3.2. El Segundo Artículo de Fe: Un Dios Inteligente (45-52)
Después de refutar el materialismo, Rousseau introduce el segundo artículo de fe (45-52): los movimientos de la materia según ciertas leyes muestran una inteligencia suprema. Es decir, la regularidad de las leyes de la naturaleza, segunda característica del universo, le induce a pensar en una Inteligencia Suprema.
Pasos del argumento:
1. En el párrafo 46 se maravilla ante el orden del mundo y la armonía. Se sirve de la metáfora del reloj (mundo) y del relojero (Dios). Puede parecer que un reloj da las horas por sí mismo y que él es la causa de que se muevan sus manecillas; sin embargo esto no es así, la verdad es que la actividad le viene del relojero que le da cuerda. Concluye: un mundo ordenado, armónico y finalista, aunque su intelecto no le alcance para captar cuál sea la finalidad, exige una inteligencia.
2. Su sentimiento interno le dice que detrás de la naturaleza hay una inteligencia ordenadora (47).
3. En 47 reduce al absurdo las tesis de los materialistas al afirmar que este orden no puede ser producto del azar, el resultado de una combinación de los elementos, ya que las apuestas o tiradas necesarias para ello vendrían a ser infinitas; a este problema habría que sumar el siguiente: un mero choque de átomos jamás generará como resultado la organización y la vida. En 49 añade que por lo tanto: la armonía del universo demuestra que detrás no puede estar el azar, sino una inteligencia.
4. También en 47, y por reducción al absurdo, critica la posibilidad de que hayamos evolucionado a partir de otras estructuras caóticas, es decir, de nuevo rechaza que el azar esté detrás de lo que hay, y hace referencia a la ausencia de vestigios -fósiles- como prueba de ello.
5. Y en 48 añade que la existencia de diferentes especies imposibilitadas de comunicarse (confundirse y mezclarse), muestran que detrás hay una inteligencia ordenadora, que no sólo ordenó y planificó sino que se tomó molestias para que ese orden no fuese alterado.
Conclusión:
De donde, por muchas virguerías y suposiciones absurdas a las que recurran los mecanicistas -materialistas- no puede evitar creer “… que el mundo está gobernado por una voluntad poderosa y sabia; lo veo así, o más bien lo siento” (50). A este ser que quiere y puede y mueve el universo lo llama Dios.
Crítica:
Evidentemente Rousseau ni se imaginaba el rumbo que iba a tomar la ciencia en el siglo XIX y XX. Las teorías evolucionistas de Darwin, que se impondrán por su rotundidad en las pruebas, demostrarán que efectivamente los seres a los que alude existieron y que precisamente es el azar lo que guía el desarrollo de la naturaleza. Y también, las teorías físicas, como la mecánica cuántica o la física del Caos, pondrán de manifiesto precisamente lo que Rousseau crítica: que la ley que rige el universo sea el azar.
Y no sabe mucho más:
No sabe si el mundo es creado o eterno, si hay un único o varios principios de las cosas, es decir, si la materia es creada o eterna y, por consiguiente hay también un principio pasivo; afirma desconocer cuál sea su naturaleza, no sabe determinar la naturaleza divina pero lo que importa es que percibe a Dios por todas partes en sus obras y que lo siente en él (51) (siempre el mismo criterio operando); y saber esto es suficiente para su conducta, ir más allá abusar de la razón y entregarse a cuestiones ociosas que lo más que pueden hacer es exacerbar su amor propio -sutilizas metafísicas-. Nos encontramos, de nuevo, la regla procedimental que se impuso al comienzo: la guía de la convicción interna, de la intuición emocional que le libera de perderse en argumentaciones farragosas, frente a la intuición intelectual-matemática de Descartes. Esa convicción interna, la sinceridad del corazón, proporciona garantía suficiente con respecto a lo que nos importa (las cuestiones morales, prácticas), es suficiente por sí misma para asentir, de manera que sentir es saber. Los católicos creyeron entender que al hablar así ponía en cuestión la unidad de Dios; Rousseau replicó, es evidente que tenemos la idea de dos sustancias distintas: El espíritu y la materia… Hay dos maneras, pues, de concebir el origen de las cosas, a saber: O por dos causas diversas, una viva, motriz, activa, eficiente y la otra muerta, movida, pasiva, instrumental; o por una causa única que extrae de ella sola todo cuanto es y todo cuanto se hace. Es decir, tal y como plantea él la cuestión parece confusa porque en realidad el dilema no es relativo a si el mundo es creado o no sino a si ha sido creado de manera ex-nihilo o de otra forma, de tal modo que muy bien pudiera ser eterno. Y desde un punto de vista racional, como veremos, le parece más coherente la última explicación, lo cual no significa que la defienda y reniegue de la creación, aunque sí es discutible el que ésta sea ex-nihilo. (Ver esquema más abajo).
A.
El primer supuesto implica la existencia eterna y necesaria de la materia, y encierra dificultades. Pero “suponer dos principios de las cosas, suposición que el Vicario pese a todo no hace, no es suponer por ello dos dioses; a menos que, como los maniqueos, supongamos también estos principios igualmente activos, doctrina de todo en todo contraria a la del Vicario, quien, muy positivamente, no admite más que una Inteligencia primera, un solo principio activo y, por consiguiente, un solo Dios”. Por otra parte la coexistencia de los dos principios, afirma, parece más coherente a la hora de explicar la constitución del universo, incluido el problema del origen del mal; sin embargo, como pone de manifiesto Rousseau el Vicario duda acerca de las dos explicaciones, pero considera que inclinarse por la opción de la materia eterna no supondría desestimar la autoridad de las Sagradas Escrituras pero si tal vez la de determinadas traducciones (autoridad de la Iglesia), puesto que no está claro cuál fuese el sentido del término ‘creación’ ni en griego ni en latín -Lucrecio se sirve del término para dar cuenta de la formación del Universo y sabemos que sin embargo niega la posibilidad de toda creación-, tampoco el concepto de creación se encuentra en la antigua teología judaica, ni en el relato de Moisés; duda, por consiguiente si los traductores de la Biblia han dado el verdadero sentido al texto hebreo original.
B.
Pero el segundo, la creación, presenta tal vez mayores dificultades: “Supuesto que haya un principio eterno y único de las cosas, siendo éste principio simple en su esencia no estará compuesto de materia y de espíritu, sino que será materia o espíritu solamente. Según las razones deducidas por el Vicario, no puede éste concebir que dicho principio sea materia, y si es espíritu, no puede concebir que por él haya recibido la materia el ser, pues para eso sería menester concebir la creación. Ahora bien, la idea de creación, la idea según la cual se concibe que merced a un simple acto de voluntad se haga algo a partir de la nada es, de todas las ideas que no son resueltamente contradictorias, la menos comprensible para el entendimiento humano” (Carta al arzobispo, 559-60). Y todos los hombres y filósofos que han meditado sobre este asunto han rechazado unánimemente la posibilidad de la creación, exceptuando unos pocos que han sometido su razón a la autoridad, tal vez apremiados por garantizar su seguridad, su descanso, es decir, mentir para evitar riesgos personales.
21 sabmos k 1a obra cm dl spíritu s tomada cm spcial punto d rfrncia en la rdacción d la profsión d f.
22 “r uid a akyos k bajol prtxto d explicar la naturalza siembran en ls corazons d ls ombrs dsoladoras doctrinas”. enl 51, 1a vzl vicario a mostrado la existncia d dios s planta k + pued dcir acrca d él (enl 80 lo explica mjor). y añad 4 idas k ls stablc a partir dl sntimiento d dios k pose en sí mismo y dl k l dspierta cuanto l roda y no a partir d la razón o d ls snti2 (a dios no s l pued conocr a través d ls snti2, y tampoco s l pued conocr a través dl intlcto -racionalistas-, s dcir, no s l pued dducir d otros principios. s +,l entndimiento lo único k ac s nublar nustro conocimiento d dios, x so añad a continuación k, cuanto + pienso en él, + m confundo,l entndimiento no s capaz d dcirnos nada dbido a su insufi100cia (52): intligncia . potncia , voluntad , bondad d manra k a s dios 1e ls idas d intligncia, potncia, voluntad y 1a conscuencia dyas: la bondad. s intlignt, ya k dtrás dl ordn stablcido tien k abr 1a intligncia capaz d ordnar. s podroso, xk sin potncia difícilmnt abría stablcidol 1ivrso tal y cm lo concbimos; tien voluntad, o lo k s lo mismo, actúa dsd la librtad y ls dcisions propias (st atributo impdiría concbirlo cm 1 sr abstracto, x ejmplo, cm “enrgía”); s bonda2o, ya k 1 sr intlignt y libr tien k sr bueno.
Valoración
¿dónd rsidl valor,l podr d ls pruebas axtadas x roussau?
si conl siglo d ls lucs, s da 1 dsplazamiento dsdl tocntrismo tradicional (dios concbido cm prsnalidad infinita,l concpto d gracia, rvlación, pcado, y 1a naturalza entndida cm cración divina y no autosufi100t) a 1a visión fisiocéntrica: procso d naturalización y scularización, mdiantl cual dvolvr a la naturalza umana la 1idad prdida y 1 orizont d inocncia k s abría ido diluyendo a lo largo dl dvnir istórico, roussau radicaliza sta orientación d su siglo, a la vz k raliza 1a crítica d dtrmina2 aspctos. con rspcto a la naturalza extrior: la rlación profunda, íntima e inmdiata con la naturalza constituye 1 d ls rfrnts constants d roussau. aya rcurr, prdién2e en soldad (sin k ninguna trcra prsna inoxtuna s intrpusiera entr la naturalza y él) x bosks en ls k cre srl primro en pntrar, cada vz k ncsita buscar inspiración o s aya prdido. y sos pasos acaban con lo k podríamos dnominar 1a expriencia mística natural. en sintonía conyo,l vicario va a prfrir:
1-el valor probativo d ls lys d la naturalza al 1ivrso alatorio d ls milagros cm exos excpcionals: “sl ordn inaltrabl d la naturalzal k mustra mjor al sr suprmo”.
2-enl ámbito rligioso prfier consultar primordialmntl libro divino d la naturalza frnt a ls dcpcionants libros umanos: “ e crrado, pus, to2 mis libros. sólo 1 stá abierto a todas ls miradas, a sabr,l d la naturalza. s st grand y sublim libro dond aprndo a srvir y a adorar a su divino autor”. también aquíl psimismo istórico cdl paso al optimismo naturalista.
roussau no propugna dsdivinizar x complto la naturalza sino ponrla al srvicio d su concpción d la divinidad. s enfrnta así a ls intntos d ls filósofos matrialistas 21 contmxános d utilizarl concpto d naturalza cm entidad autosufi100t, k s explica x lys inmannts aya misma, suplantadora d la divinidad 22 . frnt ayos afirmará k la naturalza,l 1ivrso físico, no s explica a sí misma, k sólo adkier significado x rlación a 1 sr absoluto. d manra k 1a d ls caractrísticas dl dios roussniano s la d sr dios d la naturalza. frnt a sus advrsarios matrialistas no duda en rcuprarla xa su apología d la rligión. la profsión d f s x tanto la réplica roussniana al movimiento filsófico, pro lo s en primr lugar a la corrient matrialista.
la rligión natural d roussau, frnt a ls matrialitas, inaugura 1a nueva manra d entndr ls rlacions entr 100cia y rligión: s trata d encontrar 1 conjunto d principios mínimos y sncials, 1ivrsals e invariabls accsibls a la razón; y la 100cia ya no tien k entndrs cm 1a cosmovisión opusta a la rligión, a la k prtnd sustituir; x lo tanto ay sitio xa ambas, sn 2 ámbitos difrnts.
x otra part, la concpción k tien roussau d dios no supon 1a rflxión intlctual dsapasionada; tien poco intrés enlaborar complicadas pruebas mtafísicas acrca d la existncia d dios: la imxtancia d ls idas rligiosas d roussau no rsid enl podr, la
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fuerza, d sus pruebas acrca d su existncia sino enl significado k dixa existncia pued otorgar al sntido d la vida umana. no lo comprndrmos al margn dl papl k roussau otorga a la razón enl contxto d la naturalza intgral dl sr umano: aun siendo la razón 1a facultad imxtant, entiend k no actúa con indpndncia dl rsto d la prsnalidad umana -con100cia, sntimientos-, ad+ tien k oponr rsistncia a la influencia maléfica d ls pasions yl orguyo. xa librar a la razón d stas pasions, s ncsario rintgrarla a su vrdadra función, k no s dscubrir la vrdad a partir d sus propios rcursos, sinolaborar y clarificar ls sntimientos o intuicions fundamntals sobr ls k, en última instancia, dscansa la vida umana.l pso dl argumnto rsid + en conviccions profundas, en ls k arraigan ls crencias firms, k en pruebas racionals convincnts: lo imxtant xa roussau s la convicción intrior. + imxtant k cualkier prueba racional s la convicción d k dtrás dl mundo extrior ay 1a voluntad intlignt -dios- dbido a su capacidad xa dsprtar fuerts emocions enl alma d kien lo contmpla. d manra k s + imxtant la rspusta spontána d la snsibilidad umana ant la naturalza -no parclada sino cm sistma ordnado-, k ls argumntos strictamnt racionals.