Ética: la búsqueda del bien y la responsabilidad individual

La ética: elección de una conducta digna

1. La ética es la elección como persona de una conducta digna, el esfuerzo para obrar bien, la ciencia y el arte de conseguirlo. Esta brújula es necesaria para orientarnos en el confuso y agitado mar de la vida; eso es la ética. 2. La ética busca el bien, pero ¿qué es el bien? Las respuestas son múltiples, pero se podría decir que es lo que le conviene a una cosa, lo que la perfecciona, con independencia del placer o dolor que cause. 3. El relativismo es incorrecto; hay culturas que han considerado buenos los sacrificios humanos, la esclavitud, la poligamia, etc. Esto representa la seria objeción a la pretensión de buscar racionalmente el contenido objetivo, no subjetivo, de la palabra ‘bueno’. El relativismo tiende a confundir la realidad con el deseo. 4. La libertad permite al hombre autodeterminarse y exigir, y es exclusiva. El hombre ‘elige su propio papel, y por eso progresa y tiene historia. Lo que define a la libertad es el poder de elegir y dominar los propios actos, el autodominio de sus acciones. 5. La libertad no es absoluta porque el hombre tampoco lo es. Su limitación es triple: física, psicológica y moral. No debe ser vista como algo negativo, tiene un valor instrumental. Vivimos en un mundo en el que hay limitaciones, estamos condicionados por diversos factores. 6. Se puede elegir mal, lo cual es una imperfección de la libertad. Elegir el mal es una prueba de que ha habido una deficiencia, ya sea por no advertir el mal o por no haber querido lo suficiente el bien. En otras palabras, se elige el mal cuando la libertad se ejerce de forma defectuosa, por lo tanto, el resultado es malo. Responsabilidad: cada uno es responsable de sus propios actos… 7. La ética busca el bien y el bien se conoce cuando se respeta la verdad. Obrar bien es obrar conforme a la verdad, por eso es uno de los fundamentos de la ética. 8. Duda: fluctuar entre la afirmación y la negación de una proposición. Opinión: adhesión a una proposición sin excluir la posibilidad de que sea falsa, es una estimación ante aquello que puede ser o no ser. Certeza: conocimiento seguro y claro que se tiene de algo. 9. {Mi verdad} La verdad depende de lo que son las cosas, no del sujeto. Es el sujeto quien debe adaptarse a la realidad, no la realidad al sujeto. Así como el guante se ajusta a la mano, el subjetivismo hace lo contrario, ajusta la realidad al sujeto, con lo que la verdad ya no se encuentra en las cosas, se inventa a partir de ellas. 10. No. La verdad no consiste en la opinión de la mayoría. Cuando se elige esto, es por falta de personalidad, se desprecia la inteligencia. Si la verdad fuese mayoritaria, la persona con influencia popular tendría el control de la verdad.



La búsqueda de la verdad y la educación de la conciencia

10. No. La verdad no consiste en la opinión de la mayoría. Cuando se elige esto, es por falta de personalidad, se desprecia la inteligencia. Si la verdad fuese mayoritaria, la persona con influencia popular tendría el control de la verdad. 11. Sí podemos conocer la verdad. La existencia del lenguaje y la posibilidad entre dos interlocutores demuestran que podemos conocer verdades. La experiencia del error nos permite apreciar lo erróneo en comparación con lo verdadero, lo que implica que tenemos la capacidad para distinguir la verdad. El conocimiento no agota la realidad, por lo que nunca podemos conocer la verdad en su totalidad. 12. La conciencia es el instrumento ético que se encarga de señalar el rumbo y distinguir entre el bien y el mal. No se trata de una voz misteriosa, sino de una exigencia interna que juzga la moralidad de nuestras acciones. Es el criterio absoluto del hombre y nos lleva a tomar decisiones basadas en lo que creemos correcto. 13. La conciencia no es un código de conducta impuesto, porque es una exigencia interna para tomar decisiones basadas en lo que cada uno cree que es correcto. Por lo tanto, la conciencia sigue una estructura y cada uno tiene su propia conciencia. 14. La educación de la conciencia debe empezar en la niñez para aplicar los principios morales aprendidos a lo largo del crecimiento. Debe ser una educación que lleve consigo el equilibrio personal y respete tres reglas de oro: hacer el bien y evitar el mal; no hacer a nadie lo que no queremos que nos hagan; no hacer el mal para obtener un bien. 15. Dios es el fundamento de la responsabilidad, porque es el gran testigo invisible ante el cual el hombre se siente responsable. Es la especie de conciencia a la que debemos responder. 16. Es importante entender la dignidad humana, porque implica que todo ser humano es siempre valioso y que su vida debe ser intocable. La dignidad humana es un concepto intocable y es fundamental para establecer principios éticos y morales, protegiendo los derechos e integridad de cada sujeto. 17. Aunque el mal y la providencia pueden parecer contradictorios, existen distintas perspectivas y explicaciones que intentan reconciliarlos, como la idea del libre albedrío (Dios puede permitir el mal porque ha creado seres humanos con libre albedrío y debe respetar las reglas que Él mismo ha establecido), o que la posibilidad de que el sufrimiento sea utilizado como una oportunidad para el crecimiento y la corrección moral (C.S. Lewis sugiere que Dios utiliza el sufrimiento como un megáfono para despertar a un mundo sordo y como una oportunidad para que las personas injustas se corrijan).

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