Crítica de la filosofía y antropología en Marx: Un análisis del trabajo, la alienación y la dialéctica materialista

Crítica a la filosofía

Cuando Marx llegó a París, se comprometió con la edición de los Anales Franco-Alemanes. En este contexto, entró en contacto con otros pensadores revolucionarios como socialistas, anarquistas y comunistas, entre ellos, Heine, Proudhon y Bakunin. Posteriormente, conoció a Engels, quien se convertiría en su mayor colaborador. El compromiso social y político de Marx son características definitorias de su pensamiento. Rechazaba el idealismo abstracto de Hegel, la falta de compromiso de Feuerbach y el idealismo utópico de Proudhon.

Junto a Engels, redactó El manifiesto del partido comunista, obra que combina su compromiso y activismo social con la formación de sus ideas esenciales, como la crítica de la economía política, las bases del materialismo histórico y la función revolucionaria del proletariado. Marx buscaba formular un socialismo científico.

Acción y madurez: La Internacional y El Capital

Marx se instaló en Colonia para extender el espíritu revolucionario, pero su fracaso en este objetivo provocó que sus esperanzas en una revolución proletaria se aplazaran y se profundizara en el estudio de la economía capitalista. Como consecuencia, publicó Contribución a la crítica de la economía política, donde además de criticar el capitalismo, aparece el materialismo histórico. Después, comenzó a escribir El Capital, su obra más importante. También fundó la Primera Internacional Socialista, cuya orientación lo enfrentó con otros socialistas y anarquistas. Años después, escribió el segundo tomo de El Capital. Marx recibió la influencia de Hegel, del socialismo utópico y de la economía política, aunque mantuvo una actitud crítica ante estas influencias. Gracias a esta crítica, pudo desarrollar una teoría de la transformación de la sociedad y el pensamiento: teoría y praxis no pueden ir separados, van de la mano en el pensamiento marxista. Engels fue su mayor colaborador.

Antropología

La crítica marxista se concentra en el ser humano hegeliano, que es pensamiento y autoconciencia. Para Marx, el hombre debe ser un ser activo. Por otra parte, critica que la única actividad que cosifica al ser humano sea el trabajo y la economía, robándole su capacidad de tomar decisiones. En cuanto a Feuerbach, critica que su concepción del ser humano es abstracta y teórica, olvidando el lado práctico del ser humano. Marx defiende que el hombre es trabajo y actividad, el hombre se hace a sí mismo en sus propias acciones y decisiones; la práctica es más importante que la teoría. El hombre no debe considerarse solo un animal racional si su pensamiento domina sobre la acción.

Marx retoma el concepto de alienación, heredado de Hegel y Feuerbach, y lo define como aquel proceso o situación social por la cual el hombre se convierte en algo distinto, ajeno o extraño a lo que debería ser y a lo que le corresponde. Esta alienación no se da precisamente en el trabajo, aquello que debería realizar al hombre es precisamente lo que le acaba cosificando, lo esclaviza convirtiéndolo en algo que no es. El trabajo que no humanice al ser humano será un trabajo alienante. Marx afirma que esta alienación se produce por medio de cuatro dimensiones:

  1. La naturaleza: Deja de ser un patrimonio común sobre el cual trabajar y se convierte en una propiedad de otro, en materia prima para comprar y vender, algo totalmente distinto de su verdadero uso.
  2. El trabajo: Deja de pertenecer al proletariado y pasa a pertenecer al burgués, que lo utiliza para generar su interés. Esta medida no es obligatoria, sin embargo, el hombre se vende a sí mismo como trabajo.
  3. Producto del trabajo: Este no le pertenece al trabajador, sino que es la mercancía del burgués, el dinero. Esto fomenta cada vez más la diferencia entre el proletariado y el burgués y provoca esclavismo ante el trabajo.
  4. Sociedad: La alienación del trabajo es el origen de las clases sociales. Genera competencia y desigualdad, todos se ven como rivales. El capitalismo genera egoísmo.

Dialéctica marxista

Marx toma de Hegel el esquema de tesis-antítesis-síntesis, sin embargo, este esquema no explica el desarrollo del espíritu, sino de la materia. La dialéctica marxista representa una inversión del conocimiento hegeliano: para Marx, El Capital es la clave explicativa de la realidad y de su transformación revolucionaria. No solo tiene fines explicativos de la realidad, sino que intenta modificarla. El poder de la dialéctica reside entonces no solo en la capacidad teórica, sino también en la práctica revolucionaria. La dialéctica marxista tiene un doble significado: por un lado, Engels trata de aplicar un esquema materialista a la naturaleza, resultando de esto el materialismo dialéctico; por otro lado, Marx desarrolla el materialismo histórico.

Marx define al hombre por su relación con la naturaleza y la transformación de la materia, por la sociedad que le toca vivir y por la posición que ocupa en la sociedad.

Plusvalía

Es el beneficio que deja un producto, descontando el gasto de producción en medios y salarios.

Superestructura

: Todas las expresiones no materiales de la sociedad humana como leyes, instituciones, creencias..

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