Antropología Platónica
El filósofo Platón concibe al ser humano desde un dualismo antropológico: cuerpo y alma. El cuerpo pertenece al mundo sensible, considerado «la cárcel del alma», mientras que el alma pertenece al mundo inteligible, siendo «inmortal y eterna». Platón establece una condición tripartita del alma:
- Racional (Logos): La razón humana, cuya virtud es la prudencia y se asocia a los gobernantes o filósofos.
- Irascible: La voluntad y el ánimo, cuya virtud es la fortaleza y se relaciona con el grupo social de los guerreros o ejército.
- Concupiscible: Las pasiones y deseos básicos, cuya virtud es la templanza y se corresponde con el grupo social de los productores.
Estas tres partes del alma se ilustran en el mito del carro alado.
Política Agustiniana
La filosofía política de San Agustín se centra en la relación entre la fe cristiana, el gobierno y la justicia. Distingue dos ciudades:
- La ciudad de los hombres: Gobernadas por las reglas humanas.
- La ciudad de Dios: Gobernadas por los principios del cristianismo.
San Agustín de Hipona defiende como ciudad ideal aquella gobernada por cristianos, donde las normas humanas se alinean con las divinas. Argumenta que las ciudades no cristianas, donde predominan las reglas humanas, están destinadas al caos, mientras que en aquellas donde las normas de Dios y del hombre convergen, habrá paz y prosperidad. Su visión política se describe en su obra Civitate Dei (La ciudad de Dios).
Teoría del Conocimiento en Aristóteles (Parte 1)
Aristóteles, desde una perspectiva monista y materialista, defiende que la realidad se compone de seres y que esta realidad es fundamentalmente material, no espiritual. Critica la teoría de las Ideas de Platón con cuatro argumentos principales:
- Duplicar la realidad para explicarla genera más problemas.
- Las esencias no pueden existir separadas de las cosas de las que son esencia.
- Rechaza la figura del demiurgo, pues considera que la naturaleza ya posee un orden intrínseco.
- Critica la excesiva matematización de la realidad en la teoría de las Ideas.
Aristóteles propone la teoría hilemórfica para explicar la relación entre materia (hyle) y forma (morphé). Según esta teoría, todos los seres están compuestos de materia y forma de manera indivisible.
Teoría del Conocimiento en Aristóteles (Parte 2)
Aristóteles también introduce los conceptos de potencia y acto. La potencia es la capacidad de un ser para desarrollarse, mientras que el acto son los momentos vitales en los que ese desarrollo se manifiesta. La esencia de un ser se altera solo si algo lo hace dejar de ser lo que es, destruyendo su identidad. En su teoría de las cuatro causas, Aristóteles explica que todo tiene una causa que puede analizarse desde cuatro aspectos:
- Causa material: De qué está hecho o compuesto el ser.
- Causa formal: La forma o esencia que hace que algo sea lo que es y no otra cosa.
- Causa eficiente: El agente o proceso que provoca el cambio, debido a la función natural del ser.
- Causa final: El propósito o fin de algo, su función teleológica.
Según Aristóteles, el conocimiento de la realidad comienza con la información sensorial, que luego se clasifica y se percibe a través de los sentidos. Su lógica, que sentó las bases de esta disciplina hasta el siglo XX, es fundamental para su filosofía.
Las Vías de Santo Tomás para Demostrar la Existencia de Dios
Vía del Movimiento
Todo lo que se mueve es movido por algo que está en acto. Es imposible que algo esté en acto y potencia respecto a lo mismo. Es imposible que sea motor y móvil a la vez. No puede haber regresión al infinito, luego es necesario un primer motor al que llamamos Dios.
Vía de la Causalidad Eficiente
Santo Tomás considera las versiones de Averroes y Avicena sobre la causalidad. Aplica la causalidad eficiente, aunque también podría ser la final. En el mundo hay un orden de causas eficientes, pero ninguna es causa de sí misma. No se puede prolongar la serie indefinidamente. Existe la necesidad de una causa primera, pues si se suprime su efecto, se suprimen todos los demás. Así, la causa primera es Dios. Esta vía supone una evidencia sensible de la causa y posee un mayor grado de abstracción que la primera.
Vía de lo Contingente y lo Necesario
Hay seres que pueden existir o no existir (contingentes). Estos seres contingentes no han existido siempre. Si todas las cosas fueran así, hubo un tiempo en que no hubo motor. Esto implicaría que no habría habido creación y nada existiría, lo cual es falso. Por ello, debe haber algún ser necesario, que es Dios. Dios es un ser necesario por sí mismo y no encuentra en otro su necesidad.
Vía de los Grados de Perfección
Se gradúan los seres por su aproximación a algo que es lo máximo en perfección. Este máximo será la causa de esa perfección, y a esa causa la llamamos Dios. Esta vía tiene su origen en la teoría platónica de la participación.
Vía de la Causa Final
Su origen es más teológico, pues en la Biblia hay textos que apoyan esta demostración. Santo Tomás se refiere a San Juan Damasceno, quien proporciona un modelo de demostración. Todo parece seguir un fin, incluso lo que carece de conocimiento. Se precisa la dirección de alguien, y ese alguien es Dios. La evidencia sensible se halla en este caso superada, pues se alude a una determinada forma de ser.