Nietzsche: La filosofía de la vida

La vida como eje central

La filosofía de Nietzsche busca revitalizar la vida, un aspecto olvidado por la tradición filosófica occidental. Para Nietzsche, lo corporal, el movimiento, el caos, lo sensitivo y lo físico son fundamentales. Intenta demostrar que conceptos como el orden, lo espiritual, la razón y la verdad son errores, incluso engaños voluntarios para controlar la moral, el pensamiento, el lenguaje y la organización social. Junto a Marx y Freud, Nietzsche es considerado un filósofo de la sospecha.

Crítica al pensamiento occidental

La obra de Nietzsche critica el pensamiento occidental, especialmente su concepto de razón y moral. Su filosofía del martillo es clave para entender su visión del mundo y del hombre.

El nihilismo: negativo y positivo

El hombre occidental ha despreciado la vida en favor de un transmundo inexistente, basado en conceptos vacíos como Dios. Este es el nihilismo negativo de la tradición platónica y cristiana, que considera real la «otra vida».

Pero existe un nihilismo positivo, que surge al reconocer la «muerte de Dios». Asumir el nihilismo es el primer paso para la curación. Un hombre nuevo para un mundo nuevo, que solo responde a la vida y la voluntad de poder.

La vida y la voluntad de poder

La vida es una fuerza premoral que utiliza y elimina a los individuos. La muerte, considerada el mayor mal, es un momento necesario para la vida. Acusar a la vida de maldad es un error, ya que la vida juega a vivir y gozar.

La voluntad de poder es el mecanismo básico de la vida. En el mundo mineral, se manifiesta como fuerza. En los seres vivos, como lucha por la existencia. El hombre, con su conciencia e individualidad, posee un deseo de permanencia y voluntad de poder superior.

La transvaloración de todos los valores

El espíritu libre

La humanidad ha valorado lo opuesto a la vida, una moral de un espíritu enfermo. La transvaloración de todos los valores es la fórmula de Nietzsche para volver a los valores de la vida. La voluntad de poder y la vida son los fundamentos de todos los valores.

Con la «muerte de Dios» y la desvalorización de los valores cristianos, la situación del hombre se vuelve imposible. Nietzsche busca una revisión radical de la cultura.

A partir de La Gaya Ciencia, Nietzsche habla del espíritu libre. Este no se somete a ninguna autoridad, su punto de partida es el «yo quiero». Debe estar fuera del «tener» y la dialéctica bien-mal, como un niño que juega con el mundo sin temor ni moral.

El superhombre

El superhombre dice sí a la vida, aceptando todo, incluso el dolor, la tragedia y la muerte. Posee gran dureza interior para soportar el dolor y la soledad. No teme a nada y se convierte en un espíritu libre.

El superhombre es un ser sin ideales, una mezcla de grandes hombres que aceptaría el eterno retorno, haciendo eterna esta vida sin arrepentimientos.

La filosofía del martillo

Para llegar a esta filosofía de la vida, era necesaria la filosofía del martillo, que destruye los ídolos de la razón que momifican la vida y confunden el mundo verdadero con el mundo ideado.