Karl Marx: Vida, Obra y Pensamiento Clave

Vida y Obra de Karl Marx

Karl Marx nació en 1818 en Alemania, en el seno de una familia judía convertida al cristianismo. Fue educado en el protestantismo, pero más tarde abandonó la religión. En 1836 ingresó en la Universidad de Berlín en la Facultad de Derecho, que abandonó al verse influenciado por la filosofía hegeliana para dedicarse completamente a la filosofía. La idea principal de la filosofía de Hegel fue la del desarrollo histórico de cada cultura o nación, caracterizada por unas leyes mentales o espirituales propias. Hegel aplicó esta filosofía al mundo entero, identificó la realidad con lo absoluto y la historia humana con la autorrealización de este espíritu absoluto.

Seguidores de Hegel

Los hegelianos de derecha mantenían que el desarrollo histórico conducía a los mejores resultados posibles; eran conservadores y religiosos. Los hegelianos de izquierda (jóvenes) pensaban que el ideal aún tenía que ser realizado, que el deber del hombre era ayudar a cambiar el viejo orden y asistir al desarrollo de la siguiente etapa de la historia humana; eran radicales y ateos.

Feuerbach fue uno de los pensadores más importantes de los hegelianos de izquierda. Escribió La esencia del cristianismo (1841) y sostenía que en lo religioso el hombre había invertido todo, afirmando así que las ideas religiosas son un pálido reflejo del mundo como única realidad. Los hombres necesitan creer en estas ideas ya que están alienados, por lo que la metafísica es la expresión de sentimientos procedentes de nuestro interior y la religión es la expresión de la alienación. La lectura de Feuerbach por Marx rompió el hechizo que Hegel había ejercido en él, pero permaneció la idea de Hegel sobre la verdad de la naturaleza y la sociedad humana ocultadas bajo una forma invertida.

Marx escribió una crítica a La filosofía del derecho de Hegel (1842-1843) y dirigió un periódico radical de política y economía que más tarde fue suprimido, por lo que emigró a París en 1843, donde fue influenciado por pensadores socialistas y comunistas. En 1845 fue expulsado de París y se trasladó a Bruselas. Durante estos años formuló su teoría materialista de la historia. Al invertir el punto de vista de Hegel, Marx llegó a ver en la fuerza impulsora del cambio histórico un carácter material. La clave de toda la historia yace en las condiciones económicas. La alienación es social y económica. Bajo el sistema capitalista, el trabajo es algo externo y ajeno al trabajador, quien se aliena del producto como propiedad privada. Este diagnóstico de alienación se encuentra en los Manuscritos económicos y filosóficos de Marx.

En Bruselas, Marx se comprometió en la organización práctica del movimiento socialista y comunista. Su propósito más importante fue no solo interpretar el mundo, sino transformarlo. Convencido de que el capitalismo dejaría paso al comunismo, trató de educar y organizar al proletariado, clase que él vio que vería la victoria en la lucha. Escribió una formulación de los fines del movimiento comunista internacional y, junto con Engels, elaboró el famoso Manifiesto del Partido Comunista. En 1857-58 escribió manuscritos llamados Grundrisse, en los que presenta un plan de su teoría total de la historia y la sociedad. En 1859 publicó Una crítica de la economía política, y en 1867 el primer volumen de su obra más sustancial, El capital. Estas dos últimas obras contienen una historia económica y social que refleja los resultados de los trabajos de Marx, que trataba de aplicar su interpretación materialista. Han constituido gran parte de la teoría comunista. Encontramos filosofía alemana, socialismo francés y economía política británica. Engels lo llamó socialismo científico porque Marx y Engels pensaban haber descubierto el método científico correcto para el estudio de la historia. Hay dos periodos en su pensamiento: una fase primitiva denominada humanista, para dar el paso al socialismo científico (segunda fase).

Diagnóstico de la Alienación

La teoría de Marx acerca de qué es lo que anda mal respecto del hombre y la realidad incluye su concepto de alienación, influenciado por Hegel y Feuerbach. Para Marx, la alienación resume lo que hay de erróneo en el capitalismo. La alienación es una relación respecto de alguien o algo. Marx dice que la alienación lo es respecto del hombre mismo y la naturaleza. La naturaleza se refiere al mundo creado por el hombre. Los hombres no son lo que deberían ser porque están alienados por los objetos y relaciones sociales que crearon. La idea general es que la sociedad capitalista no está de acuerdo en algunos aspectos con la naturaleza básica humana. Marx culpa principalmente de la alienación a la propiedad privada, cuando dice que la abolición de la propiedad privada es la abolición de la alienación. Pero en otra parte dice que, aunque la propiedad privada parece ser la base y causa del trabajo alienado, es más bien una consecuencia del último. Describe la alienación del trabajo como consciente. Su trabajo es obligatorio como medio para satisfacer otras necesidades, y en el trabajo no se pertenece a sí mismo, sino a otra persona. Incluso los objetos que produce son ajenos a él porque es otro quien los posee. Marx echa la culpa de la alienación a la institución del dinero como medio de cambio que reduce las relaciones sociales. En otro lugar dice que la división del trabajo convierte la obra del hombre en un poder ajeno opuesto a él, que le impide cambiar de una actitud a otra. Marx diagnostica como causa básica de la alienación que siempre es malo tratar a cualquier ser humano solo como un medio para un fin económico. Esto ocurría en el capitalismo de principios del siglo XIX: los niños trabajaban largas horas y morían jóvenes. La industria está hecha para el hombre, no el hombre para la industria.

Prescripción: La Revolución Comunista

Si la alienación es un problema social causado por la naturaleza del sistema económico capitalista, entonces la solución es abolir ese sistema y reemplazarlo por otro mejor. Marx piensa que el capitalismo se explotará y el comunismo introducirá el nuevo orden de cosas en el que desaparecerán la alienación y el hombre será regenerado en su naturaleza verdadera. Marx sostiene que una revolución del sistema económico lo conseguirá. No sirve llevar a cabo reformas, salarios más altos, jornadas más cortas… ya que no alteran la naturaleza viciada del sistema básico, solamente distraen la atención de la tarea real que es derrocarlo. De ahí la diferencia entre el Partido Comunista y los sindicatos ante los partidos demócratas sociales. Esta doctrina de la impotencia política, limitar los excesos de la explotación de los trabajadores, mejoraron la seguridad nacional, el seguro de desempleo, los servicios de salud pública y el progreso de los sindicatos, aumentando los salarios y la disminución de las horas de trabajo. Muchas de las medidas propuestas por el Manifiesto Comunista se han implantado en los países capitalistas. El sistema capitalista que Marx conoció ha dejado de existir, ha sido transformado mediante una reforma lograda paso a paso. La abolición de la propiedad privada asegura la desaparición de la alienación, sugiere que habrá un período intermedio durante el cual tendrá lugar la transición, donde habrá una dictadura del proletariado. En la fase superior de la sociedad comunista, el Estado desaparecerá y empezará el verdadero reino de la libertad. Y el principio orientador podrá ser: de cada uno según su capacidad, a cada uno según sus necesidades… Esta visión es irreal.

Con otros elementos de la visión de Marx estamos de acuerdo. La idea de una sociedad descentralizada en la que los hombres operen en comunidades para el bien común, la aplicación de la ciencia y la tecnología para producir bastante para todos, la reducción de la jornada de trabajo de modo que los hombres puedan cada vez más dedicar su tiempo de ocio al libre desarrollo de la sociedad en equilibrio con la naturaleza, son ideales que todo el mundo compartiría. El marxismo tiene la atención de tanta gente porque ofrece ese tipo de esperanza, de visión del futuro. Es más que una teoría, y la discutibilidad de sus acepciones teóricas no le hace caer y morir. Contiene una receta de salvación social y ofrece una crítica de toda sociedad existente.

Lo Característico del Pensamiento Marxista

Lo característico es su interpretación de la historia. Sostuvo que hay leyes universales tras el cambio histórico y que el curso futuro de la historia a largo plazo puede predecirse a partir del conocimiento de estas leyes. Dividió la historia en las fases asiática, clásica, feudal, burguesa o capitalista, y mantuvo que cada una tenía que dar paso a la siguiente cuando las condiciones estuvieran maduras. La historia es el estudio de lo que ha sucedido en el planeta en un período de tiempo; su materia es amplia, pero es una especial serie de sucesos, por ello la historia humana es única. Es imposible postular una ley general del desarrollo subyacente a la historia humana.

Estar alienado: Estar fuera de uno mismo, es ser para otro, es falta de conciencia.

Las leyes del desarrollo histórico son: las leyes espirituales y mentales.

Concepción materialista de la historia: Es la teoría en la que dice que las supuestas leyes de la historia son económicas por naturaleza. El modo de producción de vida material determina el carácter general de la vida social, política y espiritual.

Dos periodos en su pensamiento: una fase primitiva, denominada humanista, para dar paso al socialismo científico (segunda fase).

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