. CONTEXTUALIZACIÓN El Sistema filosófico de Hegel es el último de los «grandes relatos». El «Idealismo Absoluto” que plantea el desarrollo dialéctico de la idea, termina por reconocer el «Espíritu Absoluto” como el → «fin de la Historia», identificando lo «real» con lo «racional». Este no tardó en encontrar críticas en la Izquierda hegeliana, invirtiendo el Idealismo de Hegel, pues éste auspiciaba la disolución del hombre en la idea. 1. Marx, por ejemplo elaborará una → filosofía de corte materialista y señalará que la historia no es racional, sino una continua lucha de clases. 2. Kierkegaard también reaccionará contra el Idealismo, defendiendo la realidad radical del «individuo». 3. Schopenhauer, por otro lado, afirmará que el Mundo es + bien obra de una voluntad ciega e irracional que de un Espíritu Racional. 4. Si Hegel creyó que podía dar una respuesta positiva a la Historia de la Cultura Occidental, Nietzsche representa la negación despiadada del pasado, de las tradiciones, y supone una encrucijada para el hombre europeo, pues considera la Historia como un camino errado de la Humanidad y pretende además invertir los valores occidentales (cristianos). 5. Por otro lado, Nietzsche es el mensajero del Nihilismo europeo. En la filosofía de Nietzsche el gran tema es la «vida«. Vivir está por encima de conocer. La vida ha sido falseada por unos valores racionales, urge la destrucción de tales valores, sustituyéndolos por otros. En consonancia con su vitalismo, cabe destacar el estilo filosófico nietzscheano, que tiene un tono de confesión y es arrogante, en el que predomina el uso de la “metáfora» frente al concepto y el «aforismo», que permite la formulación breve y audaz, pues el autor piensa en relámpagos de ideas. Este estilo responde a su propia biografía marcada por el dolor, la soledad y su enfermedad intermitente, que permite que todas las cosas renazcan ante su espíritu con una fuerza constantemente renovada. En su obra se pueden distinguir 4 etapas: 1. Etapa ROMántica representada por El Nacimiento de la Tragedia (1871) escrita bajo la influencia de la Filosofía de Schopenhauer y la música de Wagner. En ella surge ya la crítica del Racionalismo cientificista, que Nietzsche encuentra por 1 a vez en Sócrates. La tragedia es el verdadero acceso al fondo de la realidad. En el fenómeno de lo trágico ve Nietzsche la verdadera naturaleza de la realidad, el arte trágico conoce la esencia trágica del mundo. A este periodo pertenecen también las Consideraciones intempestivas (1873-1876). Y un breve escrito publicado póstumamente Sobre verdad y mentira en sentido extramoral (1873) 2. Es el periodo «ilustrado» (Filosofía del amanecer). Es un periodo de transición cuyas obras más significativas son: Humano, demasiado humano (1878); Aurora (1881) y La gaya ciencia (1882). Realizará un giro hacia la psicología y la antropología, desenmascara la religión, la metafísica, la moral, considera que el hombre ha organizado su vida alrededor de un espejismo (lo sobrehumano). Define la metafísica como la ciencia que trata sobre los errores fundamentales del hombre (como si estos fueran verdaderos). 3. Filosofía del Mediodía. Aquí Nietzsche alcanza la plenitud de su pensamiento con Así habló Zaratustra, (1883-1885). Dijo Nietzsche “Con él he hecho a la humanidad el regalo más grande que hasta ahora ésta ha recibido”. Este libro dotado de una voz que atraviesa milenios, no es sólo el libro + elevado que existe, es también el libro + profundo. En esta obra están los temas principales de su filosofía: «La muerte de Dios», «el superhombre», «el eterno retorno» y «la voluntad de poder». Con la muerte de Dios muere toda “idealidad” y se da paso al reino del hombre, además es el advenimiento del “Nihilismo”. Además para Nietzsche el tiempo es el eterno retorno de lo mismo, la cumbre del superhombre se basa en saber acerca del tiempo.
4. Periodo crítico (Filosofía del atardecer). A partir de Zuratustra la tarea de los años siguientes está ya trazada: la crítica despiadada de la cultura occidental. Así en Más allá del bien y del mal (1886), La genealogía de la moral (1887). Crepúsculo de los ídolos, El Anticristo y Ecce Homo (su autobiografía intelectual), todos de 1888. A partir de este año le sobrevino la locura, hasta su muerte en 1900, dejando inacabada la voluntad de poder, obra esencial donde se vuelven a analizar desde nuevas perspectivas los temas de su filosofía. Toda la filosofía de Nietzsche puede ser calificada de acuerdo con el subtítulo de su obra cumbre Así habló Zarastustra, un libro para “todos” y para “ninguno». Es una filosofía para «todos» porque nos habla de nosotros mismos, para “ninguno» porque cuestiona los fundamentos de nuestras convicciones más profundas. Los grandes referentes de la filosofía occidental han sido, según Nietzsche: sus grandes traidores. Estos son principalmt: Sócrates y Platón, pues su idealismo esconde la decadencia, el temor ante la vida, el miedo al instinto desordenado y dionisíaco, y la angustia ante la finitud y la muerte. El Cristianismo ha vulgarizado el platonismo y lo ha popularizado, identificándolo con la cultura de Occidente. Por otro lado, la radicalización de la filosofía de Nietzsche constituye un ATAQUE a la modernidad, tanto al Racionalismo como a ciertos aspectos de la Ilustración, pues para él, todo el proyecto moderno es “decadente», en cuanto niega la vida. Por ello, será necesario «desenmascarar» la cultura, detectar la sinrazón de la vida que late bajo la razón de la ciencia, la moral, la filosofía y la religión. Lo que convertirá a Nietzsche, junto con Marx y Freud en «maestro de la sospecha”. Nietzsche utilizará el método genealógico, (una de sus grandes aportaciones a la filosofía del Siglo XX) que influiría en Foucault, Deleuze y Derrida a través de → la crítica al lenguaje, autores que verán necesaria la superación del proyecto moderno para dar paso a → la postmodernidad, pues la historia del Siglo XX en Occidente está marcada por la crisis de la religión, de los valores tradicionales, la ciencia y la moral, lo que confirma alguna de las ideas de Nietzsche. Por ello, será evidente la necesidad de plantear nuevas formas de vida y nuevas ideas que escapan a la razón.