. 4) Creen en la existencia de una ciencia universal y necesaria; y, por último, 5) todo cuenta con una justificación, y esta podrá conocerse a través de la razón. En lo particular, Descartes propone la idea de deducir todo a partir de un sistema de verdades, acercando más la filosofía a una ciencia que a un campo de discusión. Esta idea, aunque criticada por el escepticismo y el dogmatismo religioso, pudo superar estas críticas por el uso del método matemático, racional y riguroso. Por su parte, las Universidades sufren una importante decadencia por la falta de libertad de pensamientos, comenzando el auge de las Academias
El absolutismo, aunque surge mucho antes, comienza a afianzarse durante la Edad Media tras la victoria de los reyes frente a la nobleza debido principalmente a los soberanos, al desgaste de las continuas guerras político-religiosas y al apoyo burgués a la monarquía. Este absolutismo también acabó influyendo en la religión del pueblo, ya que, desde la Paz de Augsburgo de 1555, es el rey el encargado de elegir la religión de sus súbditos; además, obviamente, de encabezar el poder político, legislativo y ejecutivo. Probablemente la guerra de religiones más importante fue la Guerra de los 30 años (1618-1648), en la cual católicos y protestantes lucharon entre sí, en un primer momento, en Alemania como escenario; y, posteriormente, extendíéndose al resto de Europa. En esta guerra participó Descartes, aunque, en un primer lugar defendiendo al ejército protestante para posteriormente cambiar al bando católico. En esta guerra, aunque en un principio parecía que los protestantes acabarían claramente derrotados, las incorporaciones de Suecia y Francia del lado luterano igualaron el conflicto, siendo incapaz de decidirse para cualquiera de los dos bandos. Finalmente, terminaría en 1648 tras la Paz de Westfalia; sin embargo, la gran extensión de la guerra acarreó enormes desastres económicos y demográficos que provocaron que la población se sumergiera dentro de un carácter ilusorio de la vida, amenazados permanente por la muerte (reflejado en La vida es sueño de Calderón de la Barca, influyente en el proceso de duda cartesiano) Otro factor relevante en esta época es la Contrarreforma, que la podemos considerar como la respuesta católica a la Reforma protagonizada por Lutero en el siglo anterior; aunque por otros muchos es considerada efectivamente, la auténtica Reforma del catolicismo que se hubiera producido independientemente de la aparición del protestantismo siguiendo la nueva tendencia impulsada por: – Ockham, que criticó la visión de Tomás de Aquino respecto a que la razón está subordinada a la fe, dando lugar a que, si existe un conflicto entre ambas, habrá que decantarse por la segunda. Sin embargo, Ockham comprende los contenidos de la fe y de la razón como contenidos totalmente independientes, entendiendo a Dios como fruto de la fe, nunca de la razón. – El humanismo, que obliga al enfoque teocéntrico de la escolástica medieval a dar un paso atrás para permitir situar al hombre en el lugar central, convirtiéndose en el inicio de cualquier reflexión posible. Esta tendencia se pone de relieve en las filosofías de Descartes, donde piensa que Dios no es el punto de partida, sino la Idea de Dios en cada uno. – Revolución científica Desde estrictamente el punto de vista religioso, los hechos más significativos fueron la fundación de la Compañía de Jesús (jesuitas) en 1534 por San Ignacio de Loyola; y el desarrollo del Concilio de Trento, que sería la primera respuesta de la Iglesia contra la Reforma protestante. Por último, el otro factor fue la aparición de la ciencia moderna, asentada tras los trabajos de Copérnico, Kepler y Galileo. Esta aparición condiciónó el viraje de la filosofía hacia lo que ahora conocemos como Filosofía Moderna, iniciada por Descartes. Esta nueva ciencia está caracterizada por usar el método experimental (lo que se refleja en la Filosofía Moderna en que la última palabra ya no la tiene ni la Biblia ni Aristóteles; sino la razón). Esto, como era de esperar, no le producía simpatía a la Iglesia, que condenó a Galileo y censuró a Copérnico. Esta nueva ciencia no hubiera sido posible sin su matematización, un saber considerado como la única ciencia indudable debido principalmente a que cuentan con un método, factor del que no disponen otras ramas del conocimiento.
Es por ello por lo que Descartes piensa que el objetivo del filósofo es elaborar unas reglas que permitan dirigir correctamente el pensamiento. De la aparición de esta ciencia moderna resulta un acercamiento entre dos áreas del saber a priori totalmente distintas: la ciencia de Newton, Kepler, Galileo y Copérnico; junto a la filosofía de Descartes, Spinoza, Leibniz, Locke y Hume. Contexto filosófico. Descartes era el máximo representante del Racionalismo junto a Leibniz, Spinoza y Malabranche –son exactamente los mismo de la línea de arriba, pero sustituyendo a Locke y Hume por Malabranche-. Estos afirmaban la autosuficiencia de la razón como fuente de conocimiento. Ésta se convertirá en el principio supremo, que no podrá ser limitada por la fe, tradición, ni autoridad. El Racionalismo afirma que: 1) el único conocimiento válido es el obtenido a través de la razón, y que por lo tanto 2) no se debe valorar el conocimiento obtenido por los sentidos pues nos engañan. 3) Afirman la existencia de ideas innatas ajenas a la experiencia. 4) Creen en la existencia de una ciencia universal y necesaria; y, por último, 5) todo cuenta con una justificación, y esta podrá conocerse a través de la razón. En lo particular, Descartes propone la idea de deducir todo a partir de un sistema de verdades, acercando más la filosofía a una ciencia que a un campo de discusión. Esta idea, aunque criticada por el escepticismo y el dogmatismo religioso, pudo superar estas críticas por el uso del método matemático, racional y riguroso. Por su parte, las Universidades sufren una importante decadencia por la falta de libertad de pensamientos, comenzando el auge de las Academias