Nícolás Maquiavelo (1469-1527) se le conoce como el fundador de la Política Moderna. Es
responsable de la autonomía de dicha ciencia, previniendo las preocupaciones filosóficas de la política y al
mismo tiempo la desvinculó de la fe y la moral cristiana medieval. La obra de este filósofo “trata de las
condiciones en las cuales se vive y no de las condiciones en las cuales se debe vivir”.
La filosofía política tradicional, heredada de la filosofía griega, buscaba describir, en términos
generales, el buen gobierno. Intentaba presentar las normas que debe seguir un gobernante ideal para
alcanzar el éxito en su gobierno. Maquiavelo en “El Príncipe” señala cómo los hombres gobiernan
verdaderamente, reconoce que en política predomina la lógica de la fuerza, por tanto, considera imposible
el ejercicio del poder sin recurrir, en mayor o menor grado, a la violencia.
Se le atribuye la frase “el fin justifica los medios”, se interpreta en el sentido de que poco importa
que para construir una sociedad justa, un gobernante recurra a los medios más ilícitos que se pueda uno
imaginar.
Esa concepción política que deja de lado las consideraciones morales señala el surgimiento de un
nuevo orden social.
Ese orden es temporal y mundano que ha de ser administrado por le Estado. En ese
Ese orden es temporal y mundano que ha de ser administrado por le Estado. En ese
momento histórico el feudalismo se desmoronó y dejó lugar a las monarquías nacionales, Por eso, era
necesaria una teoría que justificase el fortalecimiento del Estado soberano y secular.
El concepto moderno de Estado se empezó a utilizar en el Renacimiento y en la Edad Moderna
(Siglo XVI aprox.) pasó a designar una realidad nueva que abarcaba un territorio cuyos habitantes eran
gobernador por un poder central. Se le identifica también con la propia organización sociopolítica de ese
territorio.
Corresponde al Estado crear y aplicar leyes, recolectar impuestos, mantener un ejército que proteja
su territorio.
John Locke
Cuando Jaime II a través de la revolución fue depuesto y sustituido por Guillermo de Orange, Locke
se convierte en el teorizador del régimen.
Locke representa la ideología liberal. Rechaza el patriarcalismo de Filmer y su doctrina del derecho
divino y del absolutismo de la realeza.
El punto de partida de Locke: El estado de la naturaleza consiste en la igualdad y la libertad, porque
los hombres tienen las mismas condiciones de nacimiento y facultades, no tiene matiza agresivo. De la
libertad surge la obligación, hay un dueño y señor de todas las cosas, que es Dios, el cual impone una ley
natural. Por eso la forma de Estado debe ser la monarquía constitucional y representativa, con
independencia respecto a la Iglesia, tolerante en materia de religión. El pensamiento de Locke corresponde
a la forma de gobierno adoptada en Inglaterra, a raíz de la revolución de 1688 que eliminó las guerras
civiles y revoluciones para un periodo que ha durado ya más de un cuarto de milenio.
Jean Jacques Rousseau (1712-1778)
Según el filósofo el hombre nacía bueno por naturaleza, pero posteriormente la sociedad lo
corrompía. De igual modo, el hombre nacía libre, sin embargo, por todos lados se encontraba en cadenado
y rodeado por factores como su propia vanidad, fruto de la corrupción del corazón. El hombre se convertía
en esclavo de sus necesidades y de aquellas que los rodeaban, que en cierto modo, se refieren a una
preocupación constante por las apariencias, como sería el orgullo y la búsqueda de estatus.
El filósofo pensaba que era posible crear una sociedad ideal así se refleja en la concepción de la
Revolución Francesa de finales del Siglo XVIII.
La pregunta planteada era la siguiente: ¿Cómo preservar la libertad natural del hombre y al mismo
tiempo garantizar la seguridad, el bienestar de la vida en sociedad? Según Rousseau ello sería posible a
través de un Contrato Social, por medio del cual prevalecería la soberanía del pueblo, la soberanía política
de la voluntad colectiva.
Rousseau percibíó que la búsqueda por el bienestar era el único móvil de las acciones humanas y
del mismo modo, en determinados momentos, el interés común podría acarrear la cooperación de la
colectividad. Sin embargo, por otra parte, la competencia haría que todos desconfiaran de todos, por lo
cual en el Contrato Social sería preciso de definir la cuestión de la igualdad entre todos, del compromiso de
Este filósofo creía que debía instaurarse la justicia y la paz para someter lo mismo al poderoso que
al débil, procurando la concordia permanente entre los miembros que conforman la comunidad. Un punto
fundamente que señala se refiere a que la propiedad privada es el origen de la desigualdad social, porque
suele suceder que quien tiene de más es porque lo ha usurpado de otros. El origen de la propiedad privada
aparecíó cuando surgíó la sociedad civil. El hombre empezó a preocuparse por las apariencias. En la vida
en sociedad “ser y parecer” se convirtieron en dos cosas diferentes. Para Rousseau el caos vino por la
desigualdad de los hombres, por la destrucción natural de la piedad y de la justicia, volviendo a los
hombres malos., lo que pondría a la sociedad en estado de guerra. En la formación de la sociedad civil,
toda la compasión de los hombres cayó por tierra, fue entonces que el hombre tuvo necesidad del socorro
de los demás y se dio cuenta que era necesario contar con provisiones de reserva para sobrevivir,
desapareciendo la igualdad introducíéndose en su lugar la propiedad privada y el trabajo fue, entonces,
requisito indispensable para aumentar los bienes particulares.
De ahí, entonces, la necesidad del Contrato social, pues los hombres, después de haber perdido su
libertad natural, necesitarían ganar la libertad civil, siendo el Contrato Social el mecanismo para ello. El
pueblo sería al mismo tiempo parte activa y pasiva de este contrato, es decir, actor de la elaboración de las
leyes y someterse a las mismas, entendiendo que obedecer la ley voluntariamente no es más que un acto
de libertad.