El Discurso del Método y la Filosofía Cartesiana
El texto que estamos comentando pertenece a la cuarta parte del Discurso del Método (1637). Es la primera obra filosófica importante escrita en francés, su lengua vernácula. Por primera vez en ciencia y filosofía, las obras se publican en un idioma distinto del latín o son traducidas, ya que «la facultad de juzgar bien y de discernir lo verdadero de lo falso -la razón- es mutuamente igual en todos los hombres ya que es innata a todos ellos».
El título completo es «Discurso del método para dirigir bien la razón y buscar la verdad en las ciencias». Es una exposición resumida y en forma de autobiografía intelectual de lo esencial de la filosofía cartesiana. La obra se divide en seis partes, de las que resultan más interesantes la primera, la segunda y la cuarta.
Las Tres Partes Fundamentales del Discurso
La primera parte critica la situación de la ciencia en la época y expone la necesidad de que se libre de la autoridad y cualquier otro vínculo que le impida su constitución autónoma.
La segunda, tras exponer la necesidad de la unidad y coherencia en toda ciencia, critica al silogismo y expone las reglas del método.
La tercera establece su llamada moral provisional a la que alude mientras dura la duda metódica. En la cuarta, a la que pertenece el texto, hace una síntesis de una metáfora: duda metódica, cogito (el yo y las ideas), el criterio de certeza, Dios y la duda. En la quinta y sexta habla de algunas cuestiones de la física y medicina y explica el porqué de su obra.
Otras Obras de Descartes
Otras obras del autor son:
- Reglas para la dirección del espíritu (1628 y publicada posteriormente): es una exposición bastante pormenorizada del método y su justificación. Pretendía establecer 36 reglas y solo redacta 21, y la segunda parte del discurso se reduce a cuatro.
- Meditaciones metafísicas (1641): exposición sistemática de la metafísica cartesiana. Está dividida en seis meditaciones: la primera sobre la duda metódica, segunda sobre el cogito, tercera sobre las ideas y las dos primeras pruebas de la existencia de Dios, cuarta sobre el origen del error, quinta sobre el argumento ontológico y sexta sobre la existencia de las cosas materiales.
- Los principios de la filosofía (publicada en 1644): se divide el proyecto cartesiano, lo que pretende elaborar una filosofía capaz de fundamentar metafísicamente la nueva ciencia mecanicista y cuantitativa, y la nueva imagen del hombre racional y libre, derivada del antropocentrismo del humanismo renacentista desde el mismo presupuesto: la Razón.
Relación entre la Obra y la Biografía de Descartes
René Descartes (1596-1650) nació en La Haye, Touraine, Francia. Se educó en el colegio de los jesuitas de La Flèche, donde estudió filosofía escolástica (Aristóteles y Santo Tomás). Critica las enseñanzas recibidas, como hemos dicho anteriormente, lo que de verdad le ofreció la seguridad de las matemáticas y la metodología. Se licencia en derecho y se dedica a vagar el resto de su juventud. Se mete en el ejército y lucha en Europa. Gran viajero, conoce Holanda, Alemania, Italia… Conoce a Beeckman, sabio holandés, quien le enseña el estudio de la física y las matemáticas. De hecho, formula la ley de la inercia antes que Newton y es creador de la geometría analítica. En Holanda lleva una vida dedicada a la investigación hasta su muerte en Estocolmo, Suecia, de neumonía.
Descartes: El Padre de la Filosofía Moderna
Descartes es el padre de la filosofía moderna más por los problemas que plantea que por las soluciones que ofrece. Es el primer filósofo que está influenciado por la nueva astronomía y por la nueva física. La convicción cartesiana de que la Razón autónoma es la única guía para el hombre, tanto en el ámbito de la ciencia teórica como en la conducta práctica, determinará el carácter racionalista de la filosofía moderna. En este sentido, tanto el racionalismo como el empirismo son racionalistas. Pero el modo como Descartes concibe la razón dará lugar al racionalismo.
El Racionalismo y el Empirismo
Descartes es el máximo representante del racionalismo, corriente filosófica del siglo XVII, junto con Spinoza y Leibniz. Afirma que el origen y validez del conocimiento está en las ideas innatas y que a partir de ellas, aplicando el método de las matemáticas (ciencia a la que se admira por la exactitud de sus conclusiones), el método deductivo, se puede llegar a conocer la totalidad de lo real. Frente a este optimismo, donde la razón es una facultad todopoderosa con una fe ciega en sus propias posibilidades, reaccionarán el empirismo. Así, el empirismo de los siglos XVII y XVIII, cuyos máximos representantes son Locke y Hume, van a negar la existencia de las ideas innatas (la mente es una tabula rasa, una pizarra en blanco); el origen y validez de nuestro conocimiento está en la experiencia sensible, en las impresiones. Van a negar la metafísica como ciencia y el modelo de la ciencia es la física.
Influencias en Descartes
El texto que estamos comentando está en primera persona. Parece que es un reflejo de los jesuitas con los que Descartes se educó. También las Confesiones de San Agustín están escritas en primera persona, igual que «el discurso del método», a modo de autobiografía intelectual. Otra similitud es el llamado cogito agustiniano para rebatir a los escépticos: si me equivoco existo, al igual que Descartes: cogito ergo sum (pienso luego existo). Ambos son voluntaristas, la voluntad es superior al entendimiento; es por eso que Descartes puede dudar, como hemos visto, de la razón. Para ambos es un conocimiento cierto y verdadero del hombre, la teoría del conocimiento de San Agustín y en el argumento ontológico de San Anselmo de Canterbury.
El Contexto Histórico de la Filosofía Moderna
La filosofía moderna se abre con el Renacimiento, movimiento cultural que se opone en el siglo XV y culmina a principios del siglo XVII. Las características extendidas de este periodo son las monarquías nacionales que tienden al absolutismo (frente a la sociedad feudal del método), la aparición del capitalismo comercial, el surgimiento de la burguesía, los descubrimientos geográficos que confirman empíricamente la esferidad de la Tierra, la religión, la caída de la filosofía escolástica. Los hechos de la filosofía cartesiana se nutren del antropocentrismo humanista, la revolución científica. A través de la revolución científica surge la nueva ciencia mecanicista cuantitativa. De ahí la pretensión cartesiana de usar las Mathesis universalis (sabiduría total) conforme al símil del árbol.