Análisis de la Idea de Causa

Según Hume, todos los objetos de la razón o investigación humana pueden dividirse en dos clases: relaciones de ideas y cuestiones de hecho. La primera clase comprende las ciencias matemáticas, donde cualquier afirmación es cierta intuitiva o demostrativamente. La evidencia de la verdad de las proposiciones que se refieren a cuestiones de hecho no es de la misma naturaleza. Siempre es posible lo contrario de toda cuestión de hecho; nunca implica contradicción. Todos los razonamientos sobre cuestiones de hecho se basan en la relación de causa-efecto.

Idea de Causa

Toda idea debe proceder de una impresión. Si no es posible asignar ninguna impresión a una idea, entonces las sospechas se confirman y se está autorizado a rechazar el término en cuestión. La idea de causalidad podría ser uno de estos términos vacíos. Sin embargo, negar la existencia de una idea legítima de causalidad resulta problemático, ya que todas las ciencias sobre hechos se apoyan en esta idea.

Los objetos que consideramos causas y efectos son contiguos, y hay una prioridad temporal de aquello que llamamos causa sobre aquello que llamamos efecto. Sin embargo, estas dos relaciones no nos proporcionan todavía la idea completa de causación. La relación decisiva con respecto a la relación causal es la de conexión necesaria.

Cuando un objeto o hecho natural se presenta por primera vez, nos es imposible descubrir o suponer, sin la ayuda de la experiencia, qué hecho resultará. Ni la sola razón ni la experiencia única nos pueden descubrir ningún tipo de conexión necesaria entre un hecho y otro. Dos hechos se dan en conjunción constante, y ello nos autoriza a predecir uno a raíz de la aparición del otro. Entonces, llamamos al primero causa y al segundo efecto, y nos figuramos que hay una conexión entre ellos.

La experiencia de la conjunción constante entre hechos ha hecho surgir en nosotros la idea de conexión necesaria. El origen de la idea de causa habrá que buscarla en las circunstancias peculiares que se encuentran en la experiencia constante y que están ausentes en la experiencia singular.

En el caso de una repetición de experiencias similares, la comparecencia de un hecho lleva nuestra mente a esperar su correspondiente hecho y a creer que le seguirá. Es decir, sentimos en nuestra mente una conexión entre los hechos, una propensión a pasar de uno a otro.

La conexión necesaria no nos viene dada por la experiencia, sino producida en nuestra mente. La idea de causa ha pasado de tener un fundamento ontológico en la naturaleza de las cosas a tener un fundamento psicológico en la naturaleza (costumbre) de nuestra mente.

El Conocimiento de la Naturaleza Humana

Para Hume, el conocimiento de la naturaleza humana debe partir de los datos empíricos, utilizando un método experimental basado en la experiencia y la observación. Debemos atenernos a los datos tal como se presentan a través de la introspección y de la observación de la vida y la conducta humana. La investigación de los procesos psicológicos humanos y del comportamiento moral del hombre es esencial para descubrir sus principios y causas.

Diferencia con Descartes

En esta cuestión del método es donde se ve más claramente la diferencia con el racionalismo de Descartes, que se basa en las matemáticas, y el empirismo de Hume, que se basa en las ciencias naturales.

Principios del Conocimiento

• Principio empirista: Todos los materiales del pensar se derivan de nuestra percepción interna o externa. La razón no puede engendrar por sí misma nada original.
• Principio de inmanencia: Nada puede estar presente en la mente sino es una imagen o percepción.
• Principio de copia: Todas nuestras ideas no son más que copias de nuestras impresiones.
• Principio de las ideas generales: Todas las ideas generales abstractas no son más que ideas particulares ligadas a un término general.
• Principio de asociación de ideas: Las ideas no se mantienen desconectadas en nuestra mente, sino que se asocian según semejanza, contigüidad y causa-efecto.
• Principio de discriminación: Ninguna idea se valida, ni siquiera existe, sino se le asigna la impresión o impresiones de las que se copia.

Semejanzas y Diferencias entre Impresiones e Ideas

Las impresiones son los datos inmediatos de la experiencia, como las sensaciones o las pasiones. Las ideas son copias o imágenes de las impresiones.

Relación 1: Las ideas simples corresponden siempre a impresiones simples, y las ideas complejas pueden corresponder a impresiones complejas o bien pueden provenir de operaciones con ideas simples.

Relación 2: Las impresiones derivan de nuestros estados internos, y de ellas se derivan las ideas. Una vez que la impresión ha cesado, una copia suya permanece en nuestra mente. A esta copia se le denomina idea, y puede producir nuevas impresiones (por ejemplo, aversión), que constituyen impresiones de reflexión.