René Descartes: El Fundador del Pensamiento Moderno
René Descartes fue un destacado matemático, científico y filósofo racionalista que rechazaba los argumentos de autoridad y, en cambio, afirmaba el poder de la razón para encontrar la verdad. Con este autor comienza el pensamiento moderno auténtico, siendo el que da énfasis en el papel del sujeto como punto de partida para la reflexión filosófica. Descartes desconfiaba de lo pensado por los antiguos autores, y lo consideraba lleno de errores, por lo que se propuso encontrar un camino firme y seguro hacia la verdad, estableciendo un punto de partida indudable sobre el cual no pudiera haber ninguna incertidumbre.
La Duda Metódica y el Cogito Cartesiano
Para ello, diseña un método que permite lograr verdades firmes y seguras sobre las que construir nuestros conocimientos. Hace uso de la duda metódica y elimina todos los saberes y creencias que puedan ser falsos, además de desconfiar de los sentidos y del mundo que nos rodea, ya que a veces, en sueños, el mundo parece real y solo es una ilusión. Tampoco nos podemos fiar de los razonamientos, ya que a veces cometemos errores. Descartes propone la hipótesis de que existe un genio maligno que es capaz de engañarnos y confundirnos hasta en lo que creemos verdadero, con el fin de encontrar una verdad absolutamente indudable, ya que no sabemos si estamos siendo dominados por este genio.
Después de esta deconstrucción de lo que creemos real, Descartes encuentra la primera verdad indudable: si yo estoy dudando y tratando de encontrar verdades, es decir, si pienso, puedo estar absolutamente seguro de que existo, lo que se denomina como «el cogito cartesiano«. Esta idea, clara y distinta, se alcanza mediante la intuición, que es un conocimiento inmediato y evidente que la mente capta sin necesidad de razonamiento.
Las Ideas Innatas y la Existencia de Dios
Una vez admitido, en la fase de solipsismo, que la única verdad segura es que existo y, por ende, encontrada la base incuestionable del sujeto pensante, Descartes clasifica las ideas presentes en la conciencia en tres grupos:
- Ideas adventicias: representaciones mentales elaboradas a partir de lo que percibo por mis sentidos de lo que creo que es el mundo exterior.
- Ideas facticias: las que mi mente ha elaborado por sí misma sin haberlas visto.
- Ideas innatas: no pueden percibirse con los sentidos ni han sido elaboradas por mí, sino que se encuentran en mi interior desde que nací.
Tanto la idea del sujeto pensante como la de Dios son ideas innatas para Descartes. La idea de Dios se corresponde con la de un ser infinito, todopoderoso, omnisciente, eterno y perfecto, reconocida por la intuición, siendo así una idea clara y distinta. Descartes descarta que la idea de Dios sea facticia, ya que le habría sido imposible crear por sí mismo la idea de un ser infinito, y también descarta que sea adventicia, ya que no es algo captado por los sentidos. Concluye que, si existe en su interior la idea de un ser perfecto (Dios), al ser él imperfecto, no pudo haber creado esa idea por sí mismo, por lo que debe haber sido puesta en él por un ser perfecto, es decir, Dios.
Además, para esta idea da otros dos argumentos. El primero, defendido con la causalidad, dice que todo lo que existe tiene una causa y que tanto su existencia como la idea de Dios en él deben haber sido causadas por algo. Como no puede ser la causa de su propia existencia, debe haber un ser supremo que lo creó: Dios. El otro argumento que usa es el ontológico, que dice que si Dios es un ser perfecto, debe existir, porque la existencia es una perfección y un Dios que no existe no sería perfecto, lo que sería una contradicción; por lo tanto, Dios necesariamente existe.
La existencia de Dios garantiza que todo aquello que mi entendimiento capta de forma clara y distinta es verdadero. Lo que captamos de forma oscura y confusa, que no debería, se llama error.
El Método Cartesiano
El método cartesiano es el procedimiento que René Descartes propuso para alcanzar el conocimiento verdadero. Se basa en cuatro reglas fundamentales:
- Evidencia: aceptar solo ideas claras y distintas, es decir, aquellas que sean evidentes y no dejen lugar a la duda.
- Análisis: dividir los problemas en partes más simples para entenderlos mejor.
- Síntesis: ordenar los pensamientos desde los más simples hasta los más complejos para reconstruir el conocimiento.
- Repaso: hacer revisiones constantes para asegurarse de no haber cometido errores.
Según Descartes, hay dos operaciones fundamentales del pensamiento para alcanzar el conocimiento verdadero:
- Intuición: captación inmediata y clara de una verdad sin necesidad de razonamiento.
- Deducción: proceso de razonamiento mediante el cual se llega a conclusiones a partir de principios evidentes, que se basa en encadenar verdades ya conocidas para descubrir otras, como en las matemáticas y la lógica.
Las Tres Sustancias en la Filosofía de Descartes
René Descartes distingue tres sustancias fundamentales en su filosofía:
- Sustancia infinita (Dios): ser perfecto, eterno y causa de todo lo que existe.
- Sustancia pensante (res cogitans): la mente o el alma, cuya esencia es el pensamiento y no ocupa espacio físico.
- Sustancia extensa (res extensa): la materia, caracterizada por su extensión en el espacio y su sujeción a las leyes mecánicas.
El Dualismo Cartesiano y la Glándula Pineal
Esta división da origen al dualismo cartesiano, donde el ser humano es una unión de dos sustancias distintas: la mente (res cogitans) y el cuerpo (res extensa). La mente es inmaterial y se encarga del pensamiento, mientras que el cuerpo es material y ocupa espacio. Sin embargo, surge el problema de cómo dos sustancias tan diferentes pueden interactuar. Descartes propone que esta unión ocurre a través de la glándula pineal, un punto del cerebro donde la mente influye en el cuerpo y viceversa. Pero, dado que la mente y el cuerpo son completamente distintos, su interacción solo es posible porque Dios, como sustancia infinita, lo hace posible.
Definiciones Clave
- Alma (Res cogitans): sustancia espiritual finita (porque tiene comienzo) y simple (porque no se descompone en partes y, por lo tanto, es inmortal). Es independiente del cuerpo y no necesita de él para existir. Es principio de conciencia. Según Descartes, el alma es más fácil de conocer que el cuerpo.
- Cuerpo (Res extensa): sustancia material, delimitada por la figura, que ocupa un espacio y se puede pesar y medir. Tiene un funcionamiento semejante al de una máquina, ya que se compone de partes materiales que se mueven y, por lo tanto, todo cuerpo extenso es limitado, finito y mortal.
- Dios (Res infinita): Ser Infinito que ha puesto en mí la idea de infinitud. Su presencia en mi mente demuestra su existencia, y al tener todas las perfecciones, no le puede faltar la existencia. Además de perfecto, omnipotente y bueno, tiene el atributo de la veracidad, ya que Dios no me engaña y es principio y garantía de verdad.
- Extensión: todo lo material, sensible o corporal que tiene anchura, altura y profundidad, y además es matematizable, pudiéndose calcular, medir y encuadrar en el espacio. Es el atributo esencial del mundo que, al estar compuesto de partes materiales, es limitado, se descompone y muere. Lo extenso no piensa y lo pensante no es extenso.
- Mundo: el mundo es sustancia extensa, es una realidad material no pensante y finita. Esta extensión corpórea geométrica es matematizable y se asemeja a una gran máquina compuesta por máquinas, denominado mecanicismo universal, que es la unión de extensión más movimiento. El mundo creado existe realmente porque Dios es veraz y no me engaña, así que es una idea innata, clara y distinta.
- Sustancia: aquello que existe por sí mismo y no necesita de ninguna otra cosa para existir. Es una especie de base o sustento en el cual tienen lugar las propiedades y cualidades de las cosas. Se distingue en tres tipos de sustancia: la sustancia pensante (yo), la sustancia infinita (Dios) y la sustancia extensa (mundo).
- Intuir: que la mente capte de forma clara y distinta.
- Hombre: unión accidental de dos sustancias, el pensamiento (alma) y la extensión (cuerpo). Alma y cuerpo son dos sustancias independientes, pero están conectadas a través de la glándula pineal (dualismo). El hombre es un ser libre que debe dominar las pasiones de su alma y, a la vez, es como una máquina pensante.
- Solipsismo: admitir que la única verdad segura es que existes.
- Mecanización: concepción que entiende el funcionamiento de los cuerpos como el de una máquina, teniendo piezas que se mueven con otras piezas.