Descartes, Racionalismo y Empirismo: Fundamentos Filosóficos de la Modernidad

Disertación: La Modernidad y el Proyecto Ilustrado

Disertación: La Modernidad y el proyecto ilustrado representan un cambio radical en la historia de la filosofía, donde la pregunta por el conocimiento y la verdad toma protagonismo. Antes, durante la Edad Media, el conocimiento estaba profundamente vinculado a la teología, con pensadores como Tomás de Aquino que buscaban reconciliar fe y razón. Con el Renacimiento y la Ilustración, la autonomía de la razón humana y la observación empírica adquieren relevancia.

Descartes y el Giro Moderno

Descartes es una figura clave en este giro, ya que plantea la cuestión del conocimiento en términos radicalmente nuevos. En su búsqueda de certeza, establece la duda metódica como punto de partida, llegando al cogito ergo sum («Pienso, luego existo»), la primera verdad indudable. Este enfoque inaugura la Modernidad filosófica, al situar al sujeto pensante en el centro del conocimiento. A partir de ahí, Descartes argumenta que todo conocimiento fiable debe pasar por la razón, mientras que los sentidos pueden ser engañosos. Aunque esto lo aproxima a los ilustrados, su racionalismo contrasta con la visión empírica de pensadores como Locke y Hume, quienes defendían que todo conocimiento deriva de la experiencia sensorial.

Kant y los Límites del Conocimiento

En la Ilustración, Kant también recoge esta preocupación por los límites del conocimiento, afirmando que si bien la razón humana puede conocer el mundo, solo lo hace a través de las categorías de la mente, sin acceder a la realidad en sí misma. De este modo, la filosofía moderna se enfoca en entender hasta qué punto el ser humano puede conocer la verdad.

En resumen, Descartes y otros filósofos de la Modernidad replantearon la cuestión de la verdad desde una perspectiva racional, marcando el inicio de la Ilustración y el desarrollo de nuevas formas de entender el conocimiento y sus límites.

Características Generales del Racionalismo

Características generales del Racionalismo: El racionalismo es una corriente filosófica del siglo XVII, contemporánea al empirismo, lo que lleva a una inevitable comparación entre ambas. Mientras que Descartes es la figura central del racionalismo, en el empirismo destacan Locke y Hume. Ambos coinciden en colocar al sujeto como el núcleo de toda acción, siendo él quien establece la veracidad o falsedad de cualquier afirmación. Además, comparten la idea de que no conocemos las cosas directamente, sino que percibimos representaciones de estas en nuestra mente, lo que llamamos ideas.

Diferencias Clave entre Racionalismo y Empirismo

Sin embargo, existen diferencias fundamentales entre el racionalismo y el empirismo. Para los racionalistas, el conocimiento se adquiere sólo a través de la razón, ya que los sentidos pueden engañarnos. Descartes, por ejemplo, sostiene que las ideas innatas, aquellas con las que nacemos, son la base del conocimiento, y que las matemáticas son el paradigma perfecto para entender el mundo debido a su precisión y claridad. A diferencia del empirismo, que subraya los límites del conocimiento humano, el racionalismo considera que el conocimiento es ilimitado, siempre y cuando se acceda a él mediante la razón pura. Además, los racionalistas proponen una concepción mecanicista del universo, donde todo funciona como una máquina, regida por leyes fijas y universales, comprensibles a través del pensamiento racional. (211)


El Método de Descartes

El método de Descartes: El método de Descartes es un enfoque filosófico desarrollado con el objetivo de establecer una base sólida para el conocimiento, inspirada en la precisión de las matemáticas. Descartes plantea que, para descubrir la verdad, es necesario seguir un camino racional basado en dos principios clave: la intuición y la deducción. La intuición es esa «luz natural» que nos permite ver algo como cierto de manera inmediata y sin ninguna duda. Por otro lado, la deducción implica establecer una cadena lógica de ideas conectadas, donde cada eslabón conduce a conclusiones racionales necesarias.

Las Cuatro Reglas del Método Cartesiano

En su obra más famosa, el Discurso del método, Descartes presenta cuatro reglas fundamentales para guiar este proceso. La primera es la regla de la evidencia, que nos lleva a aceptar únicamente lo que se presenta de manera clara y distinta, es decir, sin posibilidad de error. Luego, propone la regla del análisis, que consiste en descomponer el conocimiento en partes más simples, buscando llegar a las verdades más fundamentales, como su célebre afirmación «Pienso, luego existo». La tercera regla es la síntesis, en la que se reconstruye el conocimiento a partir de estas verdades simples para llegar a conclusiones más complejas. Finalmente, la enumeración, o revisión, consiste en revisar y comprobar cada paso del proceso para asegurarse de no haber cometido errores en el razonamiento. (220)

Intuición y Deducción. Análisis y Síntesis

Intuición y deducción. Análisis y Síntesis: El método de Descartes se basa en cuatro reglas fundamentales: evidencia, análisis, síntesis y enumeración, todas ellas pensadas para conducirnos a un conocimiento verdadero y seguro. La evidencia implica aceptar solo lo que se presenta de manera clara y distinta, es decir, sin posibilidad de duda. El análisis consiste en descomponer el conocimiento en elementos más simples para encontrar verdades fundamentales, mientras que la síntesis permite reconstruir el conocimiento, deduciendo nuevas conclusiones a partir de estas verdades simples. Finalmente, la enumeración consiste en revisar y comprobar cada paso del razonamiento.

Relación entre Análisis, Síntesis, Intuición y Deducción

El análisis y la síntesis se corresponden con los conceptos de intuición y deducción. El análisis está vinculado a la duda metódica de Descartes, que exige cuestionar todo hasta encontrar algo indudable. Este proceso conduce a la intuición, que nos permite reconocer de manera inmediata lo que es claro y distinto, como el famoso «Pienso, luego existo». La síntesis, por su parte, se relaciona con la deducción, ya que implica partir de estas verdades indudables para construir un conocimiento más complejo, asegurándonos de que cada paso esté fundamentado en la razón.

Solo a través de la intuición, según Descartes, podemos definir algo como claro y distinto, lo que constituye la primera evidencia en su método filosófico. A partir de ahí, la deducción nos permite ampliar el conocimiento basándonos en estas certezas fundamentales. (228)


La Duda Metódica y la Primera Certeza: El Cogito

La duda metódica y la primera certeza: El cogito: La duda metódica de Descartes surge en el contexto de su método filosófico, en el cual el análisis y la intuición son claves. En la segunda regla de su método, el análisis, Descartes busca una afirmación que sea absolutamente indudable. Para encontrar esta certeza, adopta la duda como herramienta, cuestionando todo lo que puede ser puesto en duda.

Características de la Duda Metódica

Esta duda metódica es radical y universal, ya que cuestiona toda certeza previa, pero no es un escepticismo definitivo, sino provisional y constructivo, ya que tiene como objetivo encontrar una base sólida para el conocimiento. Además, es teorética, lo que significa que se limita al ámbito de la reflexión filosófica, sin extenderse a la vida práctica.

Justificación y el Cogito

Descartes justifica su duda por tres razones fundamentales: primero, los sentidos nos pueden engañar; segundo, no siempre podemos distinguir el sueño de la vigilia; y tercero, plantea la hipótesis de un genio maligno que podría estar manipulando nuestras percepciones. Al final de este proceso de duda, llega a una verdad indudable: «Pienso, luego existo» (el cogito). Esta es la primera certeza que Descartes encuentra, y no se trata de una deducción, sino de una intuición inmediata, algo que se ve claro y distinto sin necesidad de justificación adicional. El «luego» en esta frase no implica una deducción, sino una verdad evidente que se presenta de forma directa. (230)

Clases de Ideas: Adventicias, Facticias e Innatas

Clases de ideas: Adventicias, facticias e innatas: En el método de Descartes, tras la fase de evidencia y análisis, se pasa a la síntesis, que corresponde a la deducción. En esta etapa, el «yo», que Descartes define como Res Cogitans (una cosa que piensa), reflexiona sobre las ideas que encuentra en su mente. Todas las ideas tienen algún tipo de realidad, ya que existen en la mente, pero Descartes señala que no todas las ideas poseen la misma realidad.

Tipos de Ideas Según Descartes

Según su origen, Descartes distingue tres clases de ideas: adventicias, facticias e innatas. Las ideas adventicias son aquellas que provienen de la experiencia externa, es decir, las que recibimos a través de los sentidos. Las ideas facticias, por su parte, son construcciones de la mente que se forman a partir de las ideas adventicias, combinándolas y modificándolas para crear nuevas representaciones. Finalmente, las ideas innatas son aquellas que ya estaban en el «yo» desde el principio, antes de cualquier experiencia. Estas ideas son claras y distintas, lo que significa que son evidentes para la razón y no necesitan ser derivadas de la experiencia o de la combinación de otras ideas.

Las ideas innatas, como la idea de Dios o los principios matemáticos, representan para Descartes el conocimiento más puro y confiable, ya que no dependen de los sentidos, que pueden engañarnos. (220)


La Existencia de Dios y el Mundo

La existencia de Dios y el mundo: Después de haber alcanzado la certeza del cogito («Pienso, luego existo»), Descartes reflexiona sobre las ideas que encuentra en su mente, destacando la idea de infinito. Esta idea le lleva a una prueba de la existencia de Dios. Descartes argumenta que la idea de infinito no puede provenir de su mente limitada, por lo que debe haber sido colocada en él por un ser verdaderamente infinito: Dios. Esta es la primera prueba de la existencia de Dios, basada en la objetividad de las ideas.

Pruebas de la Existencia de Dios y la Realidad del Mundo Sensible

La segunda prueba que ofrece Descartes es una variación del argumento ontológico de San Anselmo. Según este argumento, la idea de Dios es la de un ser infinitamente perfecto, y si es perfecto, debe tener todas las perfecciones, incluida la existencia. Así, la propia idea de Dios implica necesariamente su existencia, de la misma manera que la idea de un triángulo implica tener tres ángulos.

La existencia de Dios también juega un papel crucial en la garantía de la realidad del mundo sensible. Según Descartes, Dios, siendo un ser perfecto, no nos engañaría. Por lo tanto, el mundo sensible que percibimos, constituido por cuerpos extensos (res extensa), es real. Estos cuerpos pueden ser medidos y cuantificados siguiendo principios matemáticos. Además, Descartes introduce la idea del mecanicismo, afirmando que el movimiento de los cuerpos sigue leyes mecánicas, y la glándula pineal como el punto de interacción entre el cuerpo y el alma, facilitando la comunicación entre ambas sustancias. (248)

Características Generales del Empirismo

Características generales del Empirismo: El empirismo es una corriente filosófica que se desarrolló en el siglo XVII, siendo contemporáneo al racionalismo, lo que generó un inevitable choque entre ambas posturas. Mientras que el empirismo fue defendido principalmente por pensadores ingleses como Locke y Hume, el racionalismo fue promovido por filósofos franceses como Descartes. Ambas corrientes coinciden en que el sujeto es el núcleo de toda acción y es él quien establece la veracidad o falsedad de los hechos. Además, ambas sostienen que no conocemos las cosas directamente, sino las ideas que tenemos de ellas, las cuales son representaciones de la realidad en nuestra mente.

Diferencias Clave entre Empirismo y Racionalismo

Sin embargo, existen diferencias clave entre el empirismo y el racionalismo. Para los empiristas, todo el conocimiento proviene de la experiencia; es decir, el mundo sensible es la fuente de todo saber. La mente, según esta postura, es una tabula rasa, una hoja en blanco que se va llenando con las experiencias que vamos viviendo. A diferencia del racionalismo, los empiristas rechazan la existencia de ideas innatas.

El Empirismo y las Ciencias Experimentales

El modelo o paradigma para el empirismo son las ciencias experimentales, que se basan en la observación y en la experimentación como fuentes de conocimiento. Además, los empiristas sostienen que el conocimiento humano es limitado; no podemos conocerlo todo, ya que dependemos de nuestras experiencias sensoriales. Finalmente, a diferencia de los racionalistas, el empirismo no adopta una concepción mecanicista del mundo, sino que se centra en cómo la experiencia directa influye en la construcción del conocimiento. (247)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *