Filosofía de Habermas, Ortega y Gasset: Racionalidad, Perspectivismo y Raciovitalismo

Habermas

Habermas transita de la crítica de la razón instrumental a la razón dialógica. En la Escuela de Frankfurt, critica la racionalidad moderna y la sociedad capitalista, en esta última se encuentra la cultura como instrumento de manipulación de las masas. Horkheimer analizó las promesas de progreso y emancipación, desacreditadas por la barbarie y la destrucción del siglo XX. También abordó la razón instrumental, que busca medios para alcanzar fines sin reflexionar sobre su bondad, y un saber asociado al poder, convirtiéndose en instrumento de control y sometimiento.

Por ello, propuso varias alternativas: el adorno, donde se refugia en la belleza del arte, y Horkheimer, con una trascendencia del más allá.

Habermas lidera la segunda Escuela de Frankfurt con los objetivos de superar el pesimismo y reafirmar el valor de la racionalidad. En los conocimientos se encuentran los siguientes intereses:

  • Técnica: Busca el control de los fenómenos naturales.
  • Práctico: Se centra en la motivación y en fomentar la comunicación.
  • Emancipatorio: Busca transformar la realidad mediante la igualdad, la justicia y la libertad.

Con una racionalidad dialógica, se promueve el uso compartido del lenguaje y la capacidad de diálogo.

El lenguaje es la herramienta que permite el entendimiento y los acuerdos. Existe una situación ideal del diálogo basada en la comprensibilidad, la sinceridad, la veracidad y la corrección normativa. La ética dialógica critica las sociedades contemporáneas con un entorno individual, colonizado por las instituciones.

Para solucionar esto, propone diferenciar tres dimensiones de la racionalidad práctica:

  • Pragmática: La técnica instrumental.
  • Ética: El concepto individual del bien.
  • Moral social: Busca la igualdad y la justicia.

Objetivismo y Preocupación Social: Las Masas y la Élite

En 1902, Ortega diagnostica el «problema de España»: su distanciamiento de Europa. Las razones son la ausencia de pensamiento profundo, la tendencia a la literatura y las discusiones sin sentido ni resultados. Existe una decadencia en España por la falta de ciencia y teoría. La ciencia es objetiva, concreta y racional.

Influenciado por su profesor de Marburgo, quien abogaba por el estudio de los objetos y las cosas, y por la física matemática (saberes rigurosos, concretos y serios), Ortega ve en esta última el modelo para la ciencia y la filosofía.

Ortega propone el objetivismo. El atraso de España es social, político, técnico y cultural. Para solucionarlo, es crucial implementar las actitudes intelectuales europeas. España sufre un atraso científico, mientras que en Europa la ciencia proporciona superioridad intelectual, resultado de la disciplina intelectual basada en el objetivismo. Para desarrollar la ciencia, se necesita un método que ponga fin a las falsas discusiones, una actitud crítica (no bastan las buenas intenciones, se debe pensar con rigor) y racionalidad (no exclusiva de los europeos, cualquier pueblo puede alcanzarla).

Para una cultura fuerte y unificadora, se requiere sistematicidad. Para ser rigurosa, debe partir de los objetos percibidos, convertidos en conceptos y, a su vez, en redes.

Con la preocupación social por renovar la cultura española y acabar con la falta de ciencia, Ortega propone un modelo intelectual: la élite como columna vertebral de España. De acuerdo con el Krausismo, la educación es la solución para superar el atraso cultural. Por tanto, se debe cuidar la educación de la élite.

Para una sociedad poderosa, una minoría debe organizar a la masa. Se imponen los individuos notables, y la masa los sigue, independientemente de la riqueza. La élite, virtuosa y modélica, debe guiar a la masa, dócil y obediente, que debe aspirar a mejorar y aprender. En España, quien destaca es criticado. Cuando la masa deja de serlo, intenta arrebatar el poder, destruyendo la sociedad. La solución reside en la educación.

Ortega crea una élite para gobernar y una masa (el pueblo) que no interviene en la elección, sino que acepta o rechaza y legitima a la élite gobernante. Lo crucial es la identificación, elegir el bien y educar excelentemente a quienes dirigirán a la masa.

Perspectivismo y Raciovitalismo

Nuestro yo es el sujeto y el proyecto, este último es nuestro proyecto de vida, con un deseo y una lucha por ser algo, lo que intentamos convertir en realidad. El ser humano posee libertad radical, con la intención de ser y la capacidad de justificar sus elecciones. Las circunstancias son todo aquello que rodea a nuestro yo, unido a él en un espacio antropológico donde se encuentran los demás, las cosas, las instituciones, los elementos (sociales y naturales), las ideas y las creencias. Lo que no es nuestro yo se compone del mundo físico, la cultura, la historia y la sociedad. Dentro o con nosotros se encuentra el «puerdo» (capacidades, facilidades o dificultades) y lo psicológico. El ser humano no elige sus circunstancias, sino que se encuentra con ellas.

En el perspectivismo, los elementos fundamentales del ser humano son el yo y las circunstancias. Para conocer la verdad, solo tenemos el punto de vista y las perspectivas. Para alcanzar la verdad, el ser humano debe ser consciente y leal a su perspectiva, que es un aporte real al mundo, una parte de la realidad. Ortega buscaba superar el escepticismo y el racionalismo, aceptando todas las perspectivas. Debe haber tolerancia, sin imponer un punto de vista sobre otro, y se debe proclamar la diversidad. Lo importante no es catalogar la realidad, sino entenderla uniendo diferentes puntos de vista. Ortega propone la unión del yo y las cosas, formando la vida.

El raciovitalismo une las dos perspectivas más importantes del ser humano: la vida y la razón. Critica el vitalismo y el racionalismo, tomando de cada uno lo correcto, para luego producir una síntesis. Ambas perspectivas son válidas: la vida es realidad, y la razón intenta entenderla.

Del racionalismo, critica los excesos y la visión antropológica limitada, pero defiende la crítica racional. Del vitalismo, critica la visión antropológica limitada y la postura irracional. El vitalismo es una noción biológica y filosófica. En la biología, los fenómenos orgánicos tienen leyes propias, inexplicables solo con leyes físico-químicas. La filosofía vitalista parte de la biología; la vida es un tipo de conocimiento intuitivo, y el conocimiento racional tiene a la vida como objeto. El papel de la filosofía es la relación entre vida y razón.

Para Ortega, la vida es una realidad radical, base de otras realidades. La vida humana se basa en nuestro proyecto y nuestro yo. Es un guión que cada individuo diseña, no una teoría, un pensamiento o una contemplación, sino acción y pensamiento.

El raciovitalismo une la racionalidad de la vida y la vitalidad de la razón. Es un método de análisis filosófico que combina críticamente datos, perspectivas e interpretaciones, con la doble función de descubrir y comprender el mundo. Logra una comprensión sistemática de la realidad gracias a la estructura racional, la expansión biológica, la progresión histórica, la condición espacio-temporal y la dialéctica universal e individual. Es una teoría de la realidad formulada por la síntesis de historicismo, vitalismo, fenomenología y hermenéutica.

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