Contexto de Platón
Platón nació en 427 a. C. en Atenas y murió en la misma ciudad el 347 a. C. Este periodo histórico está marcado por la Guerra del Peloponeso, que concluyó en el 404 con la imposición de un régimen de gobierno oligárquico en Atenas, conocido como los Treinta Tiranos. La restauración de la democracia en 403 llevó a la persecución política de los proespartanos, entre los cuales se encontraba Sócrates, maestro y amigo de Platón, que fue condenado a muerte en el 399 a. C. acusado de impiedad y de corrupción de la juventud.
Sócrates era el enemigo intelectual de los sofistas, maestros de retórica, que en aquella época era sinónimo de virtud o excelencia política. Sofistas como Protágoras o Gorgias defendían el relativismo moral y el escepticismo epistemológico, al contrario que Sócrates, firme defensor del objetivismo y del intelectualismo moral.
Platón se dedicó a la filosofía con la vista siempre puesta en la política. Fundó la Academia, que tenía como objetivo formar a los filósofos que tendrían que gobernar la polis, e intentó poner en práctica sus ideas políticas en Siracusa, donde fue invitado por el tirano Dionisio I, que posteriormente lo vendió como esclavo. Platón recuperó su libertad y volvió a Siracusa en otras dos ocasiones a petición de Dionisio II y de Dio, tío de éste.
Entre sus obras destacan República, Fedro o Fedón. Su pensamiento está inspirado principalmente por el de su maestro Sócrates, pero no tenemos que olvidar la influencia que ejercen en las obras de Platón el pensamiento de los sofistas, Heráclito, Parménides o los pitagóricos.
Contexto de Aristóteles
Aristóteles nace en el año 384 a. C. en Estagira. Durante su periplo vital se produce la expansión de Macedonia de la mano de Filipo II, quien conseguirá someter a Atenas y Tebas tras la batalla de Queronea en el año 338 a. C., y Alejandro Magno, que extenderá el territorio macedonio hacia la India, China y Egipto.
Nicómaco, padre de Aristóteles, fue médico personal de Amintas III, padre de Filipo. En el año 367 a. C. muere Nicómaco y Aristóteles es enviado a la Academia de Platón, donde permanece hasta la muerte de su maestro en el 347. Comienzan entonces varios años de peregrinaje durante los cuales llegó a ser tutor de Alejandro. Cuando éste accede al trono, Aristóteles vuelve a Atenas y funda su propia escuela, el Liceo, cuyos miembros son conocidos como peripatéticos (los que caminan). A la muerte de Alejandro en el 323 a. C., Aristóteles decide huir de Atenas por temor a las represalias contra los macedonios, y muere un año después en Calcis, Eubea.
La filosofía de Aristóteles se opone al dualismo ontológico y al intelectualismo moral de su maestro y recupera temas propios de los presocráticos, como el interés por la physis. A diferencia de Platón, Aristóteles concede mayor importancia a los saberes empíricos, como la biología, que al conocimiento matemático, lo que marcará su concepción monista y teleológica de la naturaleza. Algunas de las obras donde plasma su pensamiento son Metafísica, Física, Ética a Nicómaco o Política.
Contexto de Descartes
René Descartes nació en La Haye (Francia) en 1596. Estudió en el colegio jesuita La Flèche, donde se despertó su interés por las matemáticas. En 1618 se alistó en el ejército y participó en la Guerra de los Treinta Años, primero bajo las órdenes de Mauricio de Nassau y luego de Maximiliano de Baviera. En 1628 se instaló en Holanda, donde existía un clima de tolerancia intelectual poco habitual en una época dominada por los conflictos religiosos. Pese a ello, el juicio de la Inquisición a Galileo le previno de publicar su Tratado del mundo. Durante los años que vivió en Holanda, escribió sus principales obras filosóficas. Destacan Discurso del método y Meditaciones metafísicas.
Descartes adquirió fama entre las élites europeas y en el invierno de 1649 se traslada a Estocolmo, a invitación de la reina Cristina. Poco después de llegar, enfermó de neumonía y murió a principios de 1650.
La filosofía cartesiana es una respuesta a las exigencias de la revolución científica, que rompe con la escolástica y la física aristotélica. En un contexto donde la verdad científica se halla diluida entre creencias como la magia, la alquimia y la astrología, se vuelve necesaria la pregunta por los fundamentos del conocimiento y la búsqueda del método científico, sobre el que reflexionan Francis Bacon, Galileo Galilei o el mismo Descartes, quien, además, sienta las bases de la filosofía moderna, orientada hacia la autorreflexión del sujeto, y del racionalismo, con la defensa del innatismo y la orientación matemática de su pensamiento.
Contexto de Kant
Immanuel Kant nació en Königsberg (Prusia) en 1724 y murió en la misma ciudad el 1804. Estudió en la universidad de esta misma ciudad donde profundizó en el conocimiento de la filosofía racionalista de Christian Wolff y la física de Newton.
Después de acabar sus estudios universitarios, se ganó la vida como tutor privado. El año 1755 obtiene el título de doctor en Filosofía y en 1770 consiguió una plaza como profesor de Lógica y Metafísica en la Universidad de Königsberg, que le permitió dedicar más tiempo a desarrollar su obra filosófica.
En cuanto a la filosofía kantiana, intenta resolver las carencias de racionalismo y empirismo. Por un lado, el innatismo racionalista no encaja con el espíritu empirista de las ciencias de la naturaleza. Mientras que el empirismo, acaba rechazando, con Hume, la posibilidad de establecer un conocimiento empírico universal y necesario. ¿Significa esto que las leyes de Newton son particulares y contingentes? En obras como Crítica de la razón pura o Prolegómenos, a toda metafísica futura que quiera presentarse como ciencia, Kant intenta dar respuesta a estas preguntas. El filósofo alemán también escribió otras obras como Crítica de la razón práctica o Metafísica de las costumbres, donde desarrolla su propuesta ética.
a su propuesta ética.