Descartes
Marco histórico-filosófico
El siglo XVII fue época de crisis en sectores económicos, religiosos, políticos y sociales. La unidad religiosa se había roto con la Reforma protestante. La Iglesia católica reaccionó con la Contrarreforma y la Inquisición, lo que desencadenó conflictos religiosos como la Guerra de los Treinta Años. En 1648 se firmó la Paz de Westfalia, que marcó el principio de la tolerancia religiosa.
En este contexto, continuó la transición del feudalismo al capitalismo y se estableció el absolutismo en las monarquías como sistema político. En la sociedad estamental, la burguesía fue cobrando fuerza y capacidad para generar mayores ingresos fiscales.
En el terreno cultural, se produjo una proliferación de libros impresos. El arte barroco expresó las contradicciones de la época, como el dinamismo y la inquietud.
Marco filosófico
Era el momento de la inestabilidad y la duda. Conceptos fundamentales como el geocentrismo se pusieron en entredicho y se buscó un nuevo modelo científico de explicación de los fenómenos naturales. La Iglesia se manifestó en contra de estas innovaciones.
La Filosofía moderna rechazó el argumento de la autoridad y la fundamentación religiosa. Surgieron dos grandes sistemas: el racionalismo y el empirismo. La figura filosófica del racionalismo fue Descartes, quien depositó una confianza plena en la razón humana y abogó por una total independencia respecto a la fe, afirmando que los principios del conocimiento son innatos. El empirismo, por su parte, negaría la existencia de ideas innatas y consideraría que la experiencia es la fuente y el límite del conocimiento humano.
Teoría del conocimiento
Descartes buscaba principios verdaderos e indudables, tomando como referente las matemáticas. Para ello, estableció cuatro reglas:
- Evidencia: claridad y distinción. Una idea es clara cuando la mente la percibe sin obstáculos.
- Análisis: descomponer los conocimientos hasta llegar a elementos simples.
- Síntesis: empezar un proceso de deducción partiendo de ideas simples hasta llegar a reconstruir lo más complejo.
- Enumeración: revisar y comprobar todo el proceso de análisis y síntesis.
La duda cartesiana es universal y radical, metódica, provisional y constructiva, no escéptica y teórica.
Moral
La duda metódica supone inseguridad en el terreno de la acción. Descartes propone una moral provisional que consiste en cuatro máximas:
- Obedecer las leyes y las costumbres, seguir la religión tradicional y las opiniones aceptadas y moderadas.
- Una vez aceptada una opinión, ser firme y resuelto en seguirla.
- Autodominio y aceptación del destino, inspirados en la moral estoica.
- Elegir el cultivo de la razón, que es lo más propio del hombre.
El universo cartesiano es mecanicista y, en la naturaleza mecanicista, no hay libertad: todo sucede por necesidad. La conciencia de la libertad es una idea innata y es porque el hombre es libre por lo que puede dudar. La libertad consiste en elegir lo que la razón propone como bueno y verdadero, posibilita la perfección y la felicidad. El error se produce cuando la voluntad va más allá de los límites del entendimiento o se ve perturbada por la influencia de las pasiones, que son involuntarias y escapan al control del alma, o están en desacuerdo con la razón y provocan la servidumbre del alma. No se trata de eliminar las pasiones, sino de ordenarlas, someterlas a la razón. Este ideal de autodominio confirma la influencia del estoicismo.
Metafísica
La sustancia pensante
«Pienso, luego existo» (Cogito ergo sum), pero todo aquello que la mente piensa o percibe sigue siendo objeto de duda. Las ideas son actos mentales (realidad subjetiva), pero no todas tienen una realidad objetiva. Descartes distingue tres tipos de ideas:
- Adventicias: provienen de la experiencia externa.
- Facticias: parten de otras ideas.
- Innatas: ideas claras y distintas.
El concepto antropológico de Descartes
En el ser humano hay dos sustancias independientes: cuerpo y alma. El alma es indivisible, inmortal y puede existir sin el cuerpo. Las ideas innatas se perciben con absoluta claridad y distinción. Las facultades del alma son la memoria, la imaginación, el sentido común, la voluntad y el entendimiento. La unión cuerpo y alma es accidental. El alma es consciencia.
Las dos sustancias son heterogéneas y hay una comunicación que Descartes justifica recurriendo a la glándula pineal, en el cerebro.
La sustancia infinita (Dios)
La idea de infinito ha sido puesta en mí por un ser que reunió todas las perfecciones que pueda pensar (argumento ontológico). La existencia forma parte de la esencia de Dios. Una vez demostrada la existencia de Dios, queda garantizado el principio de evidencia, porque Dios, en su infinita bondad, no permitiría que me equivocara al percibir algo con absoluta claridad y distinción. Dios es garantía de toda verdad.
La sustancia extensa (el mundo)
: en el universo cartesiano todo es materia y movimiento. Dios creo la materia y cn ella el movimiento. Dios es inmutable y no pude ser sometido a cambio. Leyes d la fisica: inercia, direccion dl movimiento, conservacion dl movimiento. Descartes, mecanicismo en cuerpos vivos.