Explorando el Pensamiento de Aristóteles: Virtud, Felicidad y la Naturaleza Humana

Aristóteles: Biografía

Estudió en la Academia de Platón. Fue maestro (tutor privado) de Alejandro Magno, por lo que se trasladó de Atenas a Macedonia. Cuando Alejandro conquistó Atenas, Aristóteles fue considerado traidor y colaborador del invasor, y se marchó a la costa, donde decidió iniciar una obra para comprender la realidad. A su vuelta a Atenas, fundó el Liceo, donde creó la primera biblioteca.

Asimismo, Aristóteles fue el primero en establecer una especialización de las ciencias (biología, lingüística, lógica, meteorología, entre otras).

Tema Central: Virtud y Felicidad en la Ética a Nicómaco

Aristóteles se distancia de la filosofía de Platón al enfocarse no en una visión global de la realidad, sino en el lugar del ser humano dentro de ella. Este enfoque lo hace más «moderno», ya que el problema a resolver es la relación entre el individuo y su entorno. La obra que exploraremos es la Ética a Nicómaco.

En su obra Política, Aristóteles afirma que el ser humano es un «zoon politikon» («animal político»). Solo dos tipos de seres pueden vivir en soledad: los dioses y las bestias. Los seres humanos, al no ser ni lo uno ni lo otro, necesitan vivir en sociedad. Sin embargo, también requieren momentos de soledad, lo que plantea la necesidad de una ética y una política.

La palabra «ética» proviene del griego «ethos» (costumbres, acciones en sociedad). Como seres humanos, actuamos y tomamos decisiones constantemente, por lo que necesitamos un conocimiento sobre nuestras acciones. La Ética a Nicómaco no ofrece consejos ni soluciones mágicas, sino un conjunto de conocimientos para actuar.

¿Qué es la Virtud?

Aristóteles propone dos teorías para alcanzar el saber sobre la acción:

A) Teoría de las Cuatro Causas:

  • Causa Formal: La estructura u organización de los elementos que hacen que algo sea lo que es.
  • Causa Material: La materia que compone algo, junto con la forma, determina su ser (teoría hilemórfica). En ética, debemos considerar nuestra forma y materia como seres humanos.
  • Causa Eficiente (o Agente): Aquello que produce directamente la acción.
  • Causa Final: La finalidad o propósito de algo, presente desde antes de su existencia, durante ella y después.

En resumen, la existencia de cualquier elemento es el resultado de su forma, materia, agente y fin.

B) Teoría del Acto y la Potencia:

  • En Potencia: Las posibilidades latentes de llegar a ser algo más.
  • En Acto: La realización de alguna de esas posibilidades.

Aristóteles concibe la vida como un proceso dinámico de la potencia al acto, donde cada acto genera nuevas potencias. Aplicado al ser humano, esto significa que somos algo en acto, pero con el potencial de ser muchas otras cosas. De ahí la frase: «el ser se dice de muchas formas».

Utilidad de las Teorías de las Cuatro Causas y Acto-Potencia:

Estas teorías se aplican al ser humano de la siguiente manera:

  • A diferencia de Platón, para quien alma y cuerpo son realidades separadas, Aristóteles considera que son inseparables e influyentes entre sí. Un ser humano es una unidad de forma (alma) y materia (cuerpo). La causa final es la más importante: cada ser humano tiene un propósito, aunque a veces esté en potencia. Nuestras acciones se comprenden cuando ese fin pasa de la potencia al acto.
  • Necesitamos conocer nuestra finalidad. Aristóteles afirma que todo busca su fin, actuando según su naturaleza. En el caso del ser humano, nuestra naturaleza es la complejidad, la capacidad de razonar. La Ética a Nicómaco busca proporcionar herramientas para comprender esta complejidad.

La «virtud» es la excelencia en la realización de una actividad. Como seres racionales, nuestra actividad propia es la actividad racional. Por lo tanto, la virtud humana es la excelencia en la actividad racional. La Ética a Nicómaco se enfoca en el saber necesario para alcanzar esta virtud, que se manifiesta en virtudes menores (acciones) que nos llevan a una virtud mayor (la excelencia en la vida). Estas virtudes nos ayudan a pasar de la potencia al acto, a «ser buenos en lo que somos». Existen dos tipos de virtudes:

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