Dualismo Ontológico

Mundo de lo sensible: No es eterno sino obra de un Demiurgo, creado tomando como modelo el mundo de las Ideas.

Mundo de las Ideas: Se alcanza a través de la razón, son las únicas ideas en sentido estricto.

Idea de bien: Idea metafísicamente privilegiada, pues otorga perfección al resto.

¿Cómo conocer el Mundo de las Ideas? ¿Cómo podemos obtener conocimiento de las Ideas si no es posible obtenerlo mediante los sentidos?

Dualismo Antropológico

Dualismo antropológico.

Dos sustancias separadas:

• Cuerpo: Corruptible, perecedero. Cuerpo como prisión del alma.
• Alma: Pertenece al mundo de las Ideas, y como ellas es eterna, tiene conocimientos de dichas Ideas, pero al unirse al cuerpo este conocimiento se diluye y olvida, aunque no se pierde.

Dualismo antropológico:

• Cuerpo: Corruptible, perecedero; el cuerpo es comparado a una prisión de la que el alma desea salir para regresar al Mundo de las Ideas.
• Alma: Inmortal. Pertenece al mundo de las ideas.

…

Esto determinará el pensamiento de Platón en 2 aspectos:

• La separación de alma y cuerpo le permite resolver el problema del conocimiento: cómo podemos obtener conocimiento de las Ideas si no es posible obtenerlo mediante los sentidos. Considera que la parte superior del alma, la racional, pertenece al mundo de las Ideas. Supone, pues, la inmortalidad del alma: el alma existió antes de penetrar en el cuerpo, y continuará existiendo tras la muerte de éste. Al ser eterna y proceder del mundo de las Ideas, tiene, por tanto, conocimiento de dichas Ideas, pero al unirse al cuerpo este conocimiento se olvida. A este proceso de rememoración o recuerdo lo denomina Platón Reminiscencia. Este proceso de educación es, como expone Platón en el Mito de la Caverna.
• Describe el alma humana en 3: La parte racional, La Parte Irascible y la parte Concupiscible.

Problema de la Realidad/del Ser Humano

Tendrá una importancia decisiva en la organización del Estado ideal. Se divide en tres:

• Filósofos-Gobernantes, predomina la parte racional.
• Guerreros o clase militar: Predomina la segunda facultad del alma.
• Ciudadanos o masa de la clase inferior, predomina la parte más inferior del alma.

Problema de la sociedad o política:

Desde el primer momento, el pensamiento de Platón se orienta hacia el problema de la Justicia y el Estado. El Estado ateniense era una democracia -instaurada tras la Guerra del Peloponeso-, pero una democracia dominada por la corrupción, la inmoralidad y la injusticia. Asimismo, en la sociedad ateniense había prosperado un movimiento filosófico, los Sofistas, que defendían el relativismo moral, la imposibilidad de establecer definiciones universales sobre el bien, el mal o la justicia, algo a lo que se oponían tanto Sócrates como su discípulo Platón porque contribuía a confundir a los ciudadanos sobre cómo debían comportarse. Esta preocupación de Platón por la justicia y la creación de un Estado justo podemos entenderla si pensamos que la cuestión del conocimiento, encontrar el modo de «conocer» el Mundo de las Ideas, va encaminado fundamentalmente a describir qué es el Bien, la Justicia y la Virtud. En esta obra Platón nos describe no sólo quién debe gobernar, sino también la organización ideal de la sociedad.

La Organización del Estado.

Establece una estrecha correlación entre la estructura interna del hombre, alma y estructura del estado, divide el alma en 3: Parte Racional, Irascible, Concupiscible. Platón define la Justicia en un Estado, el Estado Justo, como “aquél en el que cada individuo asume el papel para el que está más dotado o capacitado”. Así, el Estado se estructura en tres clases:

• Filósofos Gobernantes: Son los gobernantes ideales porque ellos han logrado acceder al conocimiento de lo que es la Justicia, el Bien, la Virtud. Y solo aquellos que saben qué es el Bien y la Justicia están capacitados para gobernar justamente. Desempeñando 2 ideas fundamentales:
  • Velar por la justicia del estado,
  • Actuar como supremos educadores.
• Guerreros o clase militar. Pertenecían aquellos en los que predomine la segunda facultad del alma, la pasional.
• Ciudadanos o masa de la clase inferior: Domina la parte más inferior del alma, dominada por el deseo. Así concibe Platón la estructura del Estado ideal, encaminada a desarrollar la personalidad humana como el más alto valor individual y social.

Problema de la Sociedad

Problema de la Ética o Moral

Las cuestiones relacionadas con la ética, desentrañar qué es lo correcto, bueno o justo, constituyen una de las preocupaciones fundamentales del pensamiento filosófico de Platón. Ello se debe, en gran medida, a la profunda decadencia moral de la Atenas de su época. El Estado ateniense era una democracia -instaurada tras la Guerra del Peloponeso-, pero una democracia dominada por la corrupción, la inmoralidad y la injusticia. Tanto Sócrates como Platón están convencidos de que la manera de regenerar la sociedad ateniense pasaba por establecer definiciones firmes, universalmente válidas, acerca de qué es el Bien o la Justicia. Esta convicción de que existe una definición universal de qué es el Bien y la Justicia lleva tanto a Sócrates como a Platón a enfrentarse al relativismo moral de los sofistas. Las leyes tienen carácter convencional, decían, y lo considerado bueno o malo es una cuestión de perspectiva. La profunda preocupación de Platón por definir qué es la justicia y la creación de un Estado justo podemos entenderla si pensamos que su epistemología, su teoría del conocimiento, encontrar el modo de «conocer» el Mundo de las Ideas, va encaminado, fundamentalmente, a describir qué es el Bien, la Justicia y la Virtud. De ahí que la regeneración moral de la sociedad, la creación de un Estado justo, solo sea posible, en opinión de Platón, si quienes gobiernan son los filósofos, porque solo quien ha logrado alcanzar el conocimiento de qué es el Bien y la Justicia puede gobernar justamente. Y es que un Estado justo es definido por Platón como aquél en el que cada individuo asume el papel para el que está más dotado o capacitado.

El Problema de Dios

En la filosofía de Platón, la cuestión de la posible existencia de un Dios creador aparece estrechamente vinculada a su ontología. Defiende un dualismo ontológico, la existencia de dos mundos:

• Mundo de las Ideas. Es este un mundo en el que no se produce cambio alguno, por lo que se asemeja al mundo descrito por Parménides en su filosofía. De hecho, constituyen el mundo de lo auténticamente real, de ahí que el conocimiento humano deba dirigir su mirada hacia este mundo de las Ideas.
• Mundo de lo sensible. Un mundo sometido al cambio y la transformación constante, en permanente devenir, el mundo que describía Heráclito en su filosofía. En su obra el Timeo habla Platón de la existencia de un Demiurgo, una especie de Dios, Inteligencia o artífice divino del mundo. En esta idea del Demiurgo podemos percibir la influencia de Anaxágoras, quien defendía la existencia de un «Nous», una Inteligencia Ordenadora, que habría dado origen al mundo que percibimos a nuestro alrededor.

De igual forma, el Demiurgo de Platón no crea el mundo sensible de la nada, sino que, moldeando la materia caótica y eterna, y tomando como modelo las Ideas, habría configurado el mundo que percibimos a nuestro alrededor.