Viejos valores afirman su voluntad de poder, se trata de una posición moral o amoral. A través de las metáforas de Nietzsche vemos como el camello se transforma en león, pero este no es capaz de crear valores y se transforma en niño, estas son las 3 transformaciones del espíritu. Solo podremos crear nuevos valores si olvidamos nuestra civilización. Nietzsche también critica a la religión, se concreta en la necesidad de olvidar a Dios. Nietzsche vio que toda moral exige la existencia de Dios como necesaria, por eso para destruir la moral es necesario destruir a Dios. Si Dios no existe ya no hay ningún ser superior que nos pueda imponer sus leyes, el hombre ya no tiene responsabilidades. La muerte de Dios es una gran ganancia para Nietzsche, pues toda la moral occidental es puro nihilismo (negación de lo real, esencia de la tradición platónico-cristiana). Aunque la filosofía de Nietzsche es presentada como nihilista, tiene de positivo la afirmación de este mundo como único valor, un mundo que no se dirige a ninguna parte, que carece de fin, pero que solo cabe una actitud ante él: afirmar la vida y la voluntad de poder. Con la idea del eterno retorno Nietzsche quiere afirmar este mundo, no podemos huir a otro sino ser fieles a este y decir sí a la vida. En conclusión, la vida es la única realidad valiosa, que hay que afirmar por sí misma. Dionisio nos brinda la ruptura con todas las barreras y Zaratustra nos libra de la moral, de Dios. Surge así el superhombre que no lleva carga, nuestra civilización ha sido olvidada y podemos partir de cero para crear nuevos valores. Ya solo queda voluntad de poder y el eterno retorno: una fidelidad absoluta a este mundo, a la vida, a la voluntad de poder.
La Crítica de Nietzsche a la Filosofía
La crítica de Nietzsche a toda la tradición filosófica occidental se desarrolla en 3 direcciones: a la metafísica tradicional, a la moral y a las ciencias positivas.
Crítica a la Ontología Tradicional
Nietzsche acusa a la tradición filosófica occidental de haber mentido acerca del ser de las cosas:
- Para Nietzsche, la realidad, el ser, es cambio y devenir. La tradición filosófica ha defendido el mundo real, el mundo del ser, el mundo aparente y falso.
- Según Nietzsche, lo superior debe explicarse a partir de lo inferior, hay que explicar al hombre como evolución del animal y no como creación de Dios, y a este como invención del hombre y no como algo eterno.
Vemos como la metafísica tradicional se asienta en 2 errores básicos:
- Que las cosas de un valor supremo tienen que tener un origen propio y pueden derivar del otro mundo, de Dios.
- La ontología tradicional es estática, así el ser tiene su propio mundo, lo que el hombre conoce es mera apariencia. (Ser = unicidad)
Resentimiento y Venganza
La ontología tradicional se basa en los prejuicios de los filósofos contra las manifestaciones de la vida: la muerte, la vejez, el cambio… esto horroriza al filósofo y este lo niega creando lo estático. Los motivos que han tenido los filósofos para proceder a semejante falsificación de la realidad son, en opinión de Nietzsche, el miedo y el odio. El ser, en su multiplicidad, aparece como rico y atrayente, pero esa multiplicidad tomada en serio muestra el ser como problemático y terrible. El mundo verdadero, dominado por las realidades inferiores, constituye una especie de abismo que produce angustia al hombre y ante el cual retrocede. El filósofo pretende refugiarse en un mundo dotado de unidad, este transforma su miedo en odio dirigido contra la vida. Entonces da rienda suelta a su resentimiento, a su deseo de venganza, proclamando como verdaderas las fórmulas mentirosas de la filosofía: mundo real = mundo unitario, superior = anterior, inferior = posterior.
Crítica a la Moral
Nietzsche considera la moral de inspiración platónica como antinatural, por ir contra los instintos vitales. La moral platónico-cristiana es una condena a la vida. Pone el centro de gravedad del ser humano en el mundo de las ideas. La crítica de Nietzsche al platonismo cristiano es la idea de un orden moral del mundo que sirva para dirigir la historia del ser humano. Por el uso que hace de las mentiras, la tradición filosófica es pesimista y nihilista. Nihilismo en Nietzsche hay que entenderlo de 2 maneras diferentes:
- Nihilismo de la tradición filosófica, es el que critica y combate.
- Nihilismo de Nietzsche con un sentido positivo y activo, aquí la negación está al servicio de una afirmación superior.
Si Nietzsche rechaza los valores de la tradición filosófica es para afirmar toda una serie de nuevos valores, aquellos que se derivan de concebir el ser como vida, como multiplicidad. Porque lo que ha muerto es la idea de Dios.
Crítica a la Epistemología Tradicional
Para Nietzsche, la tradición filosófica occidental es decadente porque es racionalista. La razón niega el ser, transformando la multiplicidad en unidad y permanencia. La tradición, apoyándose en el concepto de razón, ha desarrollado los diferentes dominios de la filosofía. La crítica al concepto de razón se centra en 2 aspectos:
- Nietzsche adopta un punto de vista empirista en la teoría del conocimiento, establece la superioridad de la experiencia sensorial sobre la razón: los sentidos nos muestran el mundo real mientras que la razón falsifica creando un mundo engañoso.
- La crítica a la razón supone un análisis del lenguaje ya que es quien falsifica la realidad. El hombre tiene que caer en el error porque es víctima del lenguaje, ya que este nos confunde al identificar las palabras con las cosas y nos engaña por su funcionamiento a la hora de formar conceptos. El hombre, dejándose guiar por el lenguaje, ha ido construyendo el mundo. A partir de la palabra «yo» se crea el concepto de voluntad, de sustancia. Después, el hombre proyecta este esquema al resto de la realidad; así, por una parte vemos acciones y por otra vemos sustancias. Por eso dice Nietzsche que el error acerca del ser tiene a favor suyo el lenguaje, y que no podremos deshacernos de Dios mientras seamos víctimas del lenguaje, mientras sigamos creyendo en la gramática.