El Pensamiento Filosófico de Aristóteles

Introducción

Aristóteles, hijo de médico, recibió una formación con un componente empírico y práctico que marcó su actividad filosófica. Enseñó retórica, educó a Alejandro Magno, estableció el Liceo y fue acusado de impío. Su filosofía se presenta como alternativa a Platón y Demócrito, una respuesta al problema del movimiento negado por Parménides.

Obras Éticas

Entre sus escritos éticos se encuentran la Ética nicomáquea, la Ética eudemia y la Gran ética. La Ética nicomáquea, dividida en 10 libros, representa la exposición más madura de su pensamiento moral. Con austeridad propia de los escritos esotéricos, comienza estudiando la relación entre el bien y la felicidad, considerando la felicidad como un bien supremo, perfecto y suficiente en sí mismo. El principio de la felicidad reside en la actividad del alma conforme a la virtud.

• Distingue dos tipos de virtud: la intelectual y la moral.
• Define la virtud moral como disposición adquirida y voluntaria centrada en un término medio relativo a nosotros.
• Analiza las virtudes morales concretas (Libro 3) y otras virtudes (Libro 4).
• Dedica el Libro 5 a la virtud moral y el Libro 6 a las virtudes intelectuales.
• Trata el placer y la intemperancia (Libro 7), la amistad (Libro 8) y el placer y la felicidad (Libro 10).

Define la felicidad como actividad deseable por sí misma, autosuficiente y conforme a la razón, siendo la actividad teorética la que más contribuye a ella.

Escritos Esotéricos y Exotéricos

Aristóteles utilizaba dos tipos de escritos:

• Esotéricos: Apuntes de lecciones para los estudiantes del Liceo.
• Exotéricos: Diálogos de carácter lúdico y divulgativo.

Metafísica y Epistemología

En contra de Demócrito, demostró que el vacío no existe. Se alejó del idealismo de Platón, negando el mundo de las ideas y afirmando la existencia del mundo sensible, constituido por seres con fisis y movimiento. Rechazó la unidad entre filosofía y política, sin presentar una utopía política. La dialéctica como método para ascender a la idea del bien pierde importancia. Concibe la lógica como órgano del saber.

Su concepto de episteme rechaza la reminiscencia y la teoría innata como origen del conocimiento. El proceso de conocer comienza a través de los sentidos. La esencia de una cosa no puede estar separada de la misma. Con su teoría del movimiento, pasa de la potencia al acto.

La influencia de Platón es evidente en su concepción teleológica de la naturaleza: «toda operación persigue un fin o telos«. Destaca la concepción de la ciencia como conocimiento de las esencias, separadas para Platón, incorporadas a las cosas mismas para Aristóteles. La existencia de esencias y formas muestra la persistencia de la metafísica.

Hilemorfismo

Aristóteles, realista con tendencias empiristas, afirma la existencia de una única realidad. Toda sustancia es un compuesto de materia y forma. La materia es pura potencia. Las cosas son compuestos inseparables; su separación lleva a la destrucción del ser. Esta concepción se conoce como hilemorfismo.

Virtud y Política

La virtud (areté) o excelencia no es algo absoluto ni necesario, y para Aristóteles, algunas virtudes son enseñables y otras no. El ser humano es un animal político («zoon politikon«), un ser social. El individuo aislado no es del todo humano; su esencia es ser social. Un hombre fuera de la polis sería más o menos que un hombre, pues no podría desarrollarse completamente.

Cada pueblo tiene circunstancias que impiden establecer un único régimen político. Cada comunidad debe encontrar la mejor organización, buscando la estabilidad y evitando los extremos. La mejor comunidad es la más moderada.

Legado

Aristóteles se sitúa entre el realismo y el idealismo, la inmanencia y la trascendencia, el espiritualismo y el materialismo. Empiristas y positivistas están en deuda con él, al rechazar las ideas innatas. Su concepción realista y sistemática, junto con su perspectiva observacionista, influyó en el pensamiento occidental. Sustituyó el modelo matemático pitagórico-platónico de la realidad por un modelo natural-biológico. Su obra, sistemática y exhaustiva, abarcó numerosos ámbitos del saber, incluyendo la lógica. Para Aristóteles, saber es poseer intelectualmente la verdad.