Filosofía Presocrática: Origen, Características y Principales Exponentes

Diferencias entre Mitología y Filosofía

La mitología intenta explicar los fenómenos de la naturaleza a través de la fantasía, en cambio la filosofía lo hace por medio de la razón, buscando respuestas racionales. El mito personifica en forma de dioses a las fuerzas de la naturaleza o a los valores humanos (antropomorfismo), mientras que la filosofía recurre a la capacidad de abstracción humana. Los mitos se transmiten de forma oral (hasta Homero y Hesíodo) y la filosofía de manera escrita. La filosofía busca la verdad y la mitología se conforma con la verosimilitud.

Características de la Filosofía Presocrática

Los filósofos presocráticos (anteriores a Sócrates, excepto algunos como Demócrito) son un grupo de pensadores que vivieron entre los siglos VI y IV a.C. Se caracterizaron por las preguntas que plantearon sobre el ser, que era la naturaleza (physis) considerada el origen de todo, y su origen (arjé), por el cual se origina la realidad. Esbozaron ideas y conceptos filosóficos de gran hondura intelectual (infinito, el tiempo) y se dividen en monistas (arjé como único elemento) y pluralistas (varios).

Características de la Filosofía Presocrática Monista

La filosofía presocrática monista defiende que el origen de todo se origina a partir de un solo elemento (arjé) y tiene comienzo en el siglo VI a.C. A los filósofos monistas les mueve la idea de repensar el mundo desde bases racionales. Tratan de buscar cómo se creó el universo (cosmogonía) y cuáles son las leyes que lo rigen (cosmología). Se centran en la investigación natural donde filosofía y ciencia van de la mano. De todos ellos nos llegan o fragmentos de sus obras o las opiniones que tenían otros filósofos sobre ellos.

Tales de Mileto

Tales de Mileto fue el primero en plantearse si todas las cosas compartían algún elemento esencial, que al transformarse diese lugar a todo. Dedujo que ese arjé era el agua (quizá fue así porque vivía cerca de la orilla del mar, o porque era el más activo de los elementos, o por su importancia para la vida). Fue considerado uno de los Siete Sabios de Grecia, predijo un eclipse en el 585 a. C. Él huye de las analogías explicativas que se construyen personificando las fuerzas de la naturaleza. Es el primero en servirse de analogías objetivas para explicar un fenómeno natural: la tierra es como un barco que flota en el agua y los terremotos son los cabeceos del barco. Su cosmología puede ser una racionalización de las teorías míticas orientales que afirman que la Tierra procede del agua.

Corriente Pluralista y su Teoría

Trata de enfrentarse a la tarea de superar el conflicto entre los datos de la experiencia sensible y las conclusiones a las que nos lleva una argumentación basada en las leyes de la lógica. Los pluralistas coincidieron en que el Ser es engendrado e indestructible, pero se resistieron a aceptar que no exista el cambio.

Empédocles

Empédocles fue el primero en intentar salvar las dificultades planteadas por Parménides. Afirmó que toda realidad física está compuesta por cuatro elementos: agua, aire, tierra y fuego. Unos se distinguen de otros gracias a las diferentes proporciones en las que se combinan, y así aceptó el principio parmenídeo en donde no es posible surgir ni perecer de la nada. El nacer será la unión de partículas y la muerte su separación, exceptuando los cuatro elementos que son inmutables.

Finalmente admitió el cambio y lo explicó de la siguiente manera: primero distinguió la materia de los elementos de la fuerza que los mueve. Así, los cuatro elementos pueden experimentar movimientos de atracción (lo relaciona con el amor) y de repulsión (el odio) que los separa.

Cuando en el universo todos los elementos se integran en una realidad única, es porque se ha producido el triunfo pleno del Amor (Sphairos). Así, el Odio comienza su trabajo hasta lograr la disgregación de los cuatro elementos, dando lugar a las construcciones y destrucciones del universo. Y esto ocurre de manera indefinida.

Los Filósofos Milesios: Justificación Racional de sus Teorías

Estos son Tales de Mileto, Anaximandro de Mileto y Anaxímenes de Mileto. Confieren como arjé una realidad única que posee en sí misma el principio de movimiento. Se llaman así porque proceden de la isla de Mileto, eran filósofos monistas y por ello consideraban un único arjé.

La justificación racional de Tales acerca de por qué todo surge a partir del agua es que esta es la más activa de todos los elementos, y la importancia que tiene esta sobre la vida de las plantas y los animales. “La tierra es como un barco que flota en el agua y los terremotos son los cabeceos del barco”.

El Arjé de la Physis según los Filósofos Presocráticos

Tales de Mileto: El Agua

(Explicado anteriormente)

Anaximandro: El Ápeiron

El ápeiron (sustancia indefinida y eterna). No es ninguno de los elementos u opuestos sino la base que los genera. Es eterno e imperecedero, es decir, todos los elementos nacen de él y al perecer vuelven a él. Tiene la capacidad de moverse a sí mismo y gobernar otras cosas que no se pueden mover por sí solas. Controla y alienta desde el límite del universo hasta la lucha de opuestos.

Anaxímenes: El Aire

El aire. Es la sustancia más indeterminada al carecer de olor, color, sabor, etc. Él pone de manifiesto los procesos por medio de los cuales se genera el cosmos a partir del aire. En su elección del aire debió influir cómo este es nuestra fuente de vida (que sería la respiración) y su trasladación al cosmos por medio de una analogía en la que unen el microcosmos humano con el macrocosmos.

Pitágoras: Los Números

Los números. Debió de ser por el amor hacia las matemáticas por lo que escogió a los números (realidades materiales) como arjé. Decía que las matemáticas debían gobernar la naturaleza. Así, todas las cosas se originan de los números a través de tres fases: 1. los números se generan a partir de sus elementos (par, impar y la unidad), 2. de lo numérico surge lo geométrico y 3. de las figuras geométricas los cuerpos físicos.

Heráclito de Efeso: El Fuego Eterno

El fuego eterno. El arjé era una especie de fuego eterno, donde “todo fluye, nada permanece”. Este fuego expresa la medida o límites precisos para lograr el equilibrio de los contrarios en el orden cósmico.

Parménides: El Ser

El Ser. Las propiedades que debe de tener el Ser son: que no es engendrado ya que si lo fuese provendría del No-Ser, (y no puede darse esta posibilidad porque el No- Ser no es). Es indestructible (ya que si lo fuera podría transformarse en el No-Ser, lo cual es imposible), es inmóvil (puesto que cualquier cambio o movimiento haría que pasase del Ser al No- Ser, o viceversa, lo que es imposible), es único, continuo, limitado y esférico.

Empédocles: Los Cuatro Elementos

(Explicado anteriormente)

Anaxágoras: Las Semillas u Homeomerías

Las semillas u homeomerías. Para él, el arjé eran semillas u homeomerías (partículas homogéneas de materia), y existía una realidad generadora del movimiento, llamada nous. Gracias al nous, estas semillas pasaron de ser un caos original a constituir la multiplicidad de seres observables en el mundo físico, y es lo que se conoce como proceso cosmogónico. El nous es autónomo y no está mezclado con ninguna cosa, es la más sutil y pura de todas las cosas.

Demócrito: Los Átomos

Los átomos. El átomo (aquello que no tiene partes), tienen todas las propiedades del Ser de Parménides excepto dos: son innumerables y no son esféricos. Entre un átomo y otro se encuentra el vacío, que es el No-Ser de Parménides. La realidad es el resultado de choques por azar de átomos flotando en el vacío.

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