1. Definición de la Filosofía
A. Del Mito al Logos
Características del Mito o Pensamiento Arcaico
- Infundado
- Arracional
- Comprometido emocionalmente
- Antropomórfico
La filosofía se puede definir de diferentes maneras conforme a la propuesta o sistema de un autor o una escuela. La definición más clásica es la que atiende al significado literal de la palabra: amor a la sabiduría. Esta surgió entre los siglos VII y VI a. C. en Asia Menor, específicamente en la Grecia Arcaica, en el denominado milagro griego.
A. El Mito
El mito es una explicación fantasiosa e imaginativa de la realidad o parte de ella. A veces, se unen a estas características la convicción de magia. Los griegos emplearon estas argumentaciones míticas para poder ofrecer una representación del mundo real.
El mito es infundado porque no tiene fundamento real, es decir, los hechos observados no se corresponden con la explicación que ofrece el mito. En consecuencia, el mito es una invención fantasiosa.
Los mitos son, por definición, arracionales, excluyen de sus explicaciones el criterio racional. Los argumentos que se ofrecen no están bajo el amparo de la racionalidad. Al ser una invención de la fantasía y la imaginación, lo que menos importa es que la explicación tenga una estructura razonable.
Los mitos dan uso del sentimiento y la emoción para explicar la realidad, de ahí que los mitos se comprometan emocionalmente con la historia que narran o explican.
Los mitos son antropomórficos porque emplean la figura y los sentimientos humanos para dar la explicación de la realidad. En el fondo, la realidad se explica a raíz del hombre.
El Logos
Logos es el lenguaje racional (razón, estructura de la realidad). El Logos supone un cambio de orientación que se ofrece en la explicación de la realidad, visible en sus cuatro características:
- Fundado: El logos hace corresponder la realidad de los hechos observados con las explicaciones que se ofrecen.
- Racional: Al contrario que en el mito, el logos se fundamenta en la racionalidad y no en la fantasía.
- Neutral: La explicación racional o logos es neutra con respecto a los sentimientos y las emociones.
- No Antropomórfico: Elude la participación del hombre (su figura o sus sentimientos) en las explicaciones de la realidad.
2. La Ciencia y la Filosofía
La ciencia es conocimiento de la realidad que explica lo que sucede y predice lo que va a suceder conforme a unos criterios de certeza y seguridad. La ciencia busca, en su origen, un conocimiento fiable de la realidad observable, es decir, no va más allá del mundo natural. En la ciencia, el lenguaje es objetivo, preciso y basado en los hechos.
La filosofía es conocimiento, pero no es ciencia (tal cual lo reconoce Heidegger en su libro Introducción a la Filosofía). La filosofía se afana en explicar la realidad y, sobre todo, interpretarla conforme a unas ciencias más o menos subjetivas. No busca un lenguaje objetivo e independiente de la realidad, sino una visión propia de ella. La filosofía es un intento de reducir la complejidad de la realidad y el mundo a una visión particular.
Características de la Ciencia
- Sectorial: Es decir, actúa por campos de conocimiento.
- Normativa: La ciencia busca leyes universales que puedan explicarla y, a la vez, controlarla.
- Sin compromiso: La ciencia no se compromete con el objeto de su investigación, es decir, no hay ciencia ‘buena’ o ‘mala’ por los resultados que se obtengan.
- Formales e informales: Son aquellas ciencias que estudian realidades concretas observables, sean del mundo natural o del mundo humano.
- Subdivisión: Se subdividen en dos: por un lado, las naturales, cuyo objeto de estudio son los aspectos físicos de la realidad (por ejemplo, física, biología…). En el lado restante, están las humanas, que estudian al hombre y su acción en la realidad.
- Ciencias fuertes y débiles: Hoy, esta división se mantiene, aunque con un matiz: las matemáticas, la lógica y las ciencias naturales son consideradas ciencias fuertes (ya que tienen mayor capacidad predictiva); las ciencias humanas son, por el contrario, ciencias débiles, ya que es menor su capacidad predictiva.
3. El Método Científico
El método es una palabra de origen griego que significa camino, senda, estrategia. Con el transcurrir del tiempo, el método en la ciencia se ha convertido en el proceso o procedimiento por medio del cual se hace aquella y se descubren verdades. Ha habido y hay infinidad de métodos científicos, pero se pueden reducir a dos tipos básicos.
Método Hipotético-Deductivo
Es el método más habitual en las ciencias formales, pero también es visible en parte de las ciencias naturales, sobre todo en física, química y biología.
Este sistema tiene dos partes: una hipótesis, a partir de la cual surge la segunda parte. Por un proceso deductivo descendente, se proponen diferentes teoremas que, sucesivamente, son contrastados por los experimentos. Así, tendremos teoremas de primer rango, luego los de segundo rango, hasta llegar a una o varias conclusiones que pasan a ser denominadas leyes deductivas y que son generalidades de una realidad concreta.
Método Inductivo-Selectivo
Es el propio o más habitual en las ciencias informales y, en parecido a la forma anterior, se divide en dos procesos de carácter ascendente. Se parte de una serie de observaciones sobre hechos particulares, de los cuales se induce (gracias a experimentos de contraste) nuevos enunciados que son sometidos nuevamente a experimentos hasta llegar a una regularidad final o ley inductiva.