Contexto Histórico-Cultural
En la Antigua Grecia, con Atenas al frente de la Liga de Delos, cuyo propósito era mantener la seguridad de los aliados y vencer al enemigo persa en las Guerras Médicas, se vivió un periodo de gran importancia. Durante el liderazgo de Pericles, el imperialismo ateniense se acrecentó, buscando extender la democracia. Este fue un tiempo de apogeo económico y cultural, lo que provocó el recelo de Esparta.
En un breve periodo, ocurrieron tres grandes acontecimientos: la muerte de Pericles, el nacimiento de Platón y el estallido de la Guerra del Peloponeso (Esparta contra Atenas), que finalizaría 30 años después con la derrota de Atenas. Como consecuencia, se implantó en Atenas un régimen oligárquico (el Gobierno de los Treinta Tiranos), aunque posteriormente se reinstauró la democracia.
Esta democracia no contó con la aprobación de Platón, quien criticaba la irracionalidad en el gobierno y la carencia de principios éticos. Además, este sistema condenó a muerte a su maestro, Sócrates. Platón abandonó Atenas, buscando una utopía política, pedagógica y social. Intentó llevar a cabo sus ideales en Siracusa, sin éxito. A su regreso a Atenas, fundó la Academia.
La época de Platón fue un momento de apogeo cultural visible en la filosofía (sofistas y Sócrates), la medicina (Hipócrates), la literatura (tragedia y comedia) y la arquitectura (construcción de la Acrópolis). Nació la historiografía y el arte, en auge, se distanció de la artesanía.
Contexto Filosófico
En la Grecia contemporánea a Platón encontramos dos posturas ético-políticas:
- Sofistas: Relativistas y escépticos. Afirmaban que las leyes y las virtudes están sujetas al acuerdo que pueda darse en las distintas sociedades.
- Sócrates: Opinaba que los valores cívicos y morales son válidos en todas las culturas.
Platón fue seguidor de Sócrates, llevando las virtudes a un mundo superior. Al igual que su maestro, eligió el diálogo para sus obras.
Entre sus influencias encontramos a Parménides, de quien heredó el planteamiento idealista y el dualismo:
- Epistemológico: La diosa de Parménides puede seguir dos caminos: la verdad (conocimiento verdadero) o la opinión (conocimiento falso).
- Ontológico: Parménides separa un ser auténtico (Ser) de uno aparente (no Ser). Platón heredó muchos rasgos del Ser (inmutable, eterno) y defendió la pluralidad de las Ideas frente al monismo del Ser.
Así como Parménides influyó en el mundo de las Ideas, Heráclito lo hizo en el mundo sensible.
Anaxágoras también influyó en Platón. Según Anaxágoras, una inteligencia ordenadora organizó unas partículas ya existentes, transformándolas en cosmos. Esto influiría en el Demiurgo de Platón.
Otra influencia fue la escuela pitagórica, que era una doctrina filosófica, secta mística y escuela matemática. Afirmaban la inmortalidad del alma, el concepto de trasmigración y el de purificación.
Relación de Platón con otra Posición Filosófica (Nietzsche)
Nietzsche y Platón representan posturas filosóficas antagónicas. El platonismo criticado por Nietzsche no se limita a la filosofía de Platón; según Nietzsche, la propagación del platonismo ha tenido su mejor aliado en el cristianismo.
La filosofía de Platón se resume en la frase: «la realidad no cambia y lo que cambia no es real». Observamos cómo toda la filosofía nietzscheana es el intento más radical de superar el platonismo y defender lo opuesto: la existencia de un mundo carente de sentido trascendente: la vida.
Si comparamos los planos:
- Ontológico: Platón defendía la existencia de dos mundos (Ideas y sensible); para Nietzsche, solo existe el que nos muestran los sentidos. Para Platón, el mundo sensible es falso, está en continuo cambio. Para Nietzsche, la realidad es la que está en perpetua transformación.
- Epistemológico: Platón sostenía que el conocimiento verdadero se alcanza a través de la razón. Solo existe una verdad. Nietzsche afirmaba que la verdad es la conciencia de que no existen verdades absolutas; por tanto, el conocimiento de los sentidos supera al de la razón. El lenguaje metafórico nos acerca más a la verdad que la ciencia.
- Antropológico: Para Platón, el hombre está compuesto de cuerpo y alma. El alma es la parte inmortal y racional, que controla las pasiones del cuerpo. Para Nietzsche, en el hombre se concentran instintos e impulsos diferentes. Su tarea es seleccionar los que son favorables a la vida.
- Moral: Para Platón, los valores morales son absolutos y la moral es intelectualista: la felicidad del hombre reside en el cultivo del conocimiento y toda concesión al placer corporal debe ser controlada. Para Nietzsche, la actitud valiosa es la del hombre que acepta la vida finita con toda su carga de crudeza. El hombre es creador de sus propios valores, llamados a afianzar la vitalidad y no el conformismo ni la compasión (cristianismo).
Actualidad y Valoración Crítica de Platón
Algunos rasgos de la filosofía de Platón que resuenan en la actualidad son:
- En relación al materialismo actual, resuena como correctivo la reivindicación de lo espiritual que hace Platón.
- La preocupación por el comportamiento de los gobernantes, tan presente en Platón como ahora, donde la corrupción está a la orden del día.
- La aspiración a encontrar los universales podría vislumbrarse en el intento de elaborar unos derechos humanos extensivos a toda la humanidad.
- La importancia de la educación.
- Al hilo del mito de la caverna, si nos preguntamos qué serían las sombras y las cadenas que nos retienen actualmente, podemos referirnos a los mundos virtuales (internet, juegos), que suplantan el mundo real.
Entre las críticas que podríamos hacerle a Platón:
- La escasa importancia a lo material no favorece el avance de la ciencia y, aplicado al hombre, la visión excesivamente intelectualista condena lo gozoso y placentero.
- El ideal de filósofo rey choca con la imposibilidad real de encontrar una persona apta para gobernar por encima de todos. Platón planteaba quién debe tener el poder absoluto, nosotros nos preguntamos cómo garantizar que nadie lo tenga.